Pocas marcas tienen una estrategia de negocio tan clara como Xiaomi. Su lema «precios honestos» es tanto una estrategia de marketing como una realidad en las tiendas. Esto no sería llamativo si habláramos de un fabricante de segundo nivel o si estuviéramos analizando un smartphone de gama media o baja, pero no es así.

En la presentación del Xiaomi Mi 9 hubo una diapositiva que hizo que el público lanzara una exclamación de asombro como nos contaba Paolo en sus primeras impresiones de este móvil. No fue la que mostraba el diseño, ni la que presumía de cámara. Fue la que nos decía el precio de este modelo.

Hace unos días os avanzamos que el coste de este terminal, en su versión de 6 y 64 GB, era de 449 euros, un precio bajo que creíamos que iba a estar limitado a unas pocas unidades, pero que se ha revelado como el oficial. Eso sí, el modelo que nosotros hemos probado es el que tiene 128 GB, y cuesta 499 euros.

La cuestión es ¿recomendaríamos el Xiaomi Mi 9 por su precio? Hemos podido analizar el terminal y os vamos a contar qué es lo que nos parece, tanto teniendo en cuenta la relación calidad precio como analizándolo como un terminal más.

Características del Xiaomi Mi 9

  • Procesador – Qualcomm Snapdragon 855 de ocho núcleos.
    • 4 x Cortex A55 a 1.8 GHz.
    • 3 x Cortex A76 a 2.4 GHz.
    • 1 x Cortex A76 a 2,8 GHz.
  • Memoria RAM: 6 GB.
  • Almacenamiento.
    • Interno: 128 GB.
  • Gráfica: Adreno 640.
  • Pantalla.
    • Tamaño: 6,4 pulgadas.
    • Resolución: 2340 x 1080 píxeles.
    • Tecnología Samsung AMOLED.
    • Brillo: 600 nits.
  • Cámara trasera.
    • Resolución: 48 Mpx + 16 Mpx + 12 Mpx.
    • Sensor angular, gran angular y telefoto.
    • Apertura: f/1.8, f/2.2 y f/2.2.
    • Otros: LED Flash.
  • Cámara delantera.
    • Resolución: 24 Mpx.
  • Puertos:
    • Conector USB Tipo C.
    • Sensor de huellas óptico en pantalla.
  • Otros: WiFi de doble banda, Bluetooth 5.0, NFC, GPS dual, emisor infrarrojos…
  • Batería: 3300 mAh con carga rápida y carga inalámbrica rápida.
  • Medidas: 157,5 x 74,67 x 7,61 mm.
  • Peso: 173 g.
  • Sistema:
    • Versión de Android: Android 9 Pie.
    • Capa del fabricante: MIUI 10.

Un diseño evolucionado, cómodo pero sin estridencias

El año pasado Xiaomi se agarró a la tendencia de diseño que imperaba en aquella época, el notch de gran formato. Eso le permitió implementar un sensor de desbloqueo facial avanzado con ToF pero también limitó aspectos importantes como la aparición de notificaciones en forma de iconos en la parte superior.

Este año el Xiaomi Mi 9 ha evolucionado usando un notch en forma de punto, similar al de gota de agua, que además es bastante pequeño y poco pronunciado. El resto del frontal está dominado por la pantalla y los bordes son muy contenidos, incluso en la parte inferior.

El canto del terminal es de metal y en la parte derecha del mismo tenemos los botones de volumen y de encendido, tres en total. Hay un cuarto botón físico, en la parte izquierda, que sirve para lanzar el asistente de Google, algo que cada vez veremos más. El acabado recuerda al iPhone X y le da una presencia bastante potente, elegante y atrevida a la vez.

En la parte inferior tenemos el altavoz y el conector de carga USB C pero no el jack de audio. Está claro que este conector no volverá en la gama alta de Xiaomi y que acabará desapareciendo de los pocos móviles que aún lo usan.

