Venció el FC Barcelona al Viktoria Pilsen, pero no convenció. El equipo de Xavi Hernández dejó una imagen irregular en el Doosan Arena ante un conjunto que ha sido uno de los peores en la historia de la fase de grupos de la Liga de Campeones. Salir por Europa les cuesta a los azulgranas y en su despedida volvieron a dejar muchas dudas. [Narración y estadísticas: Viktoria Pilsen 2-4 FC Barcelona].

A pesar de que se les puso todo de cara con el gol de Marcos Alonso en el minuto 6, el conjunto azulgrana tuvo un dominio algo estéril en la primera mitad, ya que el larguero e Iñaki Peña evitaron los primeros sustos del Viktoria Pilsen. Ni siquiera con el gol de Ferran Torres antes del descanso consiguieron domesticar el equipo checo, que supo crecerse en la adversidad para cuajar su mejor partido de la temporada. 

Ellos sí supieron decir adiós a la Champions con la cabeza alta y no un Barça que rozó otro ridículo estrepitoso en el Viejo Continente. Un claro penalti del joven Pablo Torre sobre Chory inició la reacción local. Ferran Torres consiguió anotar a los pocos segundos para intentar poner tranquilidad, pero Chory replicó el doblete del atacante español con un certero cabezazo que evidenciaba la endeblez defensiva de un Barça muy gris. 

El Doosan Arena apretó con fuerza en el último tramo del partido soñando con la machada de sus jugadores, pero la falta de energías les terminó pasando factura. Pablo Torre se redimió de su penalti anotando un buen gol justo antes de lesionarse. Tanto que no evitó que el Viktoria Pilsen tuviera nuevas ocasiones como un disparo al poste de Jirka que hizo temblar a un Xavi que pasa el apuro del viaje a la República Checa para despedirse de una Champions con sabor a fracaso antes de pensar en la Europa League

El Barça domina en Pilsen

El FC Barcelona llegó a la República Checa con pocos alicientes deportivos, pero sí económicos. Los 2,8 millones que reparte la UEFA por victoria son básicos para la supervivencia financiera del club y con ese propósito saltaron los jugadores al terreno de juego. Con la baja de Lewandowski, otros tenían que asumir los galones en ataque. Y el primero en hacerlo fue Marcos Alonso. El lateral reconvertido a central fue el jugaor más peligroso en el inicio del duelo. 

De hecho, abrió la lata en el minuto seis de partido. Él mismo inició la jugada en zona de ataque y combinó con Ferran que abrió a banda izquierda para Ansu Fati. El extremo, desde el pico del área, golpeó a portería, pero Stanek detuvo el lanzamiento en semifallo. Marcos Alonso, el más listo de la clase, llegó antes que nadie para empujar un balón que iba manso hacia la línea de gol. 

En un partido tan extraño como este con el Barça ya destinado a la Europa League, no había plan mejor para que no se complicase que empezar ganando en los minutos iniciales. El Barça dominaba y así se cumplió el primer cuarto de hora, cuando Ansu Fati dejó un tímido acercamiento con un disparo que se marchó alto.

El Viktoria Pilsen, que hasta entonces casi no había comparecido, empezó a generar peligro. Saque de falta de Kalvach desde la derecha y Chory, solo dentro del área, remataba de cabeza picando el balón. Su intentó se estrelló en el larguero para estremecer a todo el barcelonismo. Había sido un aviso muy serio. El Barça respondió con una doble ocasión de Piqué y Ansu Fati, pero las tornas estaban cambiando.

El conjunto checo estaba generando peligro por alto y el Barça empezó a tambalearse. Así llegó la segunda oportunidad clara de los locales en el minuto 30. Kalvach se quedó solo dentro del área tras una recuperación en la zona de peligro y disparó a portería, pero se topó con la buena reacción de un Iñaki Peña que salió rapidísimo. 

El Barça buscaba el descanso después de haber tenido dos sustos considerables, pero lo cierto es que supieron recomponerse en cuestión de minutos. Ferran Torres tuvo un primero intento que perdonó, pero a la segunda no falló. Balón de Raphinha en profundidad para la entrada de Jordi Alba por el carril zurdo, centro medido del lateral y en boca de gol, completamente solo, el atacante la empujaba por poner la tranquilidad antes del descanso. 

