Han pasado más de 10 años desde que los smartphones empezaran a brotar cual hierba mala. Desde entonces han evolucionado en todos los aspectos, incluido el tamaño.

Es bueno cambiar, arriesgar, acercarse al límite, y a lo largo de los años eso hicieron muchos fabricantes. Quisieron llevar sus móviles un paso más allá conforme la tecnología de pantallas mejoraba y daba lugar a unidades nuevas y mejores.

Algunos fabricantes llegaron a crear monstruos enormes que fueron criticados por muchos, pero cuyo tamaño hoy es casi un estándar. Pero también han aparecido fabricantes que sobrepasaron el límite, acercándose demasiado a lo que hoy es ya considerado una tableta pequeña. Acompáñanos por este repaso a los móviles más grandes.

El auge de las pantallas táctiles

¡Woah! ¡Si casi ocupa toda la mano! Parece pequeño ahora.

El primer iPhone nos cambió la forma de ver las pantallas. Las anteriores pantallas que podían denominarse táctiles funcionaban ejerciendo presión sobre ellas, como la de las Nintendo DS. Para pulsar bien donde queríamos necesitábamos de un puntero, un «lapicito».

El primer iPhone sentó las bases para que dejara de usarse esa tecnología en móviles. Ahora podíamos manejar una pantalla con precisión solo utilizando nuestro dedo. Y lo mejor, ya no necesitábamos teclas, ni siquiera para escribir, la pantalla podía sustituir a esos botones.

 

Ahora que podíamos usar nuestros dedos para manejar una pantalla teníamos un nuevo problema: era incómodo acertar en botones tan pequeños. Las aplicaciones tenían que crear botones más grandes para que se pulsaran bien, pero no dejaban espacio la pantalla para otras funciones.

En 2009 HTC creó el primer monstruo. El HTC HD2, con Windows Phone, medía 120.5 mm de alto y 67 de ancho. Comparado con el iPhone 3G (2008) Y 3Gs (2009), era 5 mm más grande en las dos dimensiones. Pero aquellos que llamaron al HTC una monstruosidad casi tienen un infarto dos años después al ver el primer Samsung Galaxy Note; era 25 mm más alto y 13 mm más ancho que el HTC HD2.

  • iPhone 3G/3GS: 115.5 x 62.1 x 12.3 mm (3.5″ de pantalla).
  • HTC HD2: 120.5 x 67 x 11 mm (4.3″ de pantalla).
  • Samsung Galaxy Note: 146.9 x 83 x 9.7 mm (5.3″ de pantalla).

Si ponemos a estos móviles junto al actual Samsung Galaxy S9 nos damos cuenta que parecen pequeños. Y un dato bastante curioso: el Samsung Galaxy S9 mide igual de alto que el primer Samsung Galaxy Note.

Se abrió la veda: «yo lo tengo más grande»

Enormes pantallas para jugar

La gente fue reacia al primer Note, pero poco a poco se le fue viendo utilidad a eso de escribir en una pantalla o simplemente preferían usar una pantalla mayor; donde sus toques tuvieran mejor precisión.

A Samsung se le fue un poco la cabeza. Con el segundo Samsung Galaxy Note se ampliaba el tamaño y la pantalla, para que escribir fuera más cómodo, un paso lógico. La altura crecía 4 milímetros, aunque era menos ancho.

 

La locura llegó después. En 2013 algún directivo de Samsung pensaría que las 5.5 pulgadas del Galaxy Note II no eran suficientes, que era mejor un Samsung Galaxy Mega de 6.3″. Un año después seguían sin estar contentos, decidieron que el Galaxy Mega 2 tendría una pantalla de 6 pulgadas y sería más pequeño, pero en cambio lanzaron en Asia el Samsung Galaxy W de 7 pulgadas. Medía 19 cm de alto y casi 10 de ancho.

  • Samsung Galaxy Note II: 151.1 x 80.5 x 9.4 mm (5.5″ de pantalla)
  • Samsung Galaxy Mega 6.3: 167.6 x 88 x 8 mm (6.3″ de pantalla).
  • Samsung Galaxy W: 191.8 x 99.6 x 8.8 mm (7.0″ de pantalla).

El fabricante coreano no se quedó solo. Le siguieron los pasos Sony con el Sony Xperia Z Ultra, Huawei con el Huawei Ascend Mate 7, Motorola de mano de Google con el Nexus 6 y muchos más (hasta HP).

