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    Inicios

    Romario nació el 29 de enero de 1966 en Río de Janeiro. Sus primeros pasos en el fútbol los dio en el Vasco de Gama, club en el que permaneció hasta decidirse a cruzar el Atlántico y al que más tarde volvió para encarar la recta final de su carrera y también para hacer las veces de entrenador.
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    Salto a Europa

    Su primera club en el Viejo Continente fue el PSV Eindhoven. Cinco temporadas militó en el conjunto holandés, comenzando a destacar también en Europa en el aspecto goleador. Eso le abrió las puertas del Barcelona, en el que permaneció entre los años 1993 y 1994.
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    Paso por el Barcelona

    En su primera temporada en el Camp Nou fue un habitual, formando parte del Dream Team de Johan Cruyff junto a otras leyendas como Stoichkov, Laudrup o Koeman. Ganó La Liga con el Barça y se proclamó Pichichi de La Liga, para también disputar la final de la Champions League. Sin embargo, su etapa se cerró después de ganar el Mundial con Brasil y llegar 21 días tarde a la vuelta al trabajo con el Barcelona. Él quiso regresar a su país.
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    Entre Brasil y Valencia

    Su rebeldía con el Barcelona acabó con Romario regresando al fútbol brasileño. Allí le trataban como a un Dios después de conquistar el Mundial y entre sus etapas con Flamengo y Fluminense también pasó por el Valencia, con el que marcó 14 goles en 21 partidos. Fue su complicada relación con Luis Aragonés la que puso el cierre a su paso por Mestalla antes de lo esperado.
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    Etapa final

    Antes de colgar las botas, Romario jugó también en Catar, en el Al-Sadd; en Estados Unidos, en el Miami FC; y en el Adelaide United, en Australia. El final del astro brasileño futbolista llegó a cabo entre su última etapa en el Vasco de Gama y el América do Río. Hay que recordar que es uno de los pocos futbolistas que ha logrado proclamarse máximo goledor en tres países diferentes: Brasil, Holanda y España.
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    Romario con la Canarinha

    En 1987 debutó con la selección de Brasil y también firmó su primer gol con la verde-amarela. Su gran éxito fue conquistar el Mundial de 1994, en el que además se hizo con el Balón de Oro del torneo más importante a nivel de selecciones, aunque también logró ganar una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de 1988, en los que fue máximo goleador. Su último encuentro con la Canarihna fue en 2005.
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    Del campo a los despachos

    El América pasó de ser una de sus víctimas favoritas cuando jugaba en el Vasco de Gama al equipo que le dio la confianza y la oportunidad de tener un cargo como dirigente, pasando a ser el coordinador de fútbol del América en 2009.
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    Problemas extradeportivos

    No todo ha sido fútbol en la vida de Romario. El exjugador protagonizó portadas por su complicada vida amorosa y también por su afición a la noche. Un sinfín de líos por los cuales incluso llegó a ser condenado en 2005 a pagar más de 20.000 dólares a Zico por daños morales.
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    El escándalo de su condena

    Cuatro años más tarde de esa multa, también fue condenado. Esta vez  por no declarar los ingresos que recibió cuando jugaba en el Flamengo en el ejercicio de 1996. Romario fue sancionado con dos años y medio de prestación de servicios a la comunidad y con más de 220.000 dólares.
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    Vida política

    Romario se fue alejando del fútbol y se centró en la polémica para encauzar su vida. Así se convirtió en senador por Río de Janeiro por el Partido Socialista Brasileño. Después cambió y se pasó al partido centralista del país llamado Podemos.