Ferran Torres agradece a Raphinha una asistencia después de marcar Reuters

El Pilsen se desata

Tras el paso por vestuarios, todo apuntaba a que el partido podría acabar en goleada azulgrana, pero nadie contaba con la reacción de un gran Viktoria Pilsen. En el minuto 51, Chory fue víctima de un penalti. Un balón colgado al área del Barça le cayó al delantero en posición de marcar tras varios rebotes. Justo cuando estaba en la zona de máximo castigo para disparar, Pablo Torre le cargó por detrás en su espalda y el colegiado señaló la pena máxima que fue transformada por el ariete. 

El Viktoria Pilsen recortaba diferencias y le ponía picante a la segunda parte. El Barça no tardó en reaccionar y solo tres minutos más tarde, Ferran Torres consumaba su doblete. El atacante azulgrana recortaba a un par de defensas en la frontal del área y jugaba con Raphinha, que llegaba por la derecha. El brasileño, tras un par de driblings, le devolvió la pelota con un pase raso al corazón del área y ahí Ferran no perdonó disparando por el centro de la portería. 

Parecía que ese tanto finiquitaba ya el choque, pero el cuadro checo seguía con más ganas de fiesta. Una gran recuperación Kalvach en el centro del campo sobre Raphinha terminó con un centro desde la derecha que Chory no desaprovechó. Esta vez sí acertó al picar el balón y consiguió batir a Iñaki Peña para hacer el doblete. Fueron los mejores minutos de un equipo que hasta ahora casi ni había comparecido en esta Champions. 

La hinchada del Doosan Arena jaleaba a los suyos soñando con una hazaña que hubiera sido recordada durante décadas. Al Barça le perseguían los problemas ya que a su fragilidad defensiva su unía la grave lesión muscular de Kessié, que se tenía que marchar dolorido por un problema considerable en el isquio de su pierna derecha. 

Sin embargo, cuando todo estaba dispuesto para otra noche negra, apareció Raphinha. El brasileño le puso un balón medido y en profundidad a Pablo Torre. El joven talento hizo un control precioso, se acomodó la pelota a la zurda y se sacó un potente latigazo que batió a Stanek. Tanto empeño puso en la acción que se terminó lesionando. Pero consiguió llevar una cierta tranquilidad al banquillo culé que venía más cerca el triunfo. 

El Viktoria Pilsen hizo un gran final de partido y rozó el tanto con un disparo de Jirka que se estrelló en el poste, pero terminó hincando la rodilla ante un Barça que rozó otro ridículo. Victoria, pero manera agridulce de despedirse después de haber dejado tantas dudas. Ahora, a pensar en la Europa League. 

Xavi Hernández en el banquillo del Doosan Arena Reuters

Viktoria Pilsen 2-4 FC Barcelona

Viktoria Pilsen: Stanek; Holik, Hejda, Pernica, Jemelka (Haven, 57'); N'Diaye (Bucha, 57'), Kalvach (Cermak, 78') Jirka, Vlkanova, Pilar (Kronus, 88'); y Chory (Bassey, 79').



Barcelona: Iñaki Peña; Bellerín, Piqué, Marcos Alonso, Jordi Alba (Balde, 57'); Kessié (Casadó, 67'), Pablo Torre (Álvaro Sanz, 77'), Gavi; Raphinha (Dembélé, 77'), Ferran Torres y Ansu Fati.



Goles: 1-0: Marcos Alonso, 6'. 2-0: Ferran Torres, 44'. 1-2: Chory (p.), 52'. 3-1: Ferran Torres, 54'. 2-3: Chory, 63'. 2-4: Pablo Torre, 75'.



Árbitro: Radu Petrescu (RUM). Mostró cartulina amarilla a Gavi (42'), N'Dyaye (46'), Pablo Torre (50') y Ferran Torres (90 +1').



Incidencias: Partido de la sexta y última jornada del Grupo C disputado en el Doosan Arena ante unos 11.000 espectadores.