Publicada
Actualizada

Era un partido para cambiarlo todo y, sin embargo, el Real Madrid se autoboicoteó. El Manchester City se llevó la victoria en el Bernabéu gracias a dos regalos de los jugadores blancos, que antes se habían adelantado. Todo el buen trabajo tirado por la borda y Xabi Alonso queda en el alambre. [Narración y estadísticas: Real Madrid 1-2 Manchester City]

Rodrygo volvió a marcar 281 días después, ante un rival con el que ya tiene historia y le ha hecho, con este, cinco goles en la Champions League. Pero no fue suficiente: un fallo de Courtois en un córner y un penalti infantil de Rüdiger pusieron en bandeja la remontada citizen con tantos de O'Reilly y Haaland.

El partido tuvo su dosis de polémica. Todas las decisiones clave del árbitro Turpin y del VAR cayeron para el City: al Madrid le anularon un penalti y le dejaron sin pitar dos por mano de Nunes y un agarrón de Gvardiol sobre Asencio. Todo cuenta.

Xabi Alonso, en el banquillo del Real Madrid EFE

Aun con siete bajas y las molestias en la rodilla de Mbappé, que ni calentó con los suplentes, Xabi salió con un once ofensivo: Gonzalo, Rodrygo y Ceballos, las novedades. Guardiola, sin Rodri, mantuvo a los pilares de su renovado City: Nico, Cherki y Doku junto a los Haaland, Foden y compañía.

La intensidad del Madrid, la misma que le ha faltado en tantos partidos de esta temporada -y de la pasada-, marcó el inicio del partido. Tanto, que a los dos minutos Clément Turpin estaba pitando un penalti sobre Vinicius. El VAR lo anuló y señaló falta fuera del área.

Rodrygo, 32 partidos después

La persistencia del Madrid, aún así, continuó ante un City con espacios por su lado izquierdo. Lo aprovechó el señalado Rodrygo, cuajando sus mejores minutos de la temporada. A los once minutos, Foden se llevó la primera amarilla del partido. Los blancos iban a más.

Rodrygo celebró con Xabi Alonso su gol al Manchester City Europa Press

Las decisiones arbitrales irían todas en su contra y antes del minuto 20 quedaba impune una mano despegada dentro del área de Matheus Nunes. Turpin ya había perdonado un par de tarjetas más a un City asustado.

Susto que a Guardiola le entraría en los huesos con el 1-0. Llegó en el 28', obra de Rodrygo. Fue en una contra que remató el brasileño ajustando al palo contrario de Donnarumma. Un gran gol para romper una racha de 1.415 minutos y 32 partidos sin marcar -desde el 4 de marzo- que le estaba haciendo mucho daño al brasileño.

Del baño al 1-2

La ventaja confirmaba lo que se estaba viendo, un mejor Madrid que asfixiaba sin balón a los 'jugones' -como Foden o Cherki- de un Pep que en citas así echa de menos a Rodri. Y cuando más incómodo estaban los ingleses, encontraron la liberación en forma de regalos a balón parado.

O'Reilly empuja el balón en la acción del 1-1 contra el Real Madrid Reuters

Primero fue un error de Courtois en un córner. Gvardiol cabeceó y, tras la parada del belga, el balón quedó a merced de un O'Reilly que solo lo tuvo que empujar. Era el minuto 36.

En el 42' se completó la catástrofe. El culpable: Rüdiger. El alemán hay veces que va muy al límite en el área y se excedió agarrando a Haaland hasta que provocó el penalti. El VAR avisó a Turpin, que lo pitó tras verlo en el monitor, y el noruego no falló ante Courtois.

El Madrid pasó del baño al City al 1-2 en cuestión de seis minutos. Dos goles encajados con suma facilidad con lo bien que estaba jugando. Con lo importante que era, además, este día.

Lo curioso es que en la siguiente jugada al penalti, Asencio fue derribado en el área rival por un agarrón de Gvardiol y este no lo pitó Turpin. Las decisiones clave del colegiado francés cayeron todas del lado del equipo de Pep, un factor a tener en cuenta.

Antes del descanso, Courtois evitó que la herida madridista fuera más grande con una doble parada a Haaland y Cherki. Llegó el pitido del colegiado y una sensación de abatimiento recorría el Bernabéu: el Manchester City, haciendo lo mínimo, iba ganando 1-2 a un notable Real Madrid.

Sin cambios en la reanudación, el intermedio le vino bien a un City que ganó en presencia en los alrededores de la portería de Courtois. Pese a ello, sobre el minuto 50, pudo empatar el Madrid, pero Bellingham se equivocó de decisión al querer definir de vaselina un mano a mano con Donnarumma.

Reacción insuficiente

Xabi Alonso movería el banquillo antes de cumplirse la hora de reloj: Güler en el lugar de Gonzalo. Podía parecer el cambio fácil, por retirar al canterano, pero lo cierto es que el tolosarra trataba de reubicar a un Vinicius perdido en el ataque hasta ese momento. Aún así, quitar al '9' que podía anclar a los centrales podía ser un riesgo.

Vinicius se lamenta durante el Real Madrid - Manchester City Reuters

Las cosas no salían, Courtois hacía alguna parada más para sostener al equipo y Xabi metió a Brahim por Ceballos. Al que no llamaba -ni llamaría- era a un Mbappé que quedó claro que no estaba para jugar este partido.

Los minutos corrían, las piernas pesaban cada vez más, pero el Madrid no perdería la cara al partido. Pep quitó de una tacada a Haaland -con molestias-, Foden y Cherki. A once minutos del añadido final entró Endrick en el lado merengue -por Asencio-, un cambio que gustó al Bernabéu y encendió a la grada.

El '9' brasileño dio al larguero en el minuto 85. Fue esa la más clara que tuvo el Madrid en un final de partido demasiado atropellado. Segunda derrota seguida en el Bernabéu en cuatro días. Reacción insuficiente. Xabi seguirá, pero el margen de maniobra cada vez es más reducido.

Real Madrid 1-2 Manchester City

Real Madrid: Courtois; Fede Valverde, Raúl Asencio (Endrick, m.79), Rüdiger, Carreras; Tchouaméni, Ceballos (Brahim, m.67), Bellingham; Rodrygo, Vinícius y Gonzalo (Güler, m.58).



Manchester City: Donnarumma; Nunes, Dias, Gvardiol, O'Reilly; Nico, Bernardo Silva, Foden (Reinjders, m.70); Cherki (Savinho, m.70), Doku y Haaland (Marmoush, m.70).



Goles: 1-0, m.28: Rodrygo. 1-1, m.35: O'Reilly. 1-2, m.43: Haaland de penalti.



Árbitro: Clément Turpin (FRA). Amonestó a Rüdiger (43), Rodrygo (87) y Carreras (88) por el Real Madrid; y a Foden (11), O'Reilly (76) y Bernardo Silva (90), junto al técnico Guardiola (82) por el Manchester City.



Incidencias: encuentro correspondiente a la sexta jornada de la Liga de Campeones, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 83.186 espectadores.