Mariano ha sido uno de los nombres más comentados en el mercado de fichajes español. El Sevilla parecía tener hecho su fichaje hasta que el Real Madrid ejerció su derecho de tanteo y terminó por hacerse con los servicios del futbolista, algo que no gustó al conjunto hispalense que por activa y por pasiva ha declarado que el hispano-dominicano quería fichar por el club del Sánchez-Pizjuán.

Joaquín Caparrós ha sido el último en tener palabras sobre uno de los movimientos del verano. En una entrevista a Estadio Deportivo, el director deportivo sevillista mantuvo el discurso del club declarando que el jugador "por activa y por pasiva, nos decía que quería venir". Pero el sevillano va más allá diciendo "el futbolista decide que quiere jugar en el Sevilla, que quiere ser internacional con el Sevilla y que quiere volver al Real Madrid cuando triunfe en el Sevilla" y aunque no le gustó que el delantero cambiase de opinión, le desea "lo mejor al chico".

Borja Mayoral ha sido otra de las pretensiones que tuvieron los sevillistas para reforzar las posiciones de ataque, un futbolista con el que "estuvimos hablando bastante tiempo". Finalmente el atacante se marchó al Levante porque el conjunto hispalense decidió no acometer la operación porque "no nos daban opción de compra", algo que sí tienen con André Silva.

Lo cierto es que al final del verano, Mariano es futbolista el Real Madrid y que está en disposición de que Lopetegui le haga debutar. El parón de selecciones le ha servido para llevar a cabo una preparación que le haga estar en plenas condiciones para poder tener sus primeros minutos con la camiseta del '7' en un estadio emblemático como es San Mamés. 

El técnico madridista hizo que el delantero entrase en la convocatoria para el partido contra el Leganés, tan solo dos días después de llegar al conjunto blanco. El plan del entrenador vasco era que fuese entrando en la dinámica del equipo y complementarlo con coger ritmo en los entrenamientos para así poder estar listo cuanto antes.