Michel Platini volvió a pronunciarse de forma categórica contra el sistema de videoarbitraje durante su participación en el Festival dello Sport de Trento, manteniendo su histórica posición contraria a esta tecnología.
El ex presidente de la UEFA fue tajante al declarar que "si hubiera sido presidente de la FIFA, el VAR nunca habría existido", reiterando su oposición frontal a la implementación de esta herramienta tecnológica en el fútbol.
La leyenda francesa defendió su posición argumentando que "el VAR no forma parte de la filosofía del fútbol" y propuso una alternativa más limitada para el uso de la tecnología en el deporte. Platini estableció que el sistema debería restringirse únicamente a situaciones técnicas específicas: "Solo para la línea de gol y los impedimentos", dejando el resto de decisiones en manos humanas.
Para todas las demás decisiones arbitrales, el francés fue contundente: "Tenemos árbitros y asistentes. ¿Por qué complicar más las cosas?", defendiendo el criterio humano por encima de la tecnología.
El tricampeón del Balón de Oro enfatizó su visión romántica del fútbol: "Dejemos el fútbol humano. Dejemos arbitrar a los árbitros", abogando por mantener la esencia tradicional del deporte más popular del mundo.
Su crítica se fundamenta en que considera los errores parte integral del juego: "Los errores son parte del fútbol" y deben preservarse dentro de la interpretación y falibilidad humana.
Mala relación
Esta posición contrasta directamente con la defendida por Gianni Infantino, actual presidente de la FIFA, quien ha calificado al VAR como una herramienta indispensable de justicia y transparencia futbolística.
La tensa relación entre ambos dirigentes se remonta a la suspensión de Platini en 2015 por el controvertido pago de dos millones de francos suizos recibido de Sepp Blatter cuando era presidente de la FIFA.
El francés ha acusado públicamente a Infantino de "hacer todo lo posible para que no regrese al fútbol" tras haber cumplido completamente su sanción impuesta por el Comité de Ética de la FIFA.
En 2022, Platini elevó sus acusaciones presentando una denuncia formal contra Infantino por "tráfico activo de influencias" ante la justicia francesa, escalando su enfrentamiento con las autoridades futbolísticas actuales.
Las críticas de Platini al VAR no son recientes, manteniéndolas consistentemente desde 2019 cuando lo calificó públicamente como "una porquería" y "una gran mierda" en diversas entrevistas mediáticas.
La persistente batalla dialéctica entre Platini e Infantino refleja una disputa mucho más profunda y fundamental sobre el rumbo que debe tomar el fútbol contemporáneo en las próximas décadas.
Mientras Infantino defiende activamente la modernización tecnológica como progreso necesario, Platini aboga apasionadamente por mantener la esencia humana e imperfecta que siempre ha definido al fútbol como deporte universal.
