En octubre de 2016, en medio de un tiroteo en el parking de un restaurante de Lexington, Kentucky, Trinity Gay, la hija del atleta estadounidense Tyson Gay, fue víctima de un disparo en el cuello que acabó con su vida. Este jueves se conoció la sentencia para los cuatro acusados por el crimen.

El tribunal de Lexington ha condenado a 20 años de prisión al autor del disparo que acabó con la vida de la joven,Chaz Taylor, castigado con una pena mucho más elevada que el resto de los implicados por homicidio imprudente.

D'Vonta Middlebrooks, tendrá que pasar 15 años en la cárcel según la sentencia, ya que contaba con antecedentes penales. Los otros dos hombres acusados, D'Markeo Taylor y Lamonte Williams fueron condenados a a 15 meses y 1 año de cárcel respectivamente, pena que ya han cumplido y podrán salir de prisión bajo el régimen de libertad condicional durante los próximos 5 años.

Chaz y D'Markeo Taylor pidieron perdón a la familia de Trinity Gay. "Lo siento, de verdad. Trinity y yo nos queríamos. Hablábamos todos los días, ella no se merecía esto. Ojalá pudiera volver a aquella noche otra vez".

Tayson Gay recordaba a su hija en una publicación en Twitter, "Dios bendiga a Trinity"

Trinity, una prometedora atleta

La joven de 15 años seguía los pasos de su padre, especialista en carreras de velocidad, varias veces campeón del mundo y olímpico en 100 metros. Trinity destacaba como futura velocista en las competiciones con el equipo Lafayette en las carreras de High School.

Trinity se encontraba en la puerta de un restaurante cuando los ocupantes de dos coches comenzaron un tiroteo y una bala llegó hasta ella. En el hospital no pudieron reanimarla debido a la gravedad de su estado.

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