Sergio Ramos volvió a mandar un dardo en dirección a Sevilla tras el partido contra el Málaga. En esta ocasión, fue Pepe Castro el objetivo de las palabras del camero. El central aseguró que le sorprendía que el presidente no se pudiera en contra de los violentos, y la respuesta no ha tardado en llegar.

Pepe Castro, en la entrega del Trofeo Comunidad Iberoamericana a Jorge Sampaoli, se ha mostrado sorprendido que de lo primero que le preguntasen fuera de Ramos y no de que el Sevilla vaya segundo y con récord de puntos. Sin embargo, posteriormente ha contestado al madridista pese a los halagos iniciales. "Sergio es un magnífico futbolista, pero ahora está en el Real Madrid. Si quiere aconsejar a alguien que sea a su presidente", ha asegurado. Además, ha añadido que "el Sevilla trabaja más de lo que se cree en erradicar la violencia verbal, aunque aún quedan cosas por arreglar".

También ha aprovechado para recordar que "fue esta directiva la que le hizo un homenaje a Sergio Ramos", pero señala que "no se puede evitar que haya una parte de la grada que le diga cosas". Sin embargo, echa parte de culpa de la situación al propio futbolista porque, según el presidente, "no se puede ir provocando a la afición y al presidente de otro club. No hay vehemencia en mis palabras. Hay un presidente que ha intentado arreglar el problema y él ha deshecho el camino". Está claro que el problema entre ambas partes anda lejos de ser resuelto.