El entrenador del Betis, Quique Setién, afirmó tras la eliminación en Mestalla en la semifinal de la Copa del Rey, que el plan de su equipo había sido "extraordinario", pero que el acoso final no surtió efecto tras una buena primera parte y haber entrado mal en la segunda.

"Probablemente perdimos la final en el encuentro de ida", indicó Setién, quien señaló que hubo dos acciones, una en la ida, de Garay sobre Júnior Firpo, y otra en la vuelta, de Paulista sobre Lo Celso, que son penalti, aunque indicó que fueron dos jugadas definitivas que "desgraciadamente el árbitro no consideró como penalti".

"No hemos renunciado a atacar, pero hemos tratado de evitar sus goles al contragolpe y prueba de ello es que sus opciones solo han llegado a la contra", prosiguió el técnico del Betis.

Los jugadores del Valencia celebran el gol de Rodrigo ante el Betis en Copa del Rey Heino Kalis Reuters

"No estamos para hacer veinte ocasiones de gol y meter cinco. Estamos en otra cosa y el Valencia tiene en punta un potencial que no tenemos nosotros y pese a ello estoy muy orgulloso de haber perdido por un gol contra este equipo", continuó.

Setién afirmó que los goles son decisivos y que su equipo dispuso de tres o cuatro ocasiones que no han entrado. "En partidos tan igualados esas circunstancias decantan los marcadores", agregó.

También explicó que habían metido al Valencia en su campo durante casi todo el partido, pero el rival no les dejó espacios con muchos jugadores en su área. Destacó la progresión de su equipo que es "admirable", aunque admitió la decepción de no haber podido dar a la afición del Betis una final en su estadio.

También agradeció que los gritos de "Betis, Betis" por parte de la afición del Valencia al final del encuentro y señaló que hay que reconocer los méritos del rival y que la afición del conjunto verdiblanco también es muy parecida a la de los ches. 

[Más información: El Valencia gana al Betis y se clasifica para la final de Copa once años después]

Noticias relacionadas