"Raffaella nos ha dejado. Se ha ido a un mundo mejor, donde su humanidad, su inconfundible risa y su extraordinario talento brillarán para siempre", señalaba un comunicado el pasado 5 de julio y la noticia se extendía por todo el mundo. Una de las más grandes artista fallecía tras sufrir un cáncer de pulmón que llevó en silencio para no preocupar a sus fans.

La artista, que nació en Bolonia el 18 de junio de 1943, fue un icono de la música y la televisión tanto en Italia como en España, países en los que presentó diversos programas, la mayor parte en la cadena italiana RAI y en Televisión Española, pero también realizó especiales en países como Argentina, Chile, México y Perú.

Raffaella Maria Roberta Pelloni cumplía 78 años el pasado 19 de junio y hace pocas horas se ha dado a conocer una noticia que ha alegrado el corazón a sus miles de seguidores y es que tras celebrarse un pleno se aprobaba este miércoles 14 de julio de 2020 recordar a la cantante poniendo su nombre a una plaza del centro de Madrid.

Esta iniciativa ha salido adelante gracias a los votos de PSOE, Ciudadanos, PP y Más Madrid, que han decidido conceder esta distinción a la italiana que fallecía hace unos días tras no superar la batalla contra el cáncer.

Una propuesta que fue presentada por Más Madrid para homenajear a la diosa italiana y con la que se da valor a su personalidad tan arrolladora y respetuosa con el colectivo LGTBI+. Una noticia que ya se ha convertido en viral y que ha sido muy bien recibida por todos los fans de la cantante que siguen llorando su pérdida.

Despedida multitudinaria

La diva italiana perdió la vida por una enfermedad que "atacaba su cuerpo". Así lo dio a conocer el coreógrafo Sergio Japino, uno de sus grandes amores y con quien seguía manteniendo una bonita amistad. "Raffaella nos ha dejado. Se fue a un mundo mejor, donde su humanidad, su inconfundible risa y su extraