En la gama media cuesta meter la cabeza por el dominio apabullante de marcas como Xiaomi o Huawei; incluyendo a sus dos aliadas, Redmi y Honor. Muchos son los fabricantes que distribuyen sus smartphones en la línea de los doscientos euros, cada cual con su estrategia. Y la de Hisense es la de hacerse un nombre propio con sus propuestas atractivas en diseño y calidad en la construcción.

El Hisense Infinity H12 no es lo mejor en características, tampoco es su guerra. El móvil apuesta por un equilibrio calidad/precio decente mientras ofrece un aspecto exterior que está por encima de lo habitual en su precio. Es bonito por fuera, sienta muy bien a la mano, no es ni grande ni tampoco pequeño. Ahora bien, naufraga más allá de un uso corriente con redes sociales, mensajería y juegos casual esporádicos.

Características del Hisense Infinity H12

Antes de comenzar la review lo habitual es detenerse en sus características brutas para anticipar qué puede depararnos con el uso. Y la intuición no defrauda: con solo ver las especificaciones cualquiera anticipa un funcionamiento de gama media «tirando por lo bajo». En la práctica es así; sobresaliendo en aspectos como la autonomía, donde sí hace un buen papel.

A continuación tienes la hoja técnica del Hisense Infinity H12:

  • Procesador – Snapdragon 450.
    • 8 x Cortex A53 a 1.8 GHz.
  • Memoria RAM: 4 GB.
  • Almacenamiento.
    • Interno: 32 GB.
    • MicroSD: sí, hasta 128 GB.
  • Gráfica: Adreno 506.
  • Pantalla.
    • Tamaño: 6.19 pulgadas.
    • Resolución: 720 x 1500 píxeles.
    • Tecnología TFT IPS.
  • Cámara trasera.
    • Resolución: 12+5 Mpx.
    • Apertura: f/1.8.
    • Otros: LED Flash
  • Cámara delantera.
    • Resolución: 16 Mpx.
    • Apertura: f/2.0.
    • Otros: flash LED.
  • Conectividad: 4G/LTE, Dual SIM, Bluetooth 4.2, WiFi 802.11 b/g/n/a/ AC…
  • Otros:
    • Conector USB C.
    • Sensor de huellas trasero.
  • Dimensiones: 156.05 x 76.18 x 7.8 mm
  • Peso: 155 g
  • Batería: 3500 mAh
  • Sistema:
    • Versión de Android: 8.1 Oreo.

Diseño elegante en plástico que ofrece muy buena calidad

A pesar de que el marco parece metálico, y que la cara trasera ofrece un acabado similar al cristal, el Hisense Infinity H12 utiliza el plástico como principal componente. Sí deja el cristal para la parte delantera, como es obvio; estando este endurecido para evitar en la medida los arañazos (no le hice ninguno durante mi periodo de prueba, tampoco por detrás).

No es demasiado ancho y las dimensiones de la pantalla, de algo menos de 6,2 pulgadas, no hacen exagerado en tamaño al dispositivo. El móvil dispone de USB-C en la parte inferior junto a la salida del altavoz externo; ofrece los botones de volumen y encendido en el costado derecho; y un cuarto botón en el lado izquierdo dedicado al asistente y a cambiar entre aplicaciones recientes. Dichos botones tienen un aspecto negativo: apenas sobresalen del cuerpo del teléfono, por lo que resultan complicados de encontrar y de pulsar.

El aspecto del teléfono es sólido y atractivo a la vista, al menos en el color que tuve durante el periodo de pruebas. Por detrás ofrece una cara limpia a excepción de los objetivos de las cámaras, que sobresalen ligeramente. Y con un toque que me parece destacable: el lector de huellas es del mismo color que la cara trasera del teléfono y sin que pierda eficiencia en la lectura ni rapidez. Es un pequeño detalle que le sienta realmente bien.

Por delante el Hisense Infinity H12 sufre el inconveniente del notch amplio en forma de ceja. Este no tiene demasiado sentido, pero al menos se le saca cierto provecho: la marca coloca el auricular de teléfono y un flash LED aparte de la cámara frontal.

Potencia muy justa para la competencia en su línea de precio

No esperaba un rendimiento tan justo del teléfono por más que ya lo dejen entrever las especificaciones base. Sin caer en el lastrado genérico de las aplicaciones, o en los lags constantes, lo cierto es que el funcionamiento de este Hisense se parece más a la gama baja que a la gama media a la que aspira. Es una lástima ya que podría presentar más batalla de la que realmente ofrece.

