Horacio Llorens, el rey del parapente que quiere cruzar un volcán en activo

Horacio Llorens (1982, Madrid) hizo historia hace una semana al ganar su sexto Campeonato del Mundo en Suiza tras proclamarse ganador del ACRO World Tour, convirtiéndose así en uno de los mejores pilotos de la historia y de los deportistas españoles mas laureados.

A los 12 años cumplió su sueño de volar junto su tío Felix Rodríguez en un tándem a más de 1000 metros de altura. Dos años más tarde hizo un curso de iniciación en la escuela de su tío y en 2001 comenzó en el Circuito Mundial de acrobacia. Fue en 2002 cuando empezó hacerse hueco en el parapente. Quedó en 2ª posición en el Red Bull Vértigo y desde entonces no ha parado de acumular éxitos, ya sea en modo de títulos o récords. 

EL ESPAÑOL ha hablado con un Horacio Llorens tremendamente feliz y con ganas de seguir haciendo historia. 

Sensaciones tras ganar un nuevo campeonato del mundo

"Lo primero que sentí al proclamarme campeón fue una recompensa total e infinita por todo el esfuerzo que había hecho, con muchos entrenamientos y horas empleadas en el aire entrenando también la resistencia muscular", dice.

Difícil volver a reinar, así lo reconoce Llorens que tuvo varios problemas que pusieron en peligro el título. "Fue muy duro debido a los dolores de codo y hombros y no tenía todas las garantías para poder conquistarlo, debido a que mi principal rival tenía más posibilidades de hacerlo", asegura. 

"Empezó muy bien la temporada, pero en las siguientes pruebas empeoró la cosa. En esta competición no las tenía todas conmigo, no me veía confiado y no tenía todas las papeletas para ganar el campeonato del mundo. Pero fui paso a paso y gané las seis batallas que me llevaron hasta la final. Fue cuando dije que podía ganar". 

El último Mundial, el más complicado de todos

Tras conquistar seis Campeonatos del Mundo, todos ellos con mucha dificultad, el último es el que más va a recordar. Así nos lo hace saber el deportista madrileño: "De los seis mundiales, para mí el de 2018 es el más importante y el que más felicidad me ha producido, ya que no era favorito y fue el más costoso de ganar. Los otros vinieron muy seguidos, ya que en seis años conquisté cinco títulos de manera más fácil".

La sensación de libertad al volar

¿Cómo es volar? Llorens confiesa que la sensación es "increíble, de libertad. Pura libertad. El parapente es también como un baile en el aire. Sirve como herramienta increíble para enseñar a todos paisajes únicos", así nos define que es para el una de las cosas con las que más disfruta en su vida. 

Un hueco entre los mejores

Horacio Llorens es uno de los mejores del mundo y de los deportistas españoles más laureados. Así lo demuestran todos los títulos que ha ganado. "Los títulos están ahí, dicen mucho de mi deporte y lo que he hecho yo por el parapente. Con este título los medios se han involucrado más y espero que podamos tener un espacio".

Nuevos proyectos en mente

En la actualidad, el madrileño está inmerso en dos proyectos. "Uno de ellos es volar un volcán activo en Guatemala -el volcán de Fuego-, hacerlo de noche cerca de la lava. El otro es en Turquía, el cual lo haré con un compañero y volaremos por lugares donde nunca se ha hecho". Además de competir por ganar los campeonatos del mundo, Horacio intenta siempre hacer nuevas cosas especiales que llamen la atención del público. El reto del volcán de Fuego está planificado para el próximo mes de octubre o noviembre. 

Las auroras boreales, una experiencia única

Volar bajo las auroras boreales fue una de las experiencias más bonitas, duras y complicadas que tuvo Llorens. "Fue un proyecto único. Lo hice en enero, en Noruega bajo 20 grados negativos con sensación térmica más baja. Volé de noche por lo que la dificultad era más aún debido a que había poca visibilidad. Durante diez noches, el fenómeno aparecía y desaparecía, por lo que tenía que estar listo en cualquier momento para despegar. Lo hice con neopreno por si caía al mar, ya que de ser así hubiese entrado en hipotermia en cuestión de dos minutos". 

El Récord Guiness Mundial de Infinity Tumbling, la maniobra más extrema de este deporte

Fue un 21 de diciembre de 2012 en un templo Maya en Guatemala. Un récord que ya había conquistado, pero que se lo arrebataron. "Lo tenia un americano antes de que yo lo batiera. Hice 280 lupings consecutivos, pero me lo arrebataron haciendo 374. Yo lo volví hacer y conseguí 568 tras muchos duros entrenamientos".