La parte trasera es de cristal y tiene una curvatura mucho más pronunciada que en el Mi 8, lo que hace que sea más cómodo en la mano, sobre todo a la hora de agarrarlo. Destaca su triple sensor de cámara, del que hablaremos luego, y también llama la atención una ausencia, la del sensor de huellas. El motivo seguro que ya lo sabéis a estas alturas: está bajo la pantalla. Eso sí, es un sensor óptico, no ultrasónico. Aquí la pega es que este acabado atrapa muchísimo las huellas aunque normalmente lo llevaremos con la funda puesta.

Hay que destacar que el módulo de cámara sobresale del cuerpo del móvil lo que hace que si lo ponemos en una mesa no sea del todo estable, al menos si no tenemos una funda. No es un problema mayúsculo pero sí algo visible.

En cuanto al peso y la ergonomía es un terminal que pasa desapercibido, lo que es positivo ya que no molesta al agarrarlo ni se hace incómodo cuando lo tenemos mucho tiempo en la mano.

Un gran rendimiento, con un pero

Como cada año, Xiaomi apuesta por el mejor procesador que es capaz de crear Qualcomm. En esta ocasión hablamos del Snapdragon 855, un chip del que se ha hablado mucho al ser compatible con redes 5G pero que en esta ocasión se queda sin el módem X50 que lo dota de esta característica.

La potencia de este procesador es muy elevada y hemos usado todos los juegos que solemos instalar sin problema, aunque en esta ocasión hemos ido un poco más allá. Honkai Impact Third, uno de los juegos que mas uso, tiene una opción de gráficos en alta resolución a 60 fps. He activado esta opción del mismo modo que la tengo activa en el Mate 20 Pro y me he dado cuenta de que aquí en ocasiones rasca un poco. No es algo desesperante pero sí llamativo.

En cuanto a la memoria RAM, Xiaomi ha optado por usar 6 GB en los dos modelos que pone a la venta en España, una cifra normal que ayuda a mantener el coste del dispositivo. La diferencia entre los móviles con 6 y 8 GB no es tan llamativa como entre los que tienen 4 y 6 por lo que no es esto un problema.

La memoria interna tampoco es escasa aunque aquí deberemos sopesar si con 64 GB tendremos suficiente ya que no hay micro SD: las dos ranuras son para tarjetas de teléfono nanoSIM. Para la mayoría de usuarios esta cantidad será mas que aceptable dado que incluso teniendo en cuenta las caches de aplicaciones como WhatsApp o Facebook es difícil llenar 64 GB. Pese a eso, si hacemos muchas fotos y videos y no solemos vaciar el móvil realizando copias en la nube o nuestro ordenador, deberíamos sopesar el modelo de 128 GB.

La velocidad de la conexión Wifi es otro de los elementos que nos ha llamado la atención para bien. En una red de 600 Mbps hemos llegado a tener velocidades superiores a los 400 Mbps de descarga e incluso superiores a los 430 en subida. No es la más alta que hemos visto pero desde luego sí que está entre las mejores.

En un movimiento que no esperábamos, Xiaomi ha puesto el sensor de infrarrojos en este modelo, permitiendo configurar mandos a distancia y abrirlos desde la pantalla de bloqueo, en el lado opuesto al de la cámara.

También se mantiene el NFC, para poder realizar pagos móviles o sincronizar dispositivos. El GPS es el GPS Dual que ya vimos en el Xiaomi Mi 8 y que posiciona de forma más rápida.

El sensor de huellas que se ha usado en este modelo es similar al del Xiaomi Mi 8 Explorer Edition (también conocido como Xiaomi Mi 8 Pro) pero mejorado. Pese a eso es tecnología óptica, es decir, que la pantalla ha de encenderse brevemente para escanear la huella, lo que hace que la velocidad no se tan rápida como en los sensores ultrasónicos. Aún así nos parece una mejor solución que ponerlo detrás y, sobre todo, en una lateral.

Una pantalla correcta, pero no perfecta

Uno de los factores más diferenciales entre los móviles mas caros y los muy buenos pero contenidos en precio suelen ser las cámaras. Sin embargo, en este Xiaomi Mi 9 vemos que el factor más diferencial no es ese, sino la pantalla.

