Holger Rune, número 8 del ranking ATP y uno de los tenistas más prometedores del circuito, no se cortó la lengua tras su debut con victoria en el Masters 1.000 de Toronto.
El noruego fue preguntado por el nivel actual del circuito con Jannik Sinner y Carlos Alcaraz, y no dudó en ponerse prácticamente a la altura de las dos raquetas más dominantes de los dos últimos años.
"Jugar consistentemente a ese nivel sí marca la diferencia. La pregunta es si muy pocos jugadores pueden alcanzar su nivel y tener la oportunidad de vencerlos. Algo que también hemos visto en el pasado", comenzó diciendo.
"Carlos tuvo una racha excelente de muchísimos partidos. Han logrado mantenerse muy consistentes a ese nivel, es muy difícil, requiere mucha dedicación", añadió Rune.
"En eso también estoy trabajando, porque definitivamente creo que tengo un buen juego que puede, como he demostrado en el pasado, desafiarlos y ganarles partidos. Es muy interesante. Son los jugadores con los que quieres competir en las finales más importantes. Siento que, en mi caso, cuanto más a menudo pueda hacerlo, también mejorará mi nivel", concluyó.
De momento, Rune se ha visto las caras dos veces con Carlos Alcaraz con un balance de dos victorias para cada uno. En el último, la final del Conde de Godó, se llevó el título fruto de unos problemas físicos del murciano durante el choque.
Con Sinner, su récord es de 3-2. Le ganó los dos primeros en Sofía y Montecarlo, pero Sinner parece haberle cogido la medida en sus tres últimos duelos. Este año, el italiano le eliminó del Open de Australia en octavos de final en cuatro sets.
En busca de la regularidad
Holger Rune ha demostrado ser un rival correoso contra Alcaraz y Sinner. Sin embargo, lo que le separa de ellos es su poca regularidad en el día y sus desconexiones mentales en los partidos.
Este año ha jugado 28 partidos, con un balance de 17 victorias y 11 derrotas. Su última gran decepción llegó en Wimbledon después de caer en primera ronda frente a Jarry después de ir 2-0 arriba en sets.
Holger Rune, en el partido ante Nicolas Jarry en Wimbledon.
Ahora, tiene el foco en el Masters 1.000 de Toronto. Un torneo en el que buscará el sexto título de su carrera y donde no tendrá que verse las caras con Sinner, Alcaraz y Djokovic, todos ellos ausentes por descanso.