Los combates por títulos en boxeo siempre dejan varias declaraciones antes de la cita que no pasan desapercibidas. El protagonista del día ha sido Deontay Wilder que está a escasos días de verse las caras con Dominic Breazeale. El mismo día además también competirá Kiko Martínez, que buscará el mundial contra Gary Russell Jr.

'The Bronze Bomber' defiende ante su compatriota el título mundial de la WBC de los pesos pesados en Brooklyn, y ha dejado unas declaraciones muy polémicas: "La vida de Breazeale está en juego en esta pelea y me refiero a su vida. Todavía estoy tratando de conseguir un cuerpo en mi palmarés". Pero lejos de recular, ha metido más leña al fuego: "Dominic Breazeale pidió esto, no fui a buscarlo. Él me buscó. Entonces, si llega, pues llega. Este es un deporte brutal, no es un deporte de caballeros".

Según seguía hablando, más barbaridades soltaba por la boca. Además ha defendido su derecho de poder acabar con la vida de su rival en el ring: "En este momento en particular, tenemos mala sangre el uno contra el otro. Este es el único deporte en el que puedes matar a un hombre y cobrar por ello al mismo tiempo. Es legal. ¿Por qué no usar mi derecho a hacerlo?".

Ya calentó el choque

Hace un mes, Deontay ya se había dicho en ESPN que Breazeale ya podía ir "haciendo los preparativos para su funeral". Unas declaraciones que no se tomaron muy en serio, pero tras las últimas palabras, hay preocupación en como puede transcurrir uno de los combates titulares de la noche. Breazeale perdió su única pelea ante Anthony Joshua, en 2016, por KO en el séptimo asalto, y esta será su segunda oportunidad por un título mundial.

[Más información: Vergüenza en el boxeo: insultos homófobos de la mujer de Bellew a un camarero]

Noticias relacionadas