Andrea Molina, la hija de Lydia Bosch (55 años) y Micky Molina (55), cierra etapa este verano tras haber acabado sus estudios universitarios. La joven de 27 años está deseosa de empezar con nuevos proyectos, de hacer castings para series, películas y todo lo que le venga. Y es que, los genes tiran y ella también quiere ser actriz.

Desde pequeña siente la actuación como su vocación y, ahora, una vez dejado atrás los miedos y las inseguridades, la joven empieza a sentirse cómoda en los castings. Aunque, como bien explica, no le gustan nada las etiquetas y las pocas oportunidades que el mundo de la actuación le da a la gente nueva. Ella no lo es, gracias a sus apellidos, pero tampoco sabe en qué situación la coloca eso en el terreno.

Que contenta se te ve con todo aprobado.

Por fin cierro etapa, que me apetece mucho, para centrarme en lo que me gusta a mí y nada; confiando en que como cierro una etapa, que era dedicada a algo que está bien pero no es lo que me llama más la atención, ahora van a venir cosas maravillosas: proyectos, pelis, series y todo.

Ahora viene lo bueno.

Ahora a disfrutar de lo que me gusta.

¿Qué vas a hacer en verano?

No paro, me voy a muchos sitios pero no digo dónde me voy.

¿Con quién?

Con mi familia, con mi pareja, con amigas... de todo.

Has estudiado para formarte y tener una licenciatura pero, ¿sigues queriendo ser actriz?

Sí.

Andrea Molina en el Universal Music Festival.

Lo tienes en los genes.

Es vocacional, a veces cuando me entra el bajón digo: "Se acabó, no quiero más", pero es que después vuelvo. Cuando algo es vocacional es imposible dejarlo, es algo que te mueve y que te llama constantemente.

¿Le pides consejos a tu madre?

Yo intento guiarme por mí, por mi intuición y escuchar la voz que todos tenemos dentro. Una vez que tomo la decisión sí que pido consejos a los míos, pero la decisión está tomada.

Los apellidos Molina Bosch pesan.

Como todo en la vida, te da cosas buenas y cosas malas. Lo que hay que aprender es a asumirlo y a llevarlos con orgullo, a dar el callo cuando hay que dar el callo. Demostrar que tienes apellidos pero que tienes tu propia esencia y tú eres buena por lo que eres, no por tus apellidos.

¿Cine, series, teatro?

Todo. No pido. Lo único que pido es que me den una oportunidad, que confíen.

¿Qué tiene Andrea Molina?

Eso, que soy Andrea Molina y que como yo no hay nadie más. Igual que como otra no hay nadie más. Cuando hablo con amigos me dicen: "Ve diciendo lo que vas haciendo", pero yo digo: "Si me quieren a mí, me querrán a mí porque no hay otra como yo". Al final es que confíen, solo pido que confíen y que den oportunidades. A veces entiendo que la gente pone dinero y que quiere recogerlo después pero creo que hay mucho talento en España. Tengo muchísimas amigas y amigos que se dedican a esto, que luchan cada día y que faltan oportunidades a gente nueva. No etiquetar, yo estoy cansada de lo de 'queremos a gente conocida', queremos caras nuevas'. Yo no soy nueva porque tengo apellidos pero, ¿en qué punto estoy yo?

Qué difícil es el momento casting.

A medida que pasa el tiempo es mejor. Cuando creces y coges más confianza en ti misma se hace más llevadero.

Tienes una vena dramática importante, bailas, cantas... eres muy completa.

Bueno canto... más bien entono. Me lo paso bien que es lo importante, hay que disfrutar y dejar de pensar. Yo antes pensaba mucho qué subir a las redes sociales, medía mucho y ahora no. Al final quien te quiera criticar, te va a criticar. Hay que echar un paso para atrás y seguir tu esencia, ser feliz que estamos aquí para eso.

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