La jornada 9 de la temporada 2025-26 de La Liga marca un antes y un después en el fútbol español. Los jugadores han estallado contra la patronal y contra Javier Tebas, quien no solo ha hecho caso omiso a las protestas de quienes al fin y al cabo sustentan este deporte, sino que ha hecho lo posible ocultándolas de las retransmisiones televisivas.
El Real Madrid no está solo en esta lucha desigual. Todos los clubes que conforman la Primera División han permitido a sus jugadores manifestarse ante una decisión que adultera la competición.
De hecho, hasta los propios jugadores del Barça tampoco jugaron los primeros segundos del partido ante el Girona, evidenciando así que jugar en Miami ha sido una decisión del club sin haber contado con ellos.
Todos los clubes están involucrados y en todos los partidos el modus operandi de la retransmisión de LaLiga ha sido el mismo: durante los 15 segundos de parón, la imagen ha mostrado un plano del estadio, un plano cenital o un plano alejado de los jugadores para que no se viera lo que estaba pasando mientras se mostraba un rótulo con la frase 'Compromiso por la paz'.
Esta censura más propia de otros tiempos, sin embargo, no ha hecho sino avivar la llama del enfrentamiento abierto que tienen los futbolistas contra la patronal presidida por Javier Tebas.
Falta de transparencia
Los capitanes se han plantado ante LaLiga por el 'Plan Miami'. De hecho, la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) ha pedido a la patronal que retrase el día de la venta de entradas para el Villarreal-Barça en Miami hasta que se vea con los capitanes.
Los jugadores de todos los equipos de Primera y el sindicato pactaron dejar de jugar durante unos segundos para denunciar "la falta de transparencia, diálogo y coherencia de LaLiga".
La AFE habló de "las permanentes negativas y propuestas quiméricas" por parte de la patronal, así como del rechazo total a "un proyecto que no cuenta con la aprobación de los protagonistas principales", en referencia a los futbolistas.
El primer parón fue en el Oviedo-Espanyol del pasado viernes -10 segundos sin jugar que no se vieron en la retransmisión televisiva- y el último ha sido en el Getafe-Real Madrid del domingo por la noche. No obstante, aún falta por disputar el encuentro que enfrenta al Alavés frente al Valencia el lunes a las 21:00 horas.
La protesta de los futbolistas ha surgido como motivo del enfado y el hartazgo que existe porque las instituciones no cuenten con ellos. Especialmente en temas tan trascendentales como el llevar un partido de LaLiga fuera de España (el Villarreal-Barcelona está previsto que se juegue el 20 de diciembre en Miami), donde no se cumplirían varios puntos del convenio colectivo.
La imagen del Carlos Tartiere que se pudo ver en TV mientras los jugadores protestaban.
A raíz de esta manifestación que se inició en el Carlos Tartiere, LaLiga reculó a medias y disfrazó las protestas que se están dando en esta novena jornada por el partido de Miami.
En el encuentro entre el Sevilla y el Mallorca, la señal de televisión sí mostró el parón inicial de los futbolistas, pero ese momento se acompañó de un rótulo en el que se podía leer "compromiso por la paz" para tratar de desviar la atención y confundir al espectador.
Este llamamiento a la paz es una iniciativa a la que se ha adherido LaLiga esta jornada. "Durante los partidos correspondientes a la jornada 9 de Primera División y la jornada 10 de Segunda División, LaLiga realizará un acto simbólico, como muestra del compromiso del fútbol con la paz", comentó hace unos días la patronal.
Esta vez también los comentaristas de la señal de televisión hicieron referencia a las protestas organizadas por la AFE y los capitanes de los equipos de Primera División, algo que en la retransmisión del Oviedo-Espanyol no sucedió.
De hecho, por ese motivo los jugadores del Celta y de la Real Sociedad hicieron un doble parón para impedir así que la realización cambiara de plano.
Y es que a diferencia de los anteriores encuentros de LaLiga, en los que todos los equipos se detuvieron diez segundos tras el saque inicial, los jugadores del equipo celeste y el conjunto txuri-urdin también hicieron una pausa, pero en el segundo 40. El gesto, acompañado por los aplausos del público en Balaídos, buscaba evitar la censura de las imágenes
La retransmisión televisiva, que en partidos previos había intentado ocultar las protestas mostrando un plano cenital, cambió rápidamente de enfoque al percatarse de lo que ocurría. Primero mostró a Claudio Giráldez y, posteriormente, desplazó la imagen hacia uno de los fondos del estadio.
Miguel Ángel Galán envió en la tarde del domingo un nuevo escrito al TAD en su denuncia contra Tebas al considerar infracciones muy graves disputar el Villarreal-Barcelona sin la autorización del CSD y censurar la protesta de los jugadores en la novena jornada.
En esta ocasión, la asociación que preside el denunciante reclama la destitución inmediata de Tebas por vulnerar los principios de neutralidad, objetividad y transparencia que rigen las entidades deportivas.
Ahora, por primera vez desde que llegó a la presidencia de LaLiga en 2013, Javier Tebas tiene a los jugadores en contra. El parón de esta jornada se ha realizado de forma simbólica y no a través de una huelga, aunque a estas alturas ya nada es descartable que pueda suceder.
