Iker Casillas (37 años) ha sido ingresado este miércoles al mediodía tras sufrir un infarto durante el entrenamiento del Oporto, según han informado algunos medios portugueses. Esta repentina noticia ha pillado a Sara Carbonero (35) 'fuera de juego'. Y es que la periodista se encuentra en España, más concretamente en Tarifa, donde ha realizado algunas entrevistas para la cadena en la que trabaja.
Lo cierto es que la pareja ha llevado una vida muy feliz y tranquila en los últimos tres años y medio, lejos del ruido y de la presión de los medios de comunicación. Su llegada a Oporto supuso un bálsamo para su ajetreada vida. De hecho, hace tan solo una semana, ambos compartían con su círculo más cercano los atributos del país vecino, como, por ejemplo, lo diferente que es del español y su riqueza en todos los sentidos: "Oporto es una ciudad espectacular y está desaprovechada por los españoles", decían el futbolista y la periodista sobre su país de acogida.
Su alegría se multiplicó cuando el Oporto se clasificó para cuartos de final de la Champions League el pasado mes de marzo, una noticia que hizo estallar de felicidad a la pareja, ya que se vivió como una histórica victoria para el equipo local y también para todos sus seguidores.
La familia Casillas-Carbonero ha crecido entre las calles lusas, contagiándose de las buenas vibraciones de la ciudad. Esta última noticia sobre el ingreso del deportista madrileño ha alterado su pacífica vida, pero afortunadamente todo ha quedado en un susto.
El guardameta ha tenido que ser trasladado al hospital CUF de Porto, donde le han practicado un cateterismo, y donde, a su vez, le han informado de que no volverá a pisar wl terreno de juego en lo que queda de temporada.
La que por el momento no se ha manifestado es Sara Carbonero, que se encuentra a 770 km de Oporto por motivos laborales.
El éxito de Sara Carbonero en los negocios
No fue hasta finales de 2015, dos meses después de su mudanza a Portugal, cuando Sara decidió abrirse una cuenta oficial de Instagram. Aunque llegó tarde, pronto se puso en la línea de las mujeres influyentes más seguidas de este país. En la actualidad cuenta con 2'2 millones de seguidores, la clave perfecta para que las marcas la vean como herramienta publicitaria de sus productos y servicios.
Por otra parte, la corta distancia entre Oporto y Madrid -apenas una hora de vuelo- ha sido fundamental para que Carbonero haya podido viajar a la capital de España y volver a su hogar tras de su jornada de trabajo en el mismo día. En el último año, por ejemplo, la presentadora ha ejercido de embajadora de cinco grandes eventos en España.
El pasado mes de julio fue la cara visible de un evento de L'óreal dentro de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. Al día siguiente, presentó la gala Premio L'óreal 2018. Polaroid, Ágatha, Cortefiel y un sinfín de marcas han contado con los servicios de imagen de la toledana para representar sus productos, lo que le han reportado una importante cantidad de ingresos.
Sara Carbonero volvió a su casa, Mediaset España, el pasado mes de febrero. En sus propias palabras. "Estoy muy contenta por incorporarme de nuevo al equipo de Deportes Cuatro y recuperar una sección que ya tuve la suerte de hacer en el año 2011. Vamos a buscar historias emotivas y de superación personal además de entrevistas pegadas ala actualidad con deportistas de élite".
En la actualidad, se encuentra en un espléndido momento personal y profesional. En lo que respecta a su trabajo, las noticias son más que positivas: a sus campañas con marcas de moda, belleza y bienestar, se ha sumado su regreso a la televisión: su hábitat natural.
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