Este jueves ha arrancado la 72 edición de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (MBFWM) y, como en cada año, ha reunido a los rostros más reconocidos de nuestro país. Entre ellos, Begoña Gómez (45 años), quien no ha querido perderse el desfile de Devota & Lomba.
Begoña ha asegurado que está viviendo la Fashion Week "muy bien". Tras los meses de confinamiento y tras haber superado el coronavirus, Gómez, su marido, el presidente Pedro Sánchez (48), y sus dos hijas se fueron de vacaciones estivales para desconectar de la pandemia y descansar tras unos meses muy difíciles estando en el punto de mira.
La primera dama ha apostado por un maquillaje que resaltaban sus ojos.
Ahora, con las pilas recargadas, la esposa del líder del Ejecutivo asegura que se encuentra muy bien: "Bien, bien, estupenda, gracias", ha afirmado a su llegada. La aparición de Begoña Gómez ha impactado y ha destacado por el ligero cambio en su melena -al menos desde su última aparición pública- y por su arriesgada y moderna apuesta estilística.
La primera dama de España -el concepto de primera dama, en realidad, no existe en este país y de existir se le atribuiría a Letizia- ha mantenido su melena larga, que se ha convertido en su seña de identidad, pero le ha dado un toque más fresco. Así, se ha mostrado con las puntas teñidas de un rubio más claro y peinada con ondas al aire y flequillo.
En cuanto a su outfit, Begoña Gómez, que es seguidora de la moda y se ha convertido en una habitual en la MBFWM, ha apostado por un sencillo vestido en color de negro, sin mangas, de corte midi y con un ligero escote que ha dejado al descubierto su bronceado.
Y es que, hasta hace unas semanas, la primera dama y su marido estuvieron disfrutando del verano en Lanzarote. Se instalaron, en concreto, en la Residencia Real de La Mareta, un palacio que Patrimonio Nacional posee en el municipio de Teguise de la citada ínsula. Antes, la de Bilbao ya había estado en Almería con sus hijas.
Begoña Gómez y Modesto Lomba, en el desfile del diseñador.
Este jueves, la mujer de Sánchez se ha adelantado al otoño y se ha atrevido con una mezcla arriesgada. Ha combinado esta prenda con unas botas blancas de punta y tacón fino, que se han convertido en el foco de su atuendo. Como complementos, la primera dama únicamente ha lucido unos pendientes en forma de aro en color plata y su alianza de matrimonio y anillo de compromiso. En esta ocasión, la de Bilbao ha prescindido de bolso.
Begoña, además, ha optado por un maquillaje en el que ha resaltado sus ojos gracias al eyeliner en color negro. La mascarilla, un requisito obligatorio en cada acto público, ha ocultado cualquier otro detalle de su rostro.
Durante el evento, la mujer de Pedro Sánchez ha intercambiado palabras con el diseñador Modesto Lomba (58) y artífice de la nueva propuesta de la marca. Una colección en la que reivindica los orígenes y el movimiento slow fashion, a través de la moda made in Spain. A su desfile, también han asistido otras personalidades como la modelo y exesposa de René Ramos, Vania Millán (42), quien ha optado por el mismo color de ropa que Gómez.
El estilo de Begoña
La mujer del líder socialista suele seguir una misma línea estilística, en la que prevalecen los colores neutros y los tacones. Dos características que ha mantenido este jueves, en su aparición en la MBFWM. Begoña Gómez, además, tiene una particular predilección por los cortes midi y los bolsos. Sin embargo, en esta ocasión ha preferido estar con las manos vacías.
Este jueves, Begoña Gómez también ha presumido de bronceado.
Pero más allá de sus looks, lo que ha sido una constante en la esposa de Sánchez es su melena. Si bien este jueves ha lucido un ligero cambio en su color y peinado, Begoña Gómez la ha dejado suelta como en todos sus eventos.
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