Octavian Sovre se ha convertido en uno de los protagonistas de esta edición de la Champions League. Nunca un árbitro asistente ha tenido tanta influencia en la máxima competición continental, pero dos escándalos le han salpicado de forma directa. Primero fue la polémica racista durante el Istanbul Basaksehir - PSG, donde formaba parte del equipo arbitral que fue acusado y absuelto después por la UEFA. La última ha sido durante el Manchester City - Borussia Dortmund, donde se vio al juez de línea pedirle un autógrafo a Erling Haaland.
Pues bien, este último revuelo tiene una explicación. Cuando estaban en el túnel de vestuarios y el partido había finalizado ya, el colegiado se dirigió a Haaland para explicarle el proyecto solidario en el que está trabajando en Rumanía. De esta manera, el delantero noruego accedió a firmarle las dos tarjetas que llevaba en el bolsillo esa noche, una amarilla y otra roja. No se trataba de ningún trato de favor ni de simple admiración.
Sovre colabora con una fundación que trabaja con personas con autismo. De esta forma, aprovecha su influencia en los partidos internacionales para pedir favores a determinadas estrellas y recopilar objetos de valor como camisetas o autógrafos para hacer una subasta solidaria que recoja fondos con el fin de ayudar a la fundación. En esta ocasión, eligió esas dos tarjetas y a Haaland para que se las autografiara y poder ponerlas en subasta.
La influencia del jugador del Dortmund ha crecido en el último año. Es el objetivo de todos los grandes de Europa y sale día sí, día también, en todas las cabeceras de la prensa deportiva mundial. No para de batir récords de precocidad y todo apunta a que este verano será protagonista de un gran traspaso. El Real Madrid y la Premier pujan por este delantero que parece que quiere dar un paso más en su todavía corta carrera profesional.
Messi, también
El árbitro asistente ha hablado sobre esta polémica abiertamente en su país para comentar en qué consiste este proyecto. Además, ha reconocido que "Messi estaba muy interesado en lo que estaba haciendo la organización" y desveló que le firmó "9 tarjetas cuando nos conocimos después de un partido".
La presidenta de la asociación SOS Autism Bihor, Simona Zlibuț, explicó lo que significaba este gesto a la vez que nombraba miembro de honor al colegiado: "Queremos agradecerle todos los artículos deportivos que ha donado a lo largo de los años para poder ser subastados en los eventos benéficos organizados. Así es como conseguiremos dinero para las terapias de adultos con formas severas de autismo, al igual que mi hija de 21 años, que no sabe cuándo tiene que ir al baño y no puede comer sola".
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