McLaren ya ha presentado de forma oficial el nuevo monoplaza que presentarán a la disputa de las 500 Millas de Indianápolis, prueba que se celebra en el óvalo más mítico del mundo del motor y que este año contará con una sonada ausencia en el equipo de Woking, la de Fernando Alonso.
El piloto asturiano partió rumbo a Renault y a la nueva división de Alpine para retomar su ilusión por la Fórmula 1 y dejar aparcado de momento su sueño de ganar la Triple Corona, hito que podría lograr cuando consiga vencer en la complicada prueba de la Indy 500, la cual no se le ha dado bien en sus últimos intentos, a pesar de que incluso ha llegado a liderar la prueba en alguna ocasión.
Sin embargo, McLaren no le dio las herramientas necesarias para pelear por su gran sueño y ha tenido que dejarlo aplazado de momento para retomar su pasión por la Fórmula 1, un mundo en el que se sigue moviendo como pez en el agua tal y como demostró en la salida de la primera carrera de la temporada en Bahrein. Ahora, habrá que esperar un par de semanas hasta poder ver al asturiano pilotando en Italia.
Ahora, McLaren afronta también un nuevo reto tras separar su camino del de Fernando Alonso y lo hace también mediante un experimentado piloto que ya sabe lo que es ganar en las 500 Millas de Indianápolis. A los mandos del nuevo Arrow McLaren SP-Chevrolet se pondrá el colombiano Juan Pablo Montoya.
El fichaje de Montoya por parte de McLaren se trató de un claro cambio de cromos entre el colombiano y Fernando Alonso, ya que Montoya solo correrá la prueba del mítico óvalo, acompañando a los pilotos a tiempo completo del equipo Patricio O'Ward y Felix Rosenqvist.
Será la quinta vez que Montoya tome la salida en esta prestigiosa prueba de la que ya ha salido campeón en dos ocasiones, por lo que McLaren realiza una apuesta segura para intentar buscar su gran éxito y que el corredor cafetero pueda completar su trío de victorias, su triple corona particular.
Homenaje a McLaren
Además, la participación del colombiano viene marcada por un gran simbolismo debido al dorsal escogido, el 86, en claro homenaje a McLaren y a Peter Revson, quien consiguiera una histórica pole en el año 1971 a los mandos de su McLaren M16. El monoplaza llevará también los colores blanco y naranja con un diseño muy similar al legendario coche de la casa de Woking.
En aquella edición, Revson consiguió contra todo pronóstico la pole en la jornada de clasificación y además estableció el récord del Indianápolis Motor Speedway con una velocidad media de 178.696 mph en cuatro vueltas, superando el anterior registro en más de 7 mph. Todo eso llegó después de haber sido arrasado en la jornada anterior por el Penske de Mark Donohue y tras haber vivido un auténtico drama con la explosión del motor del McLaren de Revson que obligó a sus mecánicos a instalar una nueva unidad de potencia a toda prisa para que pudiera participar en dicha clasificación.
Montoya puede presumir de haber ganado en dos ocasiones, la primera de ellas en su debut, con Chip Ganassi Racing, aunque deberá prepararse al máximo después de llevar varios años fuera de la circulación: "He estado ausente de esta competencia, así que no puedo esperar para competir en mi primera Indianápolis 500 desde 2017".
"Es muy especial llevar el 86 en mi Arrow McLaren SP Chevrolet en honor a la increíble conducción de Peter Revson por la pole para McLaren en 1971. Este equipo es una gran mezcla de rica historia y una promesa emocionante, por lo que será un placer unirme a ellos mientras compito para alcanzar mi tercera victoria en las 500 Millas de Indianápolis". Ahora, Montoya llega para suplir a Fernando Alonso y luchar por un nuevo triunfo.
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