Setenta y cinco años después del primer campeonato de F1, un año menos del primer título de Juan Manuel Fangio, la Fórmula 1 vuelve a respirar aire argentino. Y lo hace gracias a Franco Colapinto, el joven piloto de Pilar que ha revolucionado el deporte motor en su país tras su debut en la categoría reina en 2024.
Este fin de semana, con motivo del Gran Premio de Emilia-Romaña, Colapinto regresa al volante de un monoplaza de F1, esta vez de la mano de Alpine, en una coincidencia histórica que no ha pasado desapercibida: la vuelta de un argentino a la parrilla en la misma semana en que se celebra el 75º aniversario del primer Mundial de la competición en la que un argentino, Fangio, fue segundo clasificado.
La dimensión del fenómeno Colapinto ha sido descomunal. Desde su aparición en las últimas nueve carreras de la temporada pasada, el bonaerense no solo ha sido tendencia constante en redes sociales, sino que ha transformado los índices de audiencia de la F1 en Argentina.
Franco Colapinto, en una imagen de sus redes sociales.
Según datos de Formula One Management (FOM), el país sudamericano figura entre los mercados de mayor crecimiento, junto con Estados Unidos, China, Canadá y Australia.
Un ascenso meteórico
Colapinto fue el piloto de reserva de Williams a comienzos de 2024, pero su salto a la titularidad en la recta final del campeonato provocó un efecto sin precedentes. Con apenas 21 años, rompió una sequía de 23 años sin representación argentina en la máxima categoría, provocando una verdadera fiebre por la F1.
Su participación hizo que Argentina fuera el segundo país con más búsquedas relacionadas con la categoría en Google durante el año, solo por detrás de Estados Unidos.
Su debut fue más que una novedad deportiva: se convirtió en un acontecimiento social. Más de 20.000 argentinos viajaron al Gran Premio de Brasil para verlo correr en Interlagos, tiñendo las gradas de celeste y blanco como nunca antes en una carrera fuera del país.
Los datos hablan por sí solos. Argentina experimentó un crecimiento explosivo en la audiencia televisiva, especialmente entre los más jóvenes y el público femenino, dos sectores que aumentaron más del 50% en los últimos cinco años según FOM.
En paralelo, Franco Colapinto se convirtió en el piloto más mencionado en X (ex Twitter) entre agosto y septiembre de 2024, superando incluso a figuras como Charles Leclerc o Carlos Sainz.
En cuanto a sus redes sociales, el salto fue espectacular. Su cuenta de Instagram pasó de tener unos 600.000 seguidores a superar los 3,7 millones, mientras que Alpine, tras anunciar su fichaje como piloto titular para cinco carreras en 2025, duplicó sus seguidores en menos de 24 horas, sumando casi 2 millones nuevos en Instagram.