Adrian Newey, el diseñador más laureado de la historia del campeonato, será el nuevo jefe de equipo de Aston Martin a partir de la temporada 2026.
A sus 66 años, el ingeniero británico no solo se convierte en la máxima autoridad técnica y deportiva de la escudería de Silverstone, sino que lo hará con un contrato que lo sitúa directamente entre las personalidades mejor remuneradas del paddock.
El anuncio se ha producido esta semana, consolidando una tendencia evidente desde su incorporación a comienzos de año: Newey no llegaba solo para diseñar el monoplaza de 2026, sino para liderar un proyecto completo.
Relegado Andy Cowell a un rol más estratégico, Lawrence Stroll ha dejado claro que el futuro de la escudería pasa por las manos de su nuevo líder. Y para sellar ese compromiso, Aston Martin le ha ofrecido un sueldo acorde a su leyenda.
91.000 euros al día
Según ha trascendido en medios británicos, el salario de Adrian Newey alcanzará los 30 millones de libras al año, una cifra que incluye variables por rendimiento pero que parte de una base fija de 20 millones.
Traducido al euro y dividido por los 365 días del año, el ingeniero cobrará algo más de 91.000 euros diarios. Se trata de una cifra absolutamente inédita para un cargo no piloto en la Fórmula 1, y que lo sitúa solo por detrás de los grandes ídolos de la parrilla.
Adrian Newey y Lawrence Stroll, en la presentación del ingeniero como nuevo miembro de Aston Martin
Solo Lewis Hamilton y Max Verstappen superan actualmente esa retribución. El neerlandés, tetracampeón del mundo, lidera el ranking salarial con 56,75 millones de euros al año.
Por su parte, Hamilton, que se ha unido a Ferrari en 2025, recibe 52,40 millones, sin contar los ingresos extra procedentes de patrocinios personales. Ambos están en una categoría aparte, tanto por su historial como por su poder de atracción mediática.
En comparación, el sueldo de Newey se sitúa por encima del de pilotos como Fernando Alonso y Lando Norris, que rondan los 17,5 millones de euros, y triplica el de estrellas consolidadas como Carlos Sainz Jr. o Pierre Gasly, quienes perciben 8,75 millones de euros cada uno.
Únicamente, el monegasco Charles Leclerc iguala el rango salarial de Newey a la espera de si logra que Ferrari renueve y mejore su contrato en el próximo año.
Un fichaje estratégico
La llegada de Newey a Aston Martin ha supuesto un terremoto en el equilibrio de poder de la Fórmula 1.
Su marcha de Red Bull, donde fue responsable del diseño de todos los coches campeones de la escudería desde 2009, abrió una carrera entre equipos por hacerse con sus servicios.
Ferrari y Mercedes sonaron con fuerza, pero finalmente fue el proyecto de Lawrence Stroll el que logró convencer al genio británico.
Adrian Newey viaja con Aston Martin al Gran Premio de Mónaco
Su incorporación como diseñador jefe se produjo en marzo de 2025, y en pocos meses ha ido ganando peso dentro de la estructura.
Ahora, con la oficialización de su nuevo rol como team principal, se confirma que Newey tendrá plenos poderes para liderar la revolución verde a partir de 2026, coincidiendo con el nuevo reglamento técnico y la entrada de Honda como motorista.
Un sueño pendiente
En paralelo a su ascenso profesional y su nueva etapa en Aston Martin, Newey arrastra una espina personal: nunca haber trabajado junto a Lewis Hamilton.
En una entrevista concedida en 2023 al pódcast Beyond the Grid, el británico confesó que siempre había querido colaborar con el siete veces campeón del mundo.
"Trabajar con Fernando [Alonso] o con Lewis habría sido fabuloso. Pero a veces las circunstancias no lo permiten", explicó entonces.
Ahora, con Hamilton ligado a Ferrari y sin visos de un cambio a corto plazo, ese anhelo parece cada vez más lejano, aunque a cambio podrá tratar de hacer campeón a Fernando Alonso por tercera vez.
Adrian Newey conversa con Fernando Alonso en el Gran Premio de Mónaco F1 2025
Un negocio millonario
El contexto económico de la Fórmula 1 justifica estas cifras astronómicas. La competición generó en 2024 unos 3.190 millones de euros, gracias a los derechos televisivos, el apoyo de los promotores y los patrocinios.
Con cerca de 1.500 millones de espectadores acumulados por temporada, la F1 sigue siendo un escaparate global de primer nivel.
En este escenario, los sueldos de pilotos y figuras clave como Newey no hacen sino reflejar el músculo financiero de un deporte que mezcla tecnología, espectáculo y márketing como ningún otro.
Y en ese juego, Aston Martin ha decidido apostar todo a la carta de su nuevo líder.
A partir de 2026, Newey tendrá la oportunidad de cerrar su carrera con un nuevo éxito, esta vez como jefe total de un equipo al que pretende llevar desde la zona media hasta la cima del campeonato.
Y lo hará con el respaldo económico, técnico y político de una estructura construida a su medida. La cuenta atrás ya ha comenzado.