A continuación tienes dos muestras de benchmark tomadas al smartphone. No son indicativos de la calidad en términos de hardware, pero sí dejan ver cómo se comporta a nivel genérico. Puedo corroborarlo: es un móvil que no da demasiadas alegrías más allá de un uso básico.

El Hisense Infinity H12 ofrece suficiente memoria RAM, aquí no hay queja si se pone en perspectiva el teléfono dentro de su gama. Todo lo contrario que el almacenamiento, que se queda en los 32 GB: bastante justo para un móvil de 200 euros. Se agradece, eso sí, que la marca ofrezca expansión de almacenamiento por SD Card.

Entrando dentro del análisis de la pantalla he de decir que la calidad se mantiene a la altura. La resolución es algo baja con respecto a las dimensiones del panel, pero este se ve suficientemente bien en todas las condiciones (algo de dificultad hay bajo la luz del sol), ofrece una calibración de color acertada y no acusa de pérdida de nitidez. Con la respuesta al toque con vibración el móvil puede sufrir de pulsaciones inconexas, especialmente en la cámara: más de una vez el motor se activa sin que la aplicación ejecute ningún toque. Esto me ha molestado especialmente a la hora de sacar fotografías.

Una batería que dura más de lo que necesitas

Dado que el Hisense Infinity H12 no es un móvil que haga alarde de excesivas prestaciones tampoco el consumo es exagerado. Así que, con una sola carga, suele aguantar un par de días incluso con un uso moderado. Esto es una muy buena noticia para quienes quieren un smartphone contenido que les dé autonomía suficiente como para enviar toneladas de WhatsApps, por ejemplo.

A continuación tienes unas capturas de uso habitual con un gasto moderado. No es un móvil que me haya dejado tirado en ningún momento, lo cual es una garantía.

A la hora de cargar el Hisense Infinity H12 se demora algo más de dos horas con el cargador de serie. No incluye cargador rápido, tampoco es compatible con la carga inalámbrica. Sí posee USB-C; que aprovecha para el conector de audio incluyendo un adaptador a jack de 3,5 mm en la caja; junto con una funda transparente, que también es digno de mención.

Equilibrio deseable en las conexiones móviles con gran potencia de audio

La gama siempre marca la media de los componentes, esto es mandatorio en la mayor parte de marcas. Es por ello que este Hisense no sobresale en términos de conectividad o de audio; manteniendo lo esperado para un dispositivo de sus características y precio.

La primera falta es notoria: carece de jack de 3,5 mm, por lo que necesita de auriculares Bluetooth (se queda en la versión 4.2) o USB-C. Hisense incluye un adaptador a jack de 3,5 mm en la caja, todo un detalle que permite aprovechar los auriculares con cable.

La calidad de audio es correcta utilizando tanto el cable como el Bluetooth. Sin grandes alardes de audio y manteniendo suficiente fidelidad en la reproducción. La cosa cambia cuando se utiliza su altavoz externo inferior, al menos en términos de potencia: el Hisense Infinity H12 suena muy alto. Y sin que distorsione en exceso a máximo volumen.

La bandeja de la SIM admite doble tarjeta telefónica o SIM + SD Card, hay que elegir. Dicha bandeja se sitúa en el costado izquierdo, justo encima del botón extra del asistente. Este es uno de los detalles que no terminan de entenderse: pese a que se puede configurar, Google Assistant no salta con una pulsación, sino manteniendo pulsado su botón. Con una pulsación ligera el móvil retrocede a la app que se estaba utilizando anteriormente, algo que puede acelerar la multitarea. Aunque, bajo mi punto de vista, el botón «extra» no termina de ser muy productivo. Ocurre lo mismo en el resto de móviles que lo equipan.

Es inadmisible que un móvil salga al mercado con Android 8 Oreo

Por un lado este Hisense ofrece una experiencia Android bastante limpia ya que la interfaz apenas tiene personalización y ofrece un launcher muy similar al de stock; por otro lado no es de recibo que el móvil salga al mercado con una versión de sistema ya obsoleta y sin visos de que vaya a actualizarse. No es que Android 8 Oreo sea una mala opción, pero es que hasta los Xiaomi o Huawei más baratos parten con Android 9 Pie.

