La superioridad que está demostrando Marc Márquez en esta primera parte de la temporada ha cobrado una dimensión estratosférica en el circuito de Sachsenring, donde ha vuelto a ganar por décima vez consecutiva sin encontrar ni un ápice de oposición por parte de sus rivales. El líder de MotoGP, que se marcha de vacaciones con los deberes hechos y con 58 puntos de ventaja sobre Andrea Dovizioso, ha vuelto a reescribir la historia y se convierte en el primer piloto en lograr 10 triunfos consecutivos en un mismo trazado destronando a Giacomo Agostini 46 años después de que el italiano lograse nueve victorias consecutivas en el circuito finlandés de Imatra, desde 1965 hasta 1973.

Tras arrancar desde la pole, Márquez salió como un tiro y se situó primero al afrontar una primera curva en la que Fabio Quartararo, que partía segundo, se tocó con Jack Miller y perdió cinco posiciones para terminar por el suelo una vuelta después. El piloto del equipo Repsol Honda impuso su ritmo desde el primer giro dispuesto a escaparse de Álex Rins y Maverick Viñales, sus perseguidores. Una situación que obligó a forzar al piloto de Suzuki, que se cayó en la decimonovena vuelta cuando Márquez ya rodaba con una cómoda ventaja de más de tres segundos.

Ante esta situación, Márquez fue cobrando más y más ventaja mientras Viñales se aseguraba el segundo escalón del podio. Cal Crutchlow completó el podio, pese a la seria lesión que arrastra en su rodilla producto de un percance en bicicleta.

Por detrás se la jugaron los dos pilotos de Ducati y al final fue Danilo Petrucci, recién renovado por la fábrica de Borgo Panigale y lesionado en su mano derecha, quien se impuso sobre su jefe de filas. De esta forma, Dovizioso ve cómo Márquez cobra un margen de más de dos carreras mientras su compañero de equipo le aprieta las tuercas porque Petrucci ya es tercero en la clasificación general de MotoGP, a sólo cinco puntos.