Fernando Alonso volvió a demostrar su capacidad de lucha en el Gran Premio de Países Bajos 2025, pero esta vez el octavo lugar en Zandvoort le supo a poco.
El asturiano partió desde la décima posición y, pese a su remontada, no ocultó su disgusto al asegurar que el Aston Martin AMR25 tenía ritmo suficiente para acabar quinto.
El bicampeón, que mantiene su espíritu competitivo intacto a los 44 años, considera que el equipo desperdició una oportunidad importante de sumar más puntos.
Una oportunidad que no debería repetirse si quieren estar preparados para el nuevo ciclo de reglamentación de 2026 en el que el equipo busca luchar con los grandes equipos de la parrilla.
Alonso fue claro en sus declaraciones una vez finalizado el Gran Premio de los Países Bajos en el que acabó 8º justo por detrás de un Lance Stroll que salía 19º y acabó 7º: "Perdimos una oportunidad para nosotros".
Según explicó, el monoplaza mostró un gran ritmo de carrera, pero la gestión estratégica y la mala suerte con los tres coches de seguridad les privaron de optimizar su rendimiento.
El asturiano insistió en que con una mejor lectura de carrera podrían haber alcanzado la quinta plaza: "Albon terminó 5º, así que creo que 5º era posible con nuestro ritmo de hoy".
La frustración llegó especialmente por las decisiones en boxes. Tras verse bloqueado por Tsunoda, pidió una parada temprana para evitar quedar atrapado en el tráfico.
Sin embargo, la aparición del coche de seguridad anuló su ventaja y le complicó toda la carrera. Más adelante, volvió a solicitar una segunda parada agresiva que el equipo retrasó demasiado.
Comparación incómoda
Lo que más dolió al español fue terminar por detrás de Lance Stroll, que había salido desde la 19ª posición. El canadiense logró ser séptimo gracias a una estrategia diferente y a los incidentes de otros rivales.
Alonso lo expresó con crudeza: "He terminado por detrás de mi compañero, que salía último y aun así acaba delante mío. Algo realmente diferente hemos hecho con mi estrategia para acabar tan mal".
El veterano piloto recordó que no es la primera vez que vive situaciones similares esta temporada. En circuitos como Miami, Imola o Silverstone también sintió que las decisiones del muro de Aston Martin le dejaron sin opciones de pelear por mejores resultados.
El caos en Zandvoort
El Gran Premio de los Países Bajos se convirtió en un auténtico rompecabezas táctico. Alonso perdió dos posiciones en la salida y quedó atascado detrás del Red Bull de Tsunoda.
De ahí llegó la precipitación con la primera parada, que coincidió con la salida del coche de seguridad y neutralizó cualquier beneficio.
En la parte media de la prueba, el español se encontró detrás de los dos Haas en un "trenecito" de DRS que le impidió mostrar el ritmo del AMR25.
Fernando Alonso caminando por el paddock en el GP de Austria.
Sus quejas por radio pedían una solución que tardó demasiado en llegar. El tramo final le permitió adelantar a un Red Bull y a un Haas, pero no fue suficiente.
Aprovechó los abandonos de Norris, Leclerc, Hamilton y los accidentes de Sainz, Lawson y Antonelli, sancionado además con 15 segundos, para rascar puntos, aunque con la sensación de que el botín era escaso.
Mensaje para 2026
Más allá del resultado inmediato, Alonso quiso enviar un aviso claro a Aston Martin: "Si no llega a ser por los abandonos y la penalización de Kimi, no estábamos hoy en los puntos, por lo que debemos ser conscientes de eso".
Con la mirada puesta en 2026, cuando entrará en vigor la nueva normativa aerodinámica y de motores híbridos, Fernando Alonso dejó claro que la gestión estratégica será tan importante como la velocidad del coche.
De nada servirá contar con un monoplaza competitivo si el muro de ingenieros no acierta con las decisiones en tiempo real.
Su reflexión final fue contundente: "Cogemos puntos, ayudamos al equipo para el campeonato, pero tenemos que ver qué ha pasado. Ellos hacen algo con la estrategia que nosotros todavía no hemos entendido".
Un aviso para Monza
El siguiente desafío será en el Gran Premio de Italia en Monza, un circuito que pondrá a prueba la velocidad punta del Aston Martin.
Alonso confía en que el equipo aprenda de lo ocurrido en Zandvoort y corrija errores para aprovechar al máximo el potencial del AMR25.
A pesar del sabor amargo, los dobles puntos conseguidos con Stroll y Alonso mantienen a Aston Martin en la lucha dentro de la zona media del campeonato.
Sin embargo, el asturiano dejó claro que no se conformará con sobrevivir: quiere estar en condiciones de luchar por posiciones de honor antes de la gran revolución de 2026.
En Zandvoort se marchó con ocho puntos más, pero también con una advertencia directa: la gestión del muro debe mejorar si Aston Martin aspira a convertirse en un equipo de referencia en el futuro inmediato.
