El peso completo de la UFC tiene nuevo rey. El pasado fin de semana, Francis Ngannou ganó a Stipe Miocic. Dos asaltos le duró su rival, en la pelea estelar de la UFC 260 celebrada en Las Vegas (Estados Unidos). El vencedor sorprendió a todos, pero sobre todo a su adversario en el octágono, con una mejora técnica y con varios golpes encadenados para convertirse en el tercer africano que se proclama campeón tras Kamaru UsmanIsrael Adesanya.

Lo que se podía haber quedado en una simple victoria, un nuevo rey y un futuro abierto en la categoría del peso pesado, ha acabado por convertirse en una guerra dentro de la empresa estrella de las artes marciales mixtas (MMA) entre Dana White, presidente de la UFC, y Jon Jones. Aunque los más y los menos entre estos dos no viene de ahora.

Ya el pasado año se produjo una especie de divorcio entre ellos. Jon Jones llegó a amenazar con dejar la UFC: "No seas mentiroso, mi reputación ya ha recibido suficientes golpes. No necesito esa tontería, Dana. Simplemente ve adelante y libérame de mi contrato con la UFC por completo. Estoy seguro de que algún promotor en algún lugar estará más que feliz de recogerme".

Jon Jones, en un combate de la UFC Reuters

Dana White dejó que las aguas se fuesen calmando y fue a finales del pasado año cuando confirmó que el regreso de 'Bones' estaba muy cerca: "Jon Jones está en la UFC hace más de diez años. Tuvimos una buena conversación hace una semana, y está listo para volver. Tiene la cabeza en el lugar correcto y nosotros estamos en un buen lugar".

Entonces, ¿qué ha pasado ahora para que la montaña rusa haya regresado? Pues todo viene porque tras su victoria sobre Miocic, Ngannou tendió la mano a Jones para un duelo en la jaula, destacando además que para él 'Bones' es el auténtico número uno de la historia de las MMA, abriendo así las puertas de par en par a un enfrentamiento entre ambos.

Francis Ngannou, con el cinturón de campeón del peso pesado de la UFC Reuters

Jon Jones decidió ascender de categoría después de convertirse en el gran campeón del semipesado y su objetivo no era otro que pelear por el cinturón del peso completo. "En mi opinión, Jon Jones es el mejor de todos los tiempos en las artes marciales mixtas. Que él ascienda va a ser algo bueno",

"Es un desafío que aceptaré y lo agregaré a mi récord. Será algo muy bueno en mi currículum. Pero esta vez él será el retador, yo soy el campeón. Estoy listo, en cualquier momento. Siempre que estén listos, yo lo estoy", señaló Ngannou tras convertirse en el poseedor del cinturón del pesado.

Guerra fría

Después de estas palabras de 'The Predator' Dana White tomó la palabra para mandar un claro mensaje sobre su hoja de ruta: "Derrick Lewis es la pelea por hacer. Pero si Jon Jones realmente quiere el combate, sabe que puede hacerlo. Todo lo que tiene que hacer es llamar y cerraremos el trato, una cosa es tuitear y decir que subió de peso y que quiere esa batalla".

El presidente de la UFC sembró así la duda sobre si, realmente, Jon Jones quiere pelear por el título del peso completo. "¿Realmente la quiere -la pelea-? Lo único que necesita es levantar el teléfono", afirmó un Dana White que no tardó en ser el objetivo de 'Bones'.

Dana White, presidente de la UFC Reuters

Así, Jon Jones no ha dudado en desafiar al presidente del imperio de la UFC con mensajes como estos: "Si alguien se está preguntando si quiero la pelea, la respuesta es sí. Y también quiero que me paguen" o "Conor McGregor quiere mucho dinero, es lo normal. Jon Jones quiere mucho dinero, tiene miedo". Y no se quedó solo ahí.

También escribió varios mensajes que luego borró, todos ellos muy duros: "Por favor, córtenme ya. ¿Qué tipo de mierda extraña es esta? Obviamente el jefe me odia. Déjame llevar mi negocio a otra parte" o "Preferirías tenerme cerca y tratarme como una mierda (Dana White). Juro que la industria de la UFC no ha sido más que deprimente para mí. Maldita sea, déjame ir".

[Más información - Georges St-Pierre elige el 'Mount Rushmore' de la UFC: ¿están Khabib y Conor McGregor?]

Noticias relacionadas