Xiaomi ha usado un panel con tecnología OLED y una resolución FHD+, de 2340 x 1080 px con un nuevo notch en forma de punto que lleva el ratio del pantalla por encima del 90% del frontal. Es similar al notch en forma de gota de agua pero tiene los marcos algo más rectos. Llama la atención que no haya una opción de software para esconder el notch aunque quizás por su menor tamaño la empresa lo ha considerado innecesario.

El panel nos ofrece unos colores vibrantes y llamativos, muchas opciones de configuración en el apartado de software y opciones de encendido al levantar el móvil o al pulsar dos veces con la pantalla apagada. El brillo tampoco es un problema y llega hasta los 600 nits de máximo, una cantidad que nos permite ver la pantalla incluso a pleno sol.

Llama la atención la función Always On, que permite tener elementos en pantalla incluso cuando esta está apagada. No es una función nueva pero sí lo es el poder contar con varios diseños, algunos de ellos con colores.

También la respuesta táctil es correcta y no tenemos pulsaciones fantasma ni un lag problemático. La única pega que le vemos es que los tonos verdosos aparecen cuando inclinamos el panel y no necesitamos mucho para ello. Este es el típico fallo de las pantallas OLED pero en esta ocasión, sin llegar al extremo del Pixel 3, se ha notado más de lo que nos gustaría.

Como siempre, teniendo en cuenta el precio no podemos quejarnos de algo así pero sí que es algo que algunos compradores, los más puristas, querrán tener en cuenta ¿Es un problema en el día a día? No, pero curiosamente en esta ocasión nos hemos dado cuenta usando el móvil de forma normal, no comprobándolo para el analisis, como ha pasado en otras ocasiones.

La versatilidad en fotografía llega a Xiaomi

Hace dos años Xiaomi no dudó en implementar el zoom óptico en su Xiaomi Mi 6, cambiando la experiencia fotográfica de forma notable con su antecesor. En 2019, con el Mi 9, la marca hace lo mismo al introducir un tercer sensor, esta vez un gran angular.

Este fabricante no ha tenido problema en inspirarse o en copiar lo que otros hacen bien y ya he contado en numerosas ocasiones que la versatilidad en un móvil es clave, como hemos podido ver en LG y Huawei. Xiaomi ahora es otra de las marcas que permite hace buenas fotos, además de fotos con zoom óptico y gran angular.

El sensor principal de esta cámara tiene una espectacular resolución de 48 Mpx. Por defecto la cámara realiza fotos de 12 Mpx, combinando los píxeles en grupos de cuatro, por eso se divide la resolución a un 25%. Esto en teoría mejora la calidad de la imagen.

Hemos realizado algunas tomas con el sensor completo y con el disparo por defecto y no hemos visto una diferencia sustancial del detalle, aunque obviamente podéis comparar vosotros en la galería donde tenemos las imágenes a tamaño completo.

De noche este sensor nos ofrece unas buenas fotografías, con detalle y un control aceptable de las luces pero nos ha dado la sensación de que no rinde tan bien en este aspecto como otros móviles de la marca, como el Xiaomi Mi MIX 3. Sobre todo lo vemos en las farolas, lámparas y puntos de luz en general, donde aquí se pierde algo de detalle.

Donde sí que no podemos quejarnos es en la versatilidad de la cámara del Mi 9. Por primera vez tenemos un triple sensor que integra los tres más buscados: angular, gran angular y telefoto.

Hemos hecho múltiples tomas de una misma escena con los tres sensores y, como veis, hay diferencias. Más allá de la resolución, vemos que el rango dinámico del sensor normal y del gran angular son similares pero empeora un poco en el zoom óptico, que por cierto se queda en dos aumentos.

Además, cuando disparamos de noche el telefoto no funciona por su baja apertura y lo que hace el sistema es realizar un zoom digital del sensor principal.

Es en este tipo de fotografías donde sí que vemos que la calidad del sensor principal es mayor que la del gran angular, algo que en las imágenes superiores se ve sobre todo en la torre de la iglesia. También el sensor normal es capaz de ofrecernos más detalle, sin empastar la imagen.

