Victoria del Real Madrid de baloncesto en el segundo partido de su serie de semifinales ante Bitci Baskonia. El conjunto blanco ha saldado sus dos encuentros en el WiZink Center con sendos triunfos que le sirven para viajar a Vitoria con la tranquilidad que le da en el marcador ese 2-0 que ahora mismo dicta sentencia. 

Esta nueva entrega de la rivalidad entre los equipos de Pablo Laso y Neven Spahija ha dejado un encuentro muy diferente al que abrió la serie. El 83-71 final no hace justicia al control de la situación que tuvieron los blancos. El Real Madrid fue claro dominador de la contienda, ya que llegó a ir ganando por hasta 25 puntos. El gran partido de hombres como Tavares, con 15 puntos y 8 rebotes para 22 de valoración, fue clave para que los merengues cimentaran su victoria en el trabajo en la pintura. 

Mención especial también para el recital de un Adam Hanga que tomó la responsabilidad de ser el base del equipo ante la plaga de bajas. El húngaro se fue hasta los 18 puntos y 4 rebotes en uno de sus mejores partidos con la elástica merengue. Fue un encuentro especial para todo el madridismo ya que la hinchada blanca pudo despedir a Jaycee Carroll, leyenda del club, y vivió el regreso a la pista de Thomas Heurtel tras estar varios meses apartado por motivos extradeportivos. 

El segundo partido de la serie de semifinales de playoffs entre Real Madrid y Baskonia comenzó con el sentido homenaje a Jaycee Carroll, leyenda viva del conjunto madridista y que se despedía de manera definitiva después de una década de éxitos. Con todo el Palacio de los Deportes para él, pudo dejar unas bonitas palabras a la que ha sido su familia durante más de una década antes de decir adiós. Felipe Reyes, excompañero y amigo, hizo de maestro de ceremonias. 

Ya en pista, Pablo Laso hizo encaje de bolillos para confeccionar un quinteto titular sin un base reconocible. Adam Hanga tomaba la responsabilidad ante las bajas de jugadores como Llull, Alocén, Williams-Goss o Alberto Abalde. El húngero estuvo bien secundado por Fabien Causeur en el exterior mientras Gaby Deck subía al puesto de alero con Yabusele y Tavares en la pintura.

No empezaron bien los blancos, superados por la defensa del conjunto vitoriano, que habían salido mucho más intensos que en el primer partido de la eliminatoria. El encuentro arrancó con lo aros cerrados y con mucho protagonismo de las pizarras. Mientras Baskonia centraba su juego en su amenaza exterior y en las penetraciones, el Madrid sacaba partido del poderío de Tavares bajo los aros. Cuatro puntos consecutivos del caboverdiano provocaban el primer tiempo muerto de Spahija con 7-2 en el marcador.

Después de sufrir la pesadilla que estaba siendo 'Edy' en la pintura, Enoch se fue al banquillo y en su lugar salió Wetzell para intentar poner freno al caboverdiano. Neven ordenó a sus jugadores sacar su defensa de su propio aro para cortar la producción ofensiva del Real Madrid. Eso, unido a la aportación de Fontecchio en ataque, permitió que los visitantes redujeran su desventaja.

Pero los de Laso no estaban por la labor de hacer muchas concesiones en casa y dos buenas acciones de Tavares de nuevo y un contragolpe de Causeur y Yabusele volvieron a estirar la renta en el final del primer acto. Los baskonistas no se rindieron y volvieron a dar un arreón final que dejó el marcador en 18-15 a final del primer cuarto.

El segundo cuarto comenzó con cambios para el Real Madrid. Aparecieron hombres como Anthony Randolph, pero sobre todo destacó la salida de Rudy Fernández. El mallorquín, que ya fue clave en el primer partido de la serie, comenzó su actuación con cinco puntos consecutivos. Su aportación y un triple colosal de Adam Hanga casi desde el centro del campo sobre la bocina de final de posesión volvieron a abrir un hueco que se iba ya por encima de los diez puntos.

Poco a poco, los locales fueron haciendo daño sin hacer mucho ruido. El Real Madrid no solo estaba ganando el partido desde el exterior, sino también por dentro. No se había llegado al ecuador del segundo cuarto y los blancos ya habían capturado 8 rebotes ofensivos, doblando en la contienda general a Baskonia. Una sangría que daba una de las claves de la primera mitad junto con la aportación de un Rudy que lideró un parcial de 13-0 que ponía tierra de por medio. 31-17 a falta de 04:50 para el descanso.