Lo más normal era un LG Optimus G (131.9 x 68.9 mm), un Samsung Galaxy S4 (136.6 x 69.8 mm) o un LG G3 (146.3 x 74.6 mm), todos más pequeños que el primer Galaxy Note. Pero empezaba una nueva era…

La era de las «Phablets»

Lenovo Phab Plus

La palabra de moda era «phablet», una mezcla entre «phone» (móvil en inglés) y «tablet». Se usaba para denominar aquellos dispositivos móviles tan grandes como una tableta pero que podían funcionar como un móvil. El uso de la palabra se fue estirando hasta que algunos llamaban así a móviles con una pantalla de 5.5 pulgadas.

Lo que en verdad estaba ocurriendo era una separación del mercado que hoy en día ha sido tan fructífera que ya nadie lo nota. Mientras algunos fabricantes llevaban el término phablet al extremo, en los tamaños más usados se empezaba a notar una diferencia entre los móviles pequeños/normales (entre 4.7″ y 5.4″) y los grandes sin llegar a phablets (entre 5.5″ y 6.0″).

Entre 2014 y 2015 los fabricantes empezaron a llenar de dispositivos las dos franjas de tamaño casi estándar. Google lanzaba el Nexus 5X y Nexus 6P (159.3 x 77.8 mm). Apple lanzaba el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus (158.1 x 77.8 mm). LG lanzaba el LG G4 (algo grande) y el LG V10 (159.6 x 79.3 mm). Samsung… ya llevaba muchos años de ventaja con los Galaxy S y Galaxy Note (Note 5: 153.2 x 76.1 mm).

  • Samsung Galaxy W: 191.8 x 99.6 x 8.8 mm (7.0″ de pantalla).
  • Lenovo Phab Plus: 186.6 x 96.6 x 7.6 mm (6.8″ de pantalla).
  • Asus Zenfone 3 Ultra: 186.4 x 93.9 x 6.8 mm (6.8″ de pantalla).

Pero esto no quitaba que, más allá de esas franjas, no nacieran nuevos monstruos. Ya hemos mencionado al Samsung Galaxy W, en los siguientes años pudimos ver el Lenovo Phab Plus y el Asus Zenfone 3 Ultra. Enormes teléfonos que dejan al iPhone XS Max o al Samsung Galaxy Note9 (tienen un tamaño similar) como móviles enanos.

Actualidad: deja de usar la pantalla para medir

El último en llegar al club de móviles monstruosos

Actualmente es raro encontrar la palabra phablet para referirnos a un teléfono móvil. Las dos franjas de tamaño ya están interiorizadas por todos a la hora de escoger un móvil más grande o más pequeño. Igual que el uso de phablet se estiró demasiado, ahora se ha encogido hasta su significado normal.

  • Asus Zenfone 3 Ultra: 186.4 x 93.9 x 6.8 mm (6.8″ de pantalla).
  • Xiaomi Mi Max 2: 174.1 x 88.7 x 7.6 mm (6.4″ de pantalla).
  • Honor 8X Max: 177.6 x 86.3 x 8.1 mm (7.12″ de pantalla).
  • Nota: El Honor es más pequeño que el Asus, pero tiene mucha más diagonal de pantalla.

A la vez, los fabricantes se atreven menos con modelos gigantes. Xiaomi ha continuado durante los últimos años este legado con su gama Max y Lenovo volvió a lanzar nuevos Phab (como el Lenovo Phab2 Pro con Tango).

Pero uno de los móviles más grandes de 2018 nos enseña dónde está el nuevo dilema del tamaño: la costumbre de usar las pulgadas para medir está obsoleta. No podemos referirnos a un móvil de 5.8 pulgadas como grande cuando mide lo mismo que el primer Galaxy Note (nos referimos al Samsung Galaxy S9).

  • Google Pixel (2016): 143.8 x 69.5 mm | 5.0″ de pantalla + marcos.
  • Apple iPhone X: 143.6 x 70.9 mm | 5.8″ de pantalla, sin marcos.
  • Sony Xperia XA Ultra (2016): 164 x 79 mm | 6.0″ de pantalla + marcos.
  • Oppo R11s Plus: 164.8 x 80.2 mm | 6.43″ de pantalla, casi sin marcos.

Las actuales pantallas son mucho más largas, lo que alarga la diagonal: el resultado es una distancia más larga. ¿Son pantallas más grandes? Sí, pero vienen acompañadas de una gran reducción de marcos, siendo la diferencia casi imperceptible entre un móvil de 5.2″ como el Samsung Galaxy S7 y uno de 5.8″ como es el Galaxy S9.

No, los fabricantes no están haciendo móviles cada vez más grandes. No, no ha vuelto la locura de las phablets. El problema es la forma de medir los móviles usando la diagonal de pantalla que habíamos interiorizado, que ya no sirve. Además, aunque algunos modelos han crecido en altura, son menos anchos, por lo tanto más cómodos de agarrar.