Andrés Pajares está a punto de publicar su primer libro, que llevará por nombre Mis memorias antes de que se me olviden. A sus 79 años, el actor habla con ilusión de este nuevo proyecto, que es uno de los pocos retos profesionales que le faltaban por realizar.

El madrileño narra desde su niñez y su primera experiencia sexual hasta su amplia trayectoria profesional y la muerte de su primera mujer y madre de su hijo Andrés, Carmen Burguera, que falleció a la edad de 33 años debido a un cáncer de pulmón. Un repaso por la vida de un hombre lleno de experiencias, que ha conseguido sintetizar en un "libro cómodo y entretenido", cuya comunicación y gestión lleva su actual pareja, Juana Gil, con la que, por el momento, no se casará porque "están muy a gusto como están". Así lo ha desvelado el artista a este medio.

¿Cómo surgió la idea de este libro?

Era un capricho. Fíjate tú, que llevo trabajando desde que tenía cinco años, y todas las anécdotas que tengo para contar... Mis cosas profesionales, mi niñez, y más. Me apetecía muchísimo contarlo, no contar toda mi vida, pero sí que es un libro divertido, cómodo y todo lo que cuento es verdad.

Al final son 79 años de una gran trayectoria y es complicado sintetizarlo.

Sí, bueno... En el libro hay muchos cambios. Desde mi comienzo de mi vida artística hasta el Goya que recibí, o películas que he dirigido. Mi contacto con algunos directores como Berlanga, Carlos Saura, Garci...

La gente que conoce al Andrés Pajares artista... ¿Qué puede ver la gente de ese Andrés que no haya visto antes?

Anécdotas de niño, porque ten en cuenta que yo soy hijo único. Empiezo casi desde mi nacimiento, desde los 3 o 4 años. 

Portada del primer libro de Andrés Pajares.

¿Fue feliz en su infancia?

Regular, porque fui hijo único. A mis padres se les murió un hijo de bronquitis, porque en aquellos tiempos no había medicamentos. Once años después llegué yo, y además usando protección. 

También habla sobre su primera experiencia sexual.

Así es. Mi primer orgasmo fue con cuatro años. Sí, es algo posible y más con ayuda de alguien. Cuento también en la novela una experiencia telefónica que viví con 9 años, en un capítulo que se llama "por qué me llamo Pajares cuando debería llamarme 'Masturbares'" -risas-.

Dice que es un libro divertido... ¿Cree que se le da mejor hacer reír que llorar? Ha tenido diferentes registros a lo largo de su vida.

Hacer reír es muy difícil... En el libro me encuentro con Cantinflas, que yo admiraba desde niño. 

¿Está destinado a un público más adulto? 

El hijo de mi pareja ha visto el borrador y se reía con él. Es curioso porque ya son muchas generaciones detrás. Yo voy por la calle y me viene tanto una señora mayor como un niño. 

¿Se ha emocionado en algún momento a la hora de escribir las memorias?

Sí hay momentos emotivos pero no quiero entrar en hacer llorar a la gente. Lo único así, de las cuatro parejas que he tenido, es de la madre de mi hijo, que tuvo la desgracia de morir de un cáncer de pulmón a los 33 años. No hablo mucho más del tema. 

Andrés Pajares y Juana Gil en una imagen de archivo.

Supongo que la persona que tiene ahora mismo al lado también tiene cabida en el libro.

Pues no, solamente hay una foto suya. A ella, además, no le gustaría, pero yo me empeñé y sale una foto suya porque ella es mi actual pareja. Ella es la que me lleva todo.

He leído algo de boda...

De momento estamos muy a gusto así, pero si la hay, se va a enterar muy poca gente.

Le cuesta un poco sacar esa parte más íntima y personal.

Yo trato de evitarlo, y hay cosas que no son para contarlas en un libro. Lo que pasa es que hay gente que cuando se separa encuentra un chollo en esto de la ruptura. A Juani le han ofrecido un cheque en blanco para hablar de mí. Si es que ella solo va a decir cosas bonitas de mí a pesar de que ha vivido cosas insufribles. Pero lo que nadie conoce, por ejemplo, es que yo con un disco estuve número uno en los 40 Principales... De eso nadie se preocupa.

Además del libro, ¿tiene algún proyecto en teatro?

Algo de teatro había, pero teatro he hecho muchísimo. Ese fue mi trallazo, porque querían operarme otra vez. Me queda una operación todavía, pero yo ando perfectamente aunque tengo que hacer ejercicios.

Ahora está bien de salud.

Estoy bien y antes también lo estaba. Llevo cuatro operaciones de espalda pero estoy magnífico. Me han puesto clavos, y aunque Terminator a mi lado no es nada, estoy bien. Me dijo mi cirujano que tenía que andar lo más despacio posible y eso estoy haciendo.

¿Qué le queda por hacer a Andrés Pajares?

Pues como no trabaje en el circo... -risas-. Creo que no me queda por hacer nada dentro del mundo del espectáculo. En mi vida personal tampoco, porque no puedo jugar al fútbol.

[Más información: El día que el hijo de Andrés Pajares fue confundido con el asesino de Versace]

Noticias relacionadas