Cuando parecía que el Real Madrid había puesto ya tierra de por medio, Granger y Costello salieron al rescate de un Baskonia que abrió un parcial de 0-9 para volver a meterse de lleno en el partido. Los de Spahija hacían la goma, pero seguían vivos en la contienda. Cambiaron frontalmente su forma de jugar, alejándose del perímetro y cargando la zona para castigar la pobre defensa de Vincent Poirier. Eso provocó que Laso se viera obligado a volver a meter en pista a Tavares y Yabusele.

El Madrid pagaba también los minutos de descanso de Hanga, clave en la dirección del equipo sin bases. Por eso, Laso optó por dar entrada también a Juan Núñez en el día de su 18 cumpleaños. El canterano tuvo una aparición estelar con cinco puntos que pusieron el 40-30 para los blancos al descanso.

Ofensiva letal del Madrid

Tras el paso vestuarios, el partido regresó algo más frío. Ambos equipos retornaron imprecisos y alternando errores en una y otra canasta. Sin embargo, un toque de atención de Pablo Laso a los suyos sirvió para que Hanga y Deck se conectaran de inmediato. De su intensidad y de su agresividad supieron contagiarse todos para volver a lanzarse en ataque, destrozando el plan defensivo de los de Spahija. Parcial de 10-2 que amenazaba con romper el partido y acercar el segundo punto de la serie. La incidencia de 'Edy' Tavares, que estaba ya con 15 puntos y 8 rebotes, había sido clave para dar el golpe definitivo en el marcador.

El Real Madrid había puesto la directa ya en el marcador rompiendo la defensa de Baskonia hasta llevar sus rentas por encima de los 20 puntos. En los visitantes, solo Marinkovic parecía ser capaz de encontrar el camino hacia el aro a través de tiros de media y larga distancia. Pero la defensa del Real Madrid tenía totalmente controlada la situación para esperar un final de partido tranquilo. Los de Laso estaban sacando mucho partido a sus transiciones rápidas para encontrar espacios tanto en la pintura como en el juego exterior. Ahí, la sociedad formada por Tavares y Rudy, fue la clave de un recital encadenado desde un cuarto hasta el siguiente. Al final del tercer cuarto, 66-45.

El Real Madrid estaba clavando sus actuaciones defensivas, dejando en los tres primeros parciales a Baskonia en 15 puntos en todos ellos. La renta en el tercer acto fue de +11, una losa que parecía imposible de remontar en los últimos diez minutos. Sobre todo teniendo en cuenta que registraban un 3 de 21 en triples. Además, cedían la contienda de las capturas por 34-22 y de las asistencias, 13-8. Un partido donde se estaba repitiendo el bajón físico vivido durante todo el final de la temporada. La victoria blanca era de 77-52 a falta de 05:20 para la conclusión del choque.

El final del partido, ya resuelto desde hacía muchos minutos, dejó más protagonismo para el joven Juan Núñez y para otro canterano ilustre como Urban Klavzar. Además, se produjo también la vuelta de Thomas Heurtel, fuera de la plantilla desde la polémica salida nocturna previa a un partido de Euroliga. El galo, ayudado por las bajas de jugadores como Alocén, Goss, Llull o Abalde tuvo unos minutos que podrían facilitar su vuelta al equipo en la recta final de la temporada para pelear por el título de Liga Endesa.

Baskonia apretó antes de que sonara la bocina de la última posesión para reducir la desventaja en un par de jugadas que los blancos defendierona medio gas para maquillar así el marcador. Con esta victoria, el Real Madrid se asegura dos match ball para estar en la gran fina del campeonato nacional. 

Real Madrid 83-71 Bitci Baskonia

Real Madrid: Hanga (18), Deck (4), Causeur (2), Yabusele (5) y Tavares (15) –cinco inicial–, Heurtel, Nuñez (5), Poirier (6), Taylor (6) Randolph (12), Klavzar y Rudy (10).



Bitci Baskonia: Baldwin (12), Fontecchio (12), Giedraitis, Peters (9) y Enoch (4) -equipo inicial- Sedekerskis (4), Raieste, Marinkovic (17), Wetzell (6), Granger (5) y Costello (2).

Parciales: 18-15 | 22-15 | 26-15 | 17-26



Árbitros: Emilio Pérez, Fernando Calatrava y Francisco Araña. Sin eliminados.



Incidencias: Segundo partido de semifinales, al mejor de cinco, de la Liga Endesa disputado en el Palacio de Deportes (WiZink Center) de Madrid ante 7.789 espectadores. Antes del inicio se rindió homenaje al exjugador madridista Jaicee Carroll.