Lo primero que cayó en el Wanda Metropolitano el día de su estreno fue la herramienta fundamental en un partido de fútbol: el balón. Segundos después llegó al nuevo estadio de la capital una gran bandera rojiblanca, el mayor estandarte del Atlético de Madrid. Por último, apareció la bandera de España. Tres paracaidistas de la Patrulla Águila y la Patrulla Acrobática de Paracaidismo trajeron a los aficionados los tres símbolos de los que había en juego: el balón por el fútbol, la bandera del Atlético por el equipo local y la enseña nacional por el país al que se pertenece. El Rey Felipe estaba en el palco.

Hace ahora un mes, en el primer partido de la historia en el nuevo Metropolitanosiete aviones de la Patrulla Águila sobrevolaron el campo dibujando los colores de EspañaLa apertura del nuevo estadio del Atlético de Madrid fue otro guiño más, como en toda la historia del club, a su indudable sentimiento de españolidad. El Atlético, desde que nació, va ligado a España. En todos los grandes actos de la historia del club se puso de manifiesto la unión de aquello que representa a España con uno de sus clubes más queridos.

El Ejército del Aire protagonista en la inauguración del Wanda Metropolitano

Lejos de cualquier acto político, el Wanda Metropolitano vivirá este sábado (20:45 horas) uno de sus días grandes. Recibe al Barcelona, que supone albergar uno de los partidos más importantes de la temporada. El líder de la Liga ante uno de los aspirantes, separados ahora por seis puntos. Una derrota del Atlético sería un golpe en la línea del equipo de Simeone, que se alejaría bastante del primer puesto.

La respuesta al apoyo del Barça a la independencia

Pero, dadas las circunstancias que se viven en España, es imposible obviar el componente extrafutbolístico que tiene este Atlético-Barcelona. Es el primer partido que juega el Barça fuera de Cataluña tras el referéndum ilegal del 1-O y los sucesivos actos que han venido ocurriendo estas dos semanas. Los culés son la imagen más universal del independentismo catalán. Así lo dicen sus actos: grandes pancartas en el Camp Nou, permitidas y puestas por el club, en los que se daba la bienvenida a la "República catalana", partido a puerta cerrada, felicitaciones a Puigdemont e innumerables coqueteos ya no solo con el derecho a decidir (al que apoyan sin fisuras) sino con el independentismo.

Nadie en el Atlético de Madrid ha convocado oficialmente un apoyo expreso a la unidad de España. Tampoco habrá lemas o pancartas puestas por el club en el Metropolitano. En el Atlético nadie quiere politizar el partido. "Es un partido de fútbol, las manifestaciones políticas no se hacen en los estadios de fútbol", comentó Enrique Cerezo. El club llama a la calma. Saben que en el ambiente hay algo más que fútbol y que los días que han precedido al partido han sido "políticamente muy complicados".

"Creo que nuestros aficionados son conscientes de que una cosa es la política y otra cosa un partido de fútbol", se apresuró a comentar Cerezo. Ni desde la entidad ni desde las peñas se ha pedido que sus aficionados hagan algo. Solo ha sido el Frente Atlético el que ha pedido que la gente vaya con la bandera de España para "demostrar que en estos momentos difíciles la nación está mas unida que nunca" y recordando que, como decía el viejo himno, el Atleti es el "rey de la furia española".

Entre el llamamiento del club a no politizar el partido y el sentimiento de muchos de los aficionados, está la decisión individual de cada uno. Lógicamente no se prohibirá ninguna bandera. Por eso se espera que muchos si vayan con su enseña y ya una vez dentro se verá si el aficionado rojiblanco convierte al Wanda en una caldera 'política' además de fútbolística.

Así opinan algunos aficionados

"El Atleti también tiene que estar con la defensa de España. Parece que eso solo está asociado al Madrid. Nosotros somo tan españoles como los que van al Bernabéu. En eso no tenemos rivalidad. El Wanda debe hacer saber que estamos con la unidad de España y contra un equipo independentista como es el Barça", comenta José, socio del Atlético que estará este sábado en el campo.

