Juventud, velocidad y electricidad, con estas características se presentó Olga Carmona en el primer equipo femenino de la historia del Real Madrid Femenino. El conjunto blanco comenzó la temporada perdiendo contra el Barcelona, pero ha ido superándose para llevarlo a estas alturas del curso a la segunda posición de la clasificación de la Primera Iberdrola.

La futbolista llegó a Valdebebas el pasado verano luego de permanecer durante trece años en el Sevilla. En el equipo hispalense creció y se formó hasta el momento de dar el salto al primer equipo. Con él jugó en Segunda División y consiguió el ascenso a la categoría de oro del fútbol femenino en España.

También ha sido una de las habituales en las categorías inferiores de la Selección, llamando ya a la puerta de la Absoluta. El pasado curso, llegó a ser la segunda jugadora con más minutos en sus piernas y eso con 19 años. Fue el pasado 12 de junio cuando cumplió 20 y casi como un regalo le llegó su fichaje por el Real Madrid. Premio al trabajo de toda una vida.

La sevillana ya sabe lo que es saborear las mieles del éxito después de proclamarse campeona de Europa con la sub19 y pese a su juventud tiene muy claro lo que quiere. Carmona ya vio venir que en muy poco tiempo los resultados del Real Madrid Femenino iban a mejorar. "Cada vez se va notando más que nos vamos compenetrando mejor entre nosotras", dijo tras la victoria contra el Deportivo ABANCA. "Es muy positivo", añadió.

Velocidad y gol

Sus mejores cualidades pueden llevar a la comparación con los jugadores del primer equipo masculino Rodrygo y Vinicius. Ambos aterrizaron en el Santiago Bernabéu cumplida la mayoría de edad y es ese desborde por banda el que les ha ido abriendo puertas en el Real Madrid.

Como Vinicius Júnior, despliega su electricidad por banda izquierda. Una velocidad que también se puede comparar con la del otro brasileño. Rodrygo Goes es rápido, pero también ha demostrado un particular idilio con el gol, especialmente en la Champions League. Y, precisamente, es en la faceta del gol donde ya comienza a destacar Olga Carmona.

En la goleada del pasado fin de semana, la andaluza marcó dos de los ocho goles de las blancas. Dos dianas en media hora, el primero el que abrió la lata, para encarrilar una nueva victoria merengue y consolidar al Real Madrid Femenino como un equipo a tener en cuenta para los puestos que dan acceso a la Women's Champions League.

El sueño de Carmona

Con once partidos disputados, el Real Madrid Femenino es segundo con 25 puntos, tan solo uno menos que el Granadilla, el líder de la tabla. Eso sí, el Barcelona es tercero, pero con tres partidos menos que el resto. Las azulgranas todavía no saben lo que es perder en la 2020/2021 en el campeonato doméstico y tan solo han recibido un gol en contra.

Este gran momento del equipo blanco invita a pensar en una posible clasificación para la Champions femenina la próxima campaña. Aunque, por el momento, en la cabeza de las jugadoras tan solo debe estar la idea de ir superando "partido a partido", como diría el 'Cholo' Simeone. Precisamente, el conjunto rojiblanco es quinto a cuatro puntos de las merengues con los mismos duelos disputados.

Para lograr este objetivo, que se antojaba imposible a principio de curso, Olga Carmona tiene un papel crucial. La sevillana ha contado para David Aznar en este primer tramo de la temporada. Pero ha sido en el último mes cuando ha logrado quitarse la presión de encima y dar un paso adelante.

El paso adelante se estaba haciendo desear, ya que el fichaje de Olga Carmona fue una de las grandes apuestas de la casa blanca para el equipo femenino. La '7' firma un cien por cien de efectividad con tres goles en tres disparos a portería. De los ocho encuentros que ha disputado, ha sido titular en cinco y es por su buen rendimiento en los últimos choches por lo que se ha ganado un puesto en el once. Va a dar mucho que hablar.

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