En cuanto a los retratos, se mantiene el buen hacer de Xiaomi.  También tenemos una nueva función que nos permite desenfocar las imágenes que hemos tomado con modo retrato y establecer la intensidad del bokeh.

En esta imagen vemos una misma fotografía con el desenfoque al máximo y la misma pero con el desenfoque al mínimo.

El vídeo es uno de los aspectos más alabados de este móvil. DxOmark ha situado a este móvil como uno de los mejores en fotografía pero como el mejor en vídeo. Más allá de lo que valoremos este tipo de analisis hemos de reconocer que la experiencia usando el Mi 9 en este sentido ha sido buena.

Hemos probado a realizar grabaciones de día, de noche, a cámara lenta usando la nueva opción de 960 fps (eso sí, en HD) y en todas las situaciones hemos obtenido un buen resultado. Pero hemos de hacer un matiz. Aunque se nota que hay una estabilización óptica, esta se muestra a veces insuficiente cuando grabamos de noche en movimiento, como podéis ver en los ejemplos que hay en la galería.

Salvo en esas ocasiones la calidad es más que buena, con una gran capacidad de adaptarse a los diferentes escenarios de luz con un buen rango dinámico.

La cámara delantera, de 20 Mpx, sigue siendo uno de los puntos flojos de Xiaomi por ciertos detalles, aunque no por la calidad en general. Tenemos una resolución y unos colores correctos, y muchas opciones de maquillaje digital.

Incluso podemos efectuar un modo retrato por software bastante acertado aunque en ocasiones vemos algunos fallos de recorte. Nada exagerado para hacerlo sin dos cámaras.

El problema aquí es el rango dinámico de los fondos que como podéis ver queman en ocasiones la imagen, sobre todo en tomas difíciles. Nada que no hayamos visto antes, pero siendo este un móvil de gama alta habría que cuidar incluso estos detalles.

El vídeo con la cámara frontal no llega a la resolución 4K del trasero y se queda en 1080 p. La calidad es buena pero en ocasiones vemos el mismo problema que en las fotos, un rango dinámico algo corto. Eso sí, se echa en falta la estabilización cuando grabamos en movimiento.

Pese a eso hemos de destacar que la cámara delantera cumple incluso de noche, siendo capaz de realizar el desenfoque y solventar algunas situaciones complicadas.

Hemos visto también algunos cambios en la interfaz de la aplicación, que si bien en la toma de fotos no cambia mucho sí que lo hace a la hora de editar. Podemos cambiar el desenfoque o aplicar algunos filtros al fondo, aunque el recorte en estos casos no es tan bueno como si sólo desenfocamos. Por último, podemos usar la iluminación de estudio, una función que vimos originalmente en Apple y que otras marcas como Huawei ya habían implementado.

La velocidad de tomas de la aplicación es muy rápida, como siempre en Xiaomi, y sólo tardamos un poco más cuando usamos el modo noche, pero es normal dado que en este caso la exposición del sensor es mayor y necesitamos esperar a que capte la luz, es un fundamento básico de la fotografía, no un fallo del móvil.

Una batería pequeña, con una gran carga rápida

Xiaomi no suele poner baterías de gran amperaje en sus móviles de gama alta. El Xiaomi Mi 9 no es una excepción y debe conformarse con 3300 mAh, que no nos causan problemas pero tampoco nos dejarán maravillados.

Hemos estado probando varios días este móvil y en cada una de las pruebas hemos llegado a tener unas cinco horas de pantalla en una jornada de uso. Esto quiere decir que si un día lo usamos de forma mas intensa es posible que no lleguemos al final del día. No obstante, en nuestras pruebas no hemos llegado a esos extremos.

Hemos estado jugando, haciendo muchas fotos, escuchando podcasts y el móvil no se ha calentado, ni ha pecado de bajada de velocidad o fluidez.

Hay que hablar aquí de la carga rápida, pero sobre todo de la carga inalámbrica rápida. Vengo de un Huawei Mate 20 Pro y este Xiaomi Mi 9 me ha dado una experiencia incluso mejor en este sentido gracias a la nueva carga rápida inalámbrica de 20 W de Qualcomm. Este es el primer móvil en implementarla y de verdad que creemos que debería ser un aspecto obligatorio en los móviles punteros.

