La casa francesa de lencería Etam convirtió este martes el estadio de Roland Garros en una pasarela que apostó por la diversidad y por una moda cada vez más ecológica, en línea con el compromiso de la firma en favor de un desarrollo sostenible.

En la pista Simonne Mathieu, la tercera en tamaño del célebre torneo de tenis, 3.500 invitados presenciaron el espectáculo, el XII anual del grupo, y cuya celebración coincidió como es habitual con la Semana de la Moda parisina.

Entre las 80 modelos, capitaneadas por la francesa Constance Jablonski, un 30 por ciento se salían de los cánones de este tipo de desfiles y personificaron la intención de Etam de mostrar que sus prendas están dirigidas a todo tipo de cuerpos.

"Es una colección para todas las mujeres y para todas las situaciones, de lo sexy a lo deportivo. Es una lencería para sentirse bien, guapa y, ante todo, una misma", explicó a EFE el gerente de la casa, Laurent Milchior.

Su lema, "Feel free", invita precisamente a "liberarse de los límites autoimpuestos", "en una sociedad en la que se construyen barreras mentales en las mentes de las mujeres", según indica la propia firma en un comunicado.

Conjuntos con abundantes juegos de transparencias y una gama cromática que combinó el negro con piezas más luminosas en amarillo, verde o estampado floral protagonizaron el desfile, que se retransmitió en directo en internet y ofreció al público la posibilidad de comprar las piezas en directo.

Etam hizo de esta convocatoria una fiesta, con las actuaciones en directo de Aya Nakamura, Angèle, Beth Ditto o Ava Max, y una primera parte en la que invitados y modelos compartieron los distintos decorados habilitados y posibilitaron ver de cerca los conjuntos.

Pero más allá del espectáculo, la firma quiso hacer valer su compromiso de cara a una fabricación más sostenible: para el año 2025 quiere que el 80 por ciento de sus productos sean eco-concebidos, un porcentaje que el próximo verano llegará ya al 20 por ciento.

"Nosotros, como jefes de empresa, debemos hacer un esfuerzo colosal. Mi gesto personal es que avancemos lo más rápido posible. ¿Seremos perfectos? No, pero la idea es progresar cuanto antes", destacó Milchior.

El programa We care, que se hará visible en las tiendas en los próximos días, subraya la importancia de que el sector de la lencería y el de la moda en general sea más justo, duradero y responsable.

Favorecer los algodones biológicos o la producción "made in France" se inscriben en esa iniciativa con la que Etam dice querer ser "la marca de lencería para el gran público la más avanzada al respecto".

Su desfile en París marcó el inicio de ese camino y dejó claro su defensa de este tipo de shows, en un momento en el que se ha anunciado que la firma estadounidense Victoria's Secret renunciará este año al suyo.

"No es solo un espectáculo. Lo organizamos durante la Semana de la Moda porque somos una marca de lencería a la moda, algo que es extremadamente importante. Y es una fiesta, pero una fiesta pública, en directo, no cerrada y retransmitida más tarde. Etam apuesta por la espontaneidad, que es una gran baza de la marca", concluyó su gerente.

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