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La vida de la presentadora Ivonne Reyes (57 años) dio un importante viraje el miércoles 12 de marzo de 2025, cuando, cargada de valentía y con gran sinceridad, afrontó de cara el aciago trance que vive: está pasando por un complicado momento económico y lidia, además, con una depresión. No, no está siendo su mejor período.

Reveló la recordada conductora de El precio justo que se ha acogido a la Ley de la Segunda Oportunidad, que ha puesto a cero sus deudas y que ahora su vida empieza de cero. Está ilusionadísima -todo es compatible- con un proyecto en el que ha invertido su tiempo: el pódcast La mirada de Ivonne, en el que entrevista a diversas personalidades.

En medio de su revelación, el pasado sábado, 15 de marzo, se publicó una noticia que ha incendiado aún más -si cabe- su vida actual. Esdiario publicó que una mujer dice conocer al verdadero padre biológico del hijo de la venezolana, Álex Reyes (24) y que unos sobrinos de este señor estarían dispuestos a ayudar a Pepe Navarro (73) y cotejar el ADN.

Ivonne Reyes en un acto público en Madrid, en mayo de 2022. Gtres

Todo ello, en aras de demostrar que el cordobés no sería, según esta versión, el progenitor del joven actor. Conviene dejar claro que, más allá de la aparición de esta supuesta familia biológica, la Audiencia Provincial de Madrid ya habló en otros escenarios, en los que cuentan: una sentencia firme de 2012 dice que Pepe es el padre legal y biológico de Álex. 

La historia de esta paternidad no hace falta volver a contarla, pues por todos es sabido que Navarro se negó a someterse -hasta en cinco ocasiones- a las pruebas de ADN y un juez actuó en consecuencia. Tras la información escrita por Jesús Manuel Ruiz sobre esa presunta familia biológica, EL ESPAÑOL ha podido conocer la reacción de Ivonne. 

La venezolana posando en un 'photocall', en Madrid. Gtres

Ella se niega a hablar sobre esta cuestión. No quiere saber nada acerca de un caso que para ella ya fue juzgado. No quiere decir nada. Silencio por su parte. Eso sí, este diario ha podido saber, a través de una fuente de total solvencia, que la venezolana ha encajado con gran sentido del humor esta noticia.

Tal y como lo explican, Reyes se habría "reído" de esto. No se da, pues, ningún tipo de importancia ni de tiempo a esta cuestión, que se califica de "absurda". Insiste el informante en que hay una sentencia "firme" y que "nada más hay que decir".

Ivonne pasó página, cambió de libro, y no va a hablar de cosas del pasado. Ella mira al frente. "Pepe va a sentarse en un ¡De Viernes! ¿Para qué? No será para responder a Ivonne porque ella no habló de él. Ella ya no habla de él", se desliza.

La ocupación y preocupación actual de Ivonne pasa por recuperarse a todos los niveles, económica y anímicamente. Está empleándose duro para conseguirlo y no presta atención a aspectos que le procurarían daño. A nivel profesional, no puede estar más feliz.