El Real Madrid perdió ante el Olympiacos en un importante encuentro para el devenir de la Euroliga. Los de Laso perdieron por la mínima pero el resultado pudo ser bien distinto si el colegiado hubiera señalado una falta sobre Campazzo sobre la bocina que, a su parecer, no entró en el tiempo.

Las imágenes no ayudan y es que en el momento en el que se produce el contacto resuena la bocina por todo el WiZink Center. Los árbitros revisaron las imágenes con el asistente de vídeo y decidieron dar por concluido el partido pese a las protestas de los madridistas.

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