La edición más femenina de Ven a cenar conmigo gourmet edition entra en su recta final. Este martes se emitía la tercera y penúltima entrega, con Loles León (68 años) como anfitriona y Rosa Benito (63) como primera clasificada. Sin embargo, uno de los interrogantes de cara a este nuevo episodios era saber si la tensión de Loles León e Irma Soriano (55) dejaría otros cruces de declaraciones entre ambas.

Desde el primer momento se vio que el programa iba a llevar el sello de Loles León. La actriz reconocía, ya metida en faena, que la cocina le "apasiona". "Cuando voy a cocinar, los ingredientes y las recetas me recuerdan personajes e historias. Soy cocinera de barrio, de puerta a puerta", comentaba antes de presentar a su particular pinche de cocina: "la disecada”, un maniquí con el que habla mientras se mueve entre los fogones. "Todo lo que me sale mal lo pago con ella, así a las personas que vienen humanas no les digo nada, porque ya me he desahogado", describió la actriz.

Loles León fue la encargada de cocinar en la nueva entrega de 'Ven a cenar conmigo: gourmet edition'.

La primera en llegar al punto de encuentro fue Rosa Benito, a quien no le gustaron demasiado los entrantes. A continuación se presentó Belinda Washington (55). Para ella la relación de la anfitriona con la disecada es "preocupante". La última, Irma Soriano, dejó la anécdota del cóctel de bienvenida, al sufrir un pequeño incidente con uno de los aperitivos. A falta de servilletas, la anfitriona recurrió a uno de los guantes de su maniquí. La situación se volvía por momentos tremendamente hilarante.

Y antes de sentarse a la mesa, Loles León ofreció a sus invitadas tirarse en el césped en una especie de cama redonda improvisada. Las cuatro se repartieron piquitos, deparando otro momento delicioso para los programas de zapping.  

La hora de la verdad

Llegó el momento de entrar a la casa y poner a prueba el menú de la anfitriona, quien ya hacía gala de su autoconfianza durante la preaparación: "De las cuatro creo que la que más nivel tiene soy yo".  Para abrir boca, el guacaloles, una crema de aguacate, con manzana, leche sin lactosa, limón y cebollino. Para Irma, lo destacable fue "el emplatado", aunque fuera de cámara criticó que "estuviera un poco insípido". Rosa Benito reconoció que le había "gustado mucho", especialmente por uno de sus componentes, el polvo de faraón, que, cómo no, dio pie a comentarios subidos de tono. La más rotunda fue Belinda Washington: "Me ha encantado, creo que es muy diferente, ya que el aguacate queda muy bien con la manzana".

Loles León demostró una gran 'autoconfianza' en sus habilidades culinarias.

Entre plato y plato, Loles León comentó un pequeño roce que tuvo con Madonna (60) en una ocasión. La actriz recordó que ella estaba en el escenario y que al ver que la norteamericana no le prestaba atención no dudó en llamarla la atención. Jane Fonda (81), Jack Nicholson (82) y, sobre todo, Antonio Banderas (58) fueron los otros protagonistas de las vivencias de Loles en Hollywood.

A pesar de todo, la palma llegó con la historia de Jeremy Irons (70). Supuestamente iban a hacer una cama redonda, pero al apagarse la luz, Loles León se cayó mientras buscaba el interruptor, rompiéndose la pelvis. "Estuve 45 días escayolada", rememoró.

Tras ese paréntesis, el menú volvió a reclamar la atención con el plato principal, Mar y montaña, un plato de contramuslos de pollo con cigalas, con el que la anfitriona quiso marcar territorio: "Es una receta un poco más preparada y elaborada que el pollo de Irma, hay muchos ingredientes", valoraba durante su preparación, un momento que aprovechó para dejar otra píldora contra su enemiga íntima. "A ver si Irma me deja hablar en mi cena, me va a costar mantenerla callada. Creo que voy a tener que decir muchas veces 'es mi momento'".

Lejos de polémicas, las valoraciones fueron unánimes, positivas. Rosa Benito y Belinda Washington apreciaron "la fusión de sabores", al igual que Irma Soriano, aunque ésta última reconocía fuera de cámara que "entre el pollo de Loles y el mío, me quedo con este último".

Quedaba el remate, el postre, Palmera cremosa. Irma Soriano fue la encargada de disipar las dudas: "Estoy rebañando mucho, me ha gustado, no he notado el amargor de la piña" valoró. Hasta Rosa Benito, que reconoció que no le gusta demasiado el dulce, dio buena cuenta de ello.

Loles León reconoció que se había sometido a una operación en la zona genital.

Se esperaba el momento de las valoraciones, pero llegó otro momento picante, protagonizado, cómo no, por Loles León. Preguntada por Rosa Benito, reconoció que se había sometido a una operación en la zona genital: "Es un láser que te hidrata la vagina, en la menopausia todo se reseca mucho. Son tres sesiones. Y he notado mucho placer después".

El fin de fiesta habitual dejó pasó a las votaciones, pero como a la anfitriona le tocó en el primer programa el comodín de conocer las puntuaciones de sus rivales de primera mano, a la cara. Todas las invitadas fueron muy diplomáticas, con Rosa e Irma dando 7 puntos cada una y Belinda un 9, para un total de 23 puntos, lo que le sirve para igualar al frente de la clasificación con Rosa Benito.

[Más información: La vida sexual de Loles León en ‘Ven a cenar conmigo gourmet edition’: entre Tinder y camas redondas]

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