"No he llevado nunca la bandera de España a un partido del Atleti, pero con todo lo que ha pasado en Cataluña me dan ganas de llevarla", dice David, socio desde que nació y fijo ya en el Wanda como lo fue en el Calderón. "Me siento español, como muchos catalanes, y estoy en todo el derecho de mostrar la bandera que me representa", añade. "El Atleti, como Real Madrid y Barcelona, es español. Otra cosa es hacer de un club una institución política. Eso nunca lo veré bien sea el club que sea", aclara.

"Es normal que la gente quiera manifestarse en el momento histórico que vivimos", asegura Miguel, habitual aficionado en los partidos como local del Atlético. "Llevar la bandera de tu país no es delito ni ningún acto discriminatorio. Es más, cuando he visitado otros países me ha dado envidia el orgullo con el que portan sus banderas. Deberíamos aprender a estar más unidos en España". Eso sí, para este joven hincha lo primero es el equipo. "Nosotros somos españoles, pero del Atleti primero".

Una aficionada con la bandera de España y del Atlético frente al Wanda Metropolitano. REUTERS

En el lado contrario está Cristina, que no llevará la enseña nacional. "La única bandera que tiene cabida el sábado en el Wanda es la rojiblanca, la del Atleti. No hay que mezclar política con deporte. Si vamos al fútbol es para animar a nuestro equipo, no para politizar un partido de fútbol", comenta.

En la misma línea está Israel. "Hay que llevar banderas del Atlético. ¿Quién juega, España o el Atlético? Las banderas de España para los partidos de España. No quiero ser como el Barça que mezcla política con fútbol", explica. "Creo que lo mejor para apaciguar las aguas revueltas es demostrar que ese tema no nos interesa y como espectáculo deportivo que es hay que apoyar con banderas rojiblancas", añade.

Se jugará al fútbol: el Atlético obligado a ganar

"El ambiente será espectacular, es un partido entre dos equipos que quieren optar a ganar la Liga, pero esto es un partido de fútbol, no es más", comentó Valverde, que no espera recibimiento hostil. El Barça tiene en Madrid su primer partido serio del torneo y se enfrentará a esos pocos equipos que pueden juzgar realmente a otro. Los culés ya perdieron ante el otro equipo de Madrid, en la Supercopa de España, por lo que habrá que ver como funcionan.

Existe la duda de cómo reaccionará el Barça al virus FIFA. Los antecedentes no son muy optimistas para ellos. Aún invictos (siete victorias en siete partidos de Liga y otras dos de dos en Champions), los azulgrana dependerán de un Messi en estado de gracia pero con pocos entrenamientos tras su largo viaje desde Argentina. 

Un miembro de la Patrulla Águilla llevando la bandera de España al Wanda Metropolitano. ATM

El Atlético se aferra a su fiabilidad en las grandes noches, aunque bien es verdad que Simeone todavía no ha ganado en Liga al Barcelona (tres empates y ocho derrotas). Obligado a recortar distancias tras sus últimos pinchazos, Griezmann, también salvador con Francia, se presenta como la figura a destacar en los rojiblancos. Le acompañará Carrasco, Koke, Saúl Ñíguez y... Correa. Lo confirmó el 'Cholo'.

Ante la enésima polémica creada desde Barcelona con el césped, Simeone contestó que "cuando te invito a comer a mi casa te invito con mi plato, mis manteles y mis vasos. No te digo si quiero un plato cuadrado o redondeo, porque voy a tu casa". A Valverde no le pareció mal. "Nos adaptaremos al menú", dijo el extremeño. 

En un partido con mucho morbo, al Barcelona le espera un ambiente hostil en su primera visita al Metropolitano. Y así será, salvo sorpresa, en todos los campos del resto de España a los que vaya. Por lo menos, en estas semanas todavía calientes del 'procés'. Los siguientes serán La Nueva Condomina de Murcia, Butarque en Leganés o Mestalla en Valencia. Es el precio apoyar la independencia. Te provoca animadversión en otras partes.

La Patrulla Águila sobrevolando el Calderón y dibujando la bandera de España. ATM