En cuanto a la carga rápida por cable, también esta presente gracias a la certificación Quick Charge 4.0 de Qualcomm. El Xiaomi Mi 9 es compatible con cargadores de hasta 27W aunque el que viene en la caja es de 18 W.

MIUI 10 incorpora novedades

La interfaz e este móviles MIUI 10, que corre sobre Android 9 Pie. Y tenemos algunas novedades con respecto a las versiones previas.

Para empezar los gestos han mejorado y ahora se explican en el tutorial de manera más clara. También se especifica que hay uno para cambiar entre dos aplicaciones de manera rápida, el equivalente a pulsar varias veces el botón de multitarea si no usamos los gestos.

Una de las novedades mas importantes es el modo noche, del que hemos hablado, y que viene de serie en el Xiaomi Mi 9, pudiendo cambiar la interfaz por completo a colores oscuros, negros y grises, pero manteniendo los tonos de acento en azul, el mismo color que si usamos el tema claro.

Eso sí, hay aplicaciones del sistema, como la calculadora o el gestor de archivos, que no cambian de color, algo de lo que se nos avisa al activar el modo oscuro.

Se mantiene un problema en la interfaz que es que no se pueden ver los iconos de notificación en la parte superior aunque activemos la opción en los ajustes. En función de dónde estemos aparecerán pero luego se ocultaran, como si aún el sistema creyera que tiene un notch de ceja y no en forma de gota de agua. Esto es fácilmente solucionable por software así que confiamos en que Xiaomi lo haga pronto.

Las tres capturas que veis en la imagen superior están tomadas con las mismas notificaciones activas. Podéis comprobar como el sistema es algo errático en este punto.

También hay un aspecto de software que habría que mejorar y es que cuando una aplicación recorta la pantalla para no mostrar el notch lo hace con esquinas no redondeadas, dando una sensación rara dado que las de abajo sí lo están. Este es un fallo típico de MIUI que aún no ha sido resuelto.

Hay mas añadidos, como la opción de usar accesos directos en el sensor de huellas si pulsamos y deslizamos hacia arriba o los lados. Eso sí, si tenemos activo el desbloqueo facial no da tiempo a usarlo.

Otra novedad es la sección de ajustes en la ventana de multitarea, que nos permite buscar apps, administrarlas o limpiar la memoria entre otras cosas.

En cuanto a la fluidez no podemos quejarnos en absoluto. Podríamos decir que tenemos la experiencia de un gama alta, y es que el Xiaomi Mi 9 lo es, pero hemos de recordar que una de las cosas que más valoran los usuarios de esta marca es que, en cuanto al software, ofrece una experiencia bastante similar en todo su catálogo. Las opciones que tenemos aquí también las pueden disfrutar los compradores de móviles más baratos

Un gama alta para todos

Xiaomi está manteniendo la misma estrategia que la ha llevado a ser una de las marcas mas importantes de tecnología móvil a nivel mundial. La empresa sigue demostrando que es capaz de hacer móviles que rivalizan con los de la competencia a precios sustancialmente mas bajos.

No vamos a decir que este Xiaomi Mi 9 sea superior en todos los aspectos a móviles que cuestan dos o tres veces más (y no estamos exagerando). Pero la realidad nos muestra que ahora mismo no hay ningún terminal que ofrezca más en relación calidad precio, al menos en la gama alta.

Los verdaderos rivales del Xiaomi Mi 9 no son el Galaxy S10 o el Sony Xperia 1, sino los móviles del año pasado que han bajado mucho de precio, como el Huawei P20 Pro o el Xiaomi Mi 8. Esta es la duda que siempre tenemos a la hora de comprar un móvil de gama alta justo en su lanzamiento.

Eso sí, nunca como ahora habíamos tenido tan claro que, de querer comprar un flagship de este año y querer gastar lo justo, el Xiaomi Mi 9 es la mejor opción.