El Hisense Infinity H12 incluye varias aplicaciones propias para administrar el dispositivo y usar funciones imprescindibles, como la cámara. Ofrece una app exclusiva para las actualizaciones, el launcher integrado es parco en opciones, Hisense añade gestos y personalizaciones en el móvil… No es un mal smartphone para quienes desean una experiencia Android medianamente pura.

No ofrece malos resultados en fotografía, pero la respuesta de la cámara es muy lenta

Es un móvil de gama media rozando por lo bajo, por lo que no hay que esperar una experiencia fotográfica soberbia. Esto no implica que haga malas fotos ya que me ha sorprendido bastante la calidad media de las imágenes y de los vídeos. Todo lo contrario que la respuesta al toque de la aplicación de cámara, que me ha parecido caótica.

Más de una vez he pulsado en el icono y la cámara no ha hecho la foto. O, de tener activa la respuesta por vibración al toque, he notado como dicha vibración se activaba sin hacerse la captura. Esto me ha parecido muy frustrante por más que no me ocurriera de forma continua. Pero, cuando pasa, lo más habitual es que se pierda la instantánea.

La respuesta al disparo de la cámara a veces es errática, igual que el funcionamiento del enfoque

El Hisense Infinity H12 incluye una doble cámara trasera con la que se aprovecha de la mayor profundidad para obtener cierto bokeh. El enfoque es algo errático y cuesta mucho aplicarlo sobre un punto reducido de la escena, al menos cuando no es un rostro lo que se fotografía. Incluye HDR que hace un intento de mejorar el rango dinámico (los resultados son bastante decentes) y posee distintos modos de captura a los que se accede mediante scroll lateral en la interfaz de cámara.

Izquierda, fotografía sin HDR; derecha, foto con el HDR activado

Los resultados en fotografía no son malos con suficiente luz, como decía. Bastante detalle, con cierta tendencia a la subexposición, no abusa en exceso de las acuarelas, algo de ruido incluso a ISOs medias e imágenes pasables cuando la iluminación es más deficiente. No incluye modo «Pro», algo que mejoraría de manera notable la experiencia de cámara. Sí añade grabación de vídeo a cámara lenta, a cámara rápida, modo panorámico y distintas herramientas de belleza para los retratos, tanto con la cámara trasera como en selfies.

Enfocar la flor es casi misión imposible

A continuación tienes una muestra de fotografía tomada con el Hisense Infinity H12. Son imágenes sin editar y tal cual las capturó el teléfono. Pulsa sobre la imagen para acceder a la galería.

En el apartado de los selfies tampoco hace un mal papel ya que los retratos son de buena calidad. Se aprecia algo de ruido con zoom y aparecen acuarelas con media y baja iluminación, pero no por ello tiene una cámara delantera de mala calidad. Lo mismo ocurre en la grabación de vídeo: los resultados están a la altura de la fotografía. Graba con un máximo de 1080p y 30 fps; manteniendo cierta estabilización digital de imagen.

Un móvil decente que naufraga ante la competencia en el mismo rango de precio

No se le puede pedir el rendimiento de un gama alta, sí mayor fluidez de manera genérica. La batería está a muy buen nivel, igual que la construcción o la calidad de los acabados. El diseño queda muy visto; sin que esto le impida ofrecer ciertos toques personales de calidad. Fotografía decente, pantalla a mejorar en resolución y nitidez… No es que el Hisense Infinity H12 se comporte mal para lo que vale, el problema es que resulta imposible de recomendar cuando por un precio similar se consigue un Xiaomi Mi A2, un Redmi Note 7, Huawei P Smart 2019, Honor 10 Lite

Mi experiencia con el teléfono durante las semanas que lo tuve en pruebas estuvo al nivel de lo esperado en un smartphone sin florituras. No tuve mayor inconveniente e, incluso, solventó la papeleta haciendo fotos a pesar de la respuesta caótica al toque. Y estoy convencido de que será un buen móvil para aquellos que valoren el exterior y no necesiten un hardware excesivo: el Hisense Infinity H12 se basta y se sobra para ofrecer un uso básico con juegos sencillos, redes sociales, WhatsApp… Al fin y al cabo es lo que suele utilizarse de media.

El Hisense Infinity H12 puede comprarse en España por un precio que ronda los 200 euros.