En Inglaterra el fútbol no descansa y este mismo día de Año Nuevo han tenido lugar varios partidos de la Premier League. Entre ellos el encuentro que han disputado el Southampton y el Tottenham en el St. Mary's Stadium. Ya en el minuto 77 del choque tuvo lugar la acción polémica y cómica del día.

José Mourinho se coló en el banquillo del Southampton para espiar sin reparo ninguno a su rival. En ese momento, el técnico local, el austriaco Hasentuttl, se encontraba mirando sus notas en una libreta. El colegiado del choque no dudó y mostró a The Special One la tarjeta amarilla. Por entonces su equipo perdía 1-0.

José Mourinho, amonestado con tarjeta amarilla en un partido del Tottenham Reuters

El entrenador portugués habló sobre el incidente en la rueda de prensa posterior al partido. "Claramente merecía la cartulina amarilla. Fui grosero. Pero fui grosero con un idiota. Tuve malas palabras con el chico", declaró en BT Sport, para después analizar la primera derrota del año de los spurs.

"El mal resultado es la continuidad del año pasado. Durante 12 meses, ha sido muy difícil obtener resultados fuera de casa. Es difícil. El trabajo no se trata de comprar, se trata de trabajar con los jugadores en el campo, pero no tenemos tiempo para hacerlo", comentó José Mourinho.

Lesiones

La derrota ante el Southampton no llegó sola, sino también con la mala noticia de las lesiones de Ndombélé y Kane. "Lo de Ndombélé, no lo sé. Me imagino que esta es la décima lesión de la temporada. No le dan continuidad y le paralizan para jugar. Tuvimos solamente tres días entre partidos. Una vez más, él estará fuera de nuevo. Harry Kane juega cada minuto, juega todo el tiempo. Su lesión puede ser grande, puede ser pequeña. Los isquiotibiales siempre son negativos. Lo seguro que estará fuera", apuntó el luso.

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