Garbiñe Muguruza sigue con paso firme su curso en el WTA 1000 de Dubái y ya está en la gran final del torneo. La jugadora hispano-venezolana ha vencido con contundencia, pero también con sufrimiento, a Elise Mertens por 6-4 y 7-6 y ya tiene su billete para la tercera final de la temporada. Segundo duelo consecutivo con mucha tensión tras el vivido contra Sabalenka.
Muguruza se consolida como una de las tenistas en mejor forma de toda la temporada y como la jugadora con más victorias hasta el momento. Además, tendrá una nueva oportunidad de romper su mala racha en las finales y de poner fin a una sequía de títulos que se prolonga desde el torneo de Monterrey en 2019.
Partido muy duro el que planteó Mertens a la jugadora hispano-venezolana que, aún así, supo mantenerse muy fuerte de mente para colarse en su segunda final en apenas una semana tras rozar el título en Catar, donde fue doblegada por Kvitova. Muguruza tendrá ante sí una oportunidad casi inmejorable de sumar un importante WTA 1000 a su palmarés.
Además, será un partido muy especial para ella, ya que nunca había alcanzado la ronda final del torneo después de haber caído en dos ocasiones, en 2015 y en 2018, en las semifinales. Le vendrá muy bien para esa gran final la fortaleza mental demostrada en el duelo contra Elise Mertens, ya que a pesar de los golpes recibidos no se ha venido abajo en ningún momento.
Empezó mal el partido para la nueva número 14 del mundo, ya que perdió su servicio a las primeras de cambio. Sin embargo, consiguió rehacerse y devolver el break, además de ganar otros dos juegos de forma consecutiva. Con 3-1 en el marcador encarrilaba la primera manga hasta que con 5-3 y saque para sellar el triunfo parcial, falló. Sin embargo, pudo agarrarse de nuevo a su buen juego para llevarse la primera manga al resto.
Un segundo set agónico
El segundo set fue también muy igualado, con mucha paridad entre ambas jugadoras. Aprovechando su saque, Garbiñe se colocó con 4-3 arriba y consiguió hacer el break que la dejaba a las puertas de la victoria. 5-3 y saque para sellar el pase a la final. Sin embargo, y tras dejar pasar una bola de partido, Muguruza flaqueó y Mertens lo aprovechó para recuperar el saque perdido.
Con 5-4 en el marcador, Muguruza volvió a disponer de nuevas opciones para llevarse el triunfo, pero los errores no forzados de la hispano-venezolana terminaron condenándola. Este punto de debilidad lo aprovechó Mertens para darle la vuelta a la situación y colocarse con 6-5 y saque a su favor para empatar el partido. En ese momento, 'Mugu' se agarró a la única vida que le quedaba y consiguió solventar la situación, forzando el tie-break.
Al final, con el empate a 6-6 en el marcador, Muguruza volvió a demostrar su solidez en este 2021 y se llevó la segunda manga por 7-5 en el desempate. Así sumó su victoria número 17 de la temporada, tras tener 7 bolas de partido, y se coló en la tercera final del curso. Garbiñe tiene ahora una oportunidad de oro de borrar su malfario y volver a alzar los brazos, algo que lleva sin hacer desde 2019.
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