El verano está a la vuelta de la esquina. Apenas faltan diez semanas, algo más de dos meses, para que, de nuevo, los días sean automáticamente más largos, el Sol brille con fuerza en nuestras tierras y a todos nos apetezca llevar menos cantidad de ropa. Por supuesto con tejidos más acordes.
A los algodones y linos habrá que complementarlos con alguna pieza donde guardar nuestros personal ítems y para ello, Loewe tiene la respuesta. Desde la casa española cuya cabeza pensante es J.W. Anderson (36 años) han reinterpretado algunos de sus bolsos más icónicos el Hammock, el Balloon, el Cubi y el recién estrenado tote Anagram Jaquard, aunque nosotros nos quedamos, sin lugar a dudas, con el Horseshoe.
"El icono aparece bordado sobre un tejido de lienzo estructurado con doble urdimbre que ofrece mayor definición y textura, generando un efecto en tres dimensiones sobre los inequívocos tonos antracita y crudo", detallan desde la firma. El bolso Horseshoe tiene un marco con una estructura flexible y un cordón superior, y se remata con un pasador metálico lateral.
En una de sus últimas publicaciones, Rocío Osorno (33) ha posteado el que para ella es su "bolso favorito del verano 2021". Esta pieza de Loewe se encuentra en estos momentos agotada en su página web oficial, a pesar de su precio: 1.150 euros. Esta versión más pequeña se ha confeccionado en Jacquard de lona y piel de ternera con motivo integral de Anagrama.
Se encuentra ubicado en la sección femenina de la casa de modas, pero puede ser perfectamente unisex, como así lo muestran algunas de los posts del Instagram de Loewe. Lo ideal es llevarlo al hombro o cruzado, tiene bandolera ajustable para ello. Los charms son personalizables, tiene su emblemático forro de ante-oro y la gran novedad de esta recién estrenada colección: el anagrama viene en relieve.
Para averiguar el origen de este clásico, icónico, legendario print, hay que echar la vista atrás unos 50 años. Cabe recordar que Loewe es una firma con 175 años de historia. El anagrama original fue diseñado en 1970 por el pintor español Vicente Vela, "quien se inspiró en el metal plegado de los hierros tildados que se empleaban para marcar la piel del ganado".
Esas cuatro eles (L) entrelazadas se elevaron desde entonces a símbolo de la marca y sello de los productos de lujo de Loewe alrededor del mundo. Pese al aire renovado y fresco -acertadísimo- que el diseñador J.W Anderson le ha dado a Loewe desde que cogiera las riendas de la dirección creativa de la marca en el año 2013, el joven irlandés no ceja en su empeño de seguir luchando por exhibir el logo, el clásico anagrama, ahora reinventado. "El resultado es un símbolo más limpio y definido que se ha incorporado en toda la comunicación y el diseño de producto", se informa desde Loewe.
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