Ivan Rakitić ha vuelto a poner el foco sobre la gestión del FC Barcelona con Lamine Yamal, y lo ha hecho con un mensaje claro: el club debe proteger a su mayor promesa antes de que el peso de la expectativa lo desborde.
Rakitić pide cautela ante la presión que rodea a Yamal
El excentrocampista croata, que conoce como pocos los vaivenes del vestuario azulgrana tras seis temporadas en el Camp Nou, analizó la irrupción del joven atacante en una conversación con Flashscore.
Desde su perspectiva, el talento del extremo es innegable, pero considera que la organización azulgrana corre el riesgo de dejarle absorto entre elogios, comparaciones y exigencias que no corresponden a su edad.
“Lamine es un futbolista extraordinario y su progresión es evidente, pero el fútbol también te enseña el otro lado: lesiones, críticas, presión”, advirtió, recordando que su camino no debería medirse con la sombra del mítico trío que él mismo abasteció, Messi, Suárez y Neymar. “Debe seguir su propio rumbo y aprender a convivir con todo lo que rodea a un jugador joven en un club tan expuesto”.
El croata ya había lanzado una advertencia antes del Clásico
Rakitić insistió en que tanto el Barça como la selección española deberían asumir un papel más activo en su protección. A su juicio, el reto no es potenciar el talento, algo que el jugador ya muestra con naturalidad, sino evitar que la exigencia y el clima mediático terminen convirtiéndose en un obstáculo.
“Tiene algo especial y hay que ayudarle a manejar lo que viene con ello”, reflexiona el croata, que también recordó que convivir con estrellas mundiales no le hacía olvidar la fragilidad emocional que acompaña a cualquier futbolista en formación.
Rakitic: uno de los mayores defensores de Yamal
Sus palabras encajan con lo que ya había expresado recientemente en un acto previo al Clásico. En aquella ocasión, Rakitić se mostró aún más directo al defender al extremo de 18 años, consciente de que se ha convertido en el principal generador ofensivo de Hansi Flick.
“Hay que permitirle disfrutar y expresarse”, señaló, subrayando que su personalidad forma parte de lo que lo hace distinto. Para el croata, los debates en torno a su carácter distraen de lo esencial: Lamine Yamal ya es el jugador más determinante del equipo y necesita un entorno que no pretenda moldearlo a la fuerza. “La atención va a estar sobre él, eso es inevitable. Lo que sí depende de todos es el cariño y la protección que reciba”.
Con esta doble advertencia, Rakitić deja entrever que el problema no es el nivel del futbolista, sino la incapacidad del Barcelona para gestionar a una figura tan joven en un contexto que exige resultados inmediatos.
