Han pasado exactamente dos años desde que Jorge Javier Vázquez (49 años) decidió deshacerse de dos de sus propiedades inmobiliarias más queridas. En abril de 2018 sacaba al mercado su espectacular chalet situado en la urbanización madrileña La Florida, donde compartió sus mejores años junto a su expareja Paco. A principios de ese mismo verano, tal y como informó en exclusiva JALEOS, el presentador decidía despropiarse también de su apartamento en la céntrica zona de Sol. Sin embargo, pasados más de una veintena de meses se puede constatar el fracaso en su venta. 

Los anuncios de ambas viviendas han desaparecido de las webs inmobiliarias en las que aparecía hasta entrado el año 2020. El comunicador catalán ya advirtió el pasado verano sobre las dificultades que estaba teniendo para conseguir compradores, pues "nadie visitaba siquiera sus casas". "Me las voy a tener que comer con patatas", predijo entonces. Y según ha podido saber este medio, los peores augurios se han hecho realidad, empujados en gran medida por la complicada crisis sanitaria que atraviesa España.

La decisión de borrar las imágenes de sus dos casas malditas de los portales inmobiliarios responde únicamente a que le ha sido imposible venderlas, según ha podido saber JALEOS. Tras realizar varias bajadas en el precio de su apartamento de la capital en muy poco espacio de tiempo, y ver que seguía sin obtener ningún interés por parte de posibles compradores, el presentador se ha visto obligado a quitar los anuncios porque mantenerlos expuestos sería aún más perjudicial. Cuanto más tiempo esté el inmueble visible en las webs, más caro le puede salir al propietario, pues un largo periodo en los portales online de este tipo suele requerir mayores reducciones de precio en el inmueble.

Debido a la situación actual de pandemia el sector inmobiliario es uno de los que más se está resintiendo y se está viendo ampliamente afectado por la incertidumbre que desata -y desatará en la economía- el Covid-19. Este hecho repercute directamente a quienes quieren deshacerse de sus propiedades, como es el caso del presentador. Fuentes expertas aseguran que en estos momentos "no se pueden visitar los pisos y nadie está dispuesto a comprar" y mucho menos inmuebles tan caros, por lo que la mayoría de propietarios sufrirán la misma suerte que Jorge Javier.

Su casoplón en El Plantío

Ubicado en la exclusiva urbanización madrileña La Florida, una de las mejores zonas de la capital, se trata de un lugar repleto de lujo. Es por ello, que las cifras que se manejan en su venta son altas. El catalán pide 4 millones de euros por su gran chalet.

La vivienda se presenta en una casa independiente de 700 metros cuadrados rodeada de un extenso jardín. Esta parcela exterior abarca 2.000 metros cuadrados, cubiertos de vegetación, lugar en el que disfrutan estos días de confinamiento sus queridos galgos.

La casa dispone de cuatro habitaciones en tipología de dormitorio y cinco cuartos de baño, una amplísima sala de estar y una cocina moderna. Hay que trasladarse a la parte baja de la vivienda para encontrar un dormitorio de servicio -con puerta al exterior y su respectivo baño en suite-, un salón mayoritariamente destinado a los trabajadores domésticos y una sala multiusos. Pero la zona más espectacular del chalet se ubica en la planta cero. Su majestuoso hall principal recibe a los huéspedes y en el mismo recibidor se ubica un aseo y un salón de más de cien metros cuadrados. En esta última estancia, desde sus ventanales al exterior se puede visualizar el porche, la zona verde en la que reina la piscina y un gimnasio al aire libre.

Su céntrico piso en Madrid

Según pudo saber en exclusiva JALEOS en el mes de junio de 2018, el comunicador sacó al mercado la casa que posee en Sol, en pleno centro de Madrid. En ella ha pasado sus etapas de soltero así como sus épocas de mayor trabajo en el corazón de la capital.

Tal y como detallaba la web inmobiliaria en su anuncio, se trata de un "espectacular y señorial piso en tercera planta. La vivienda es exterior, muy luminosa y con amplias estancias". El piso, totalmente reformado de diseño único con materiales de alta calidad y muy buena distribución, consta de amplio salón con chimenea, aseo de cortesía, cocina con zona de office, dos dormitorios con baño en suite, el principal con jacuzzi y vestidor".

El lujo no solo se respira entre esas cuatro paredes y sus estancias exclusiva, sino que tras la ventana se alza una ciudad con vida, pues está ubicado en un lugar privilegiado: al lado del Teatro Real, la Plaza de Ópera y frente el Palacio Real.

El precio de salida del inmueble era de 1.500.000 euros, pero sufrió tres fuertes bajadas, hasta reducirlo en 350.000 euros, y plantarse así en la cifra de 1,15 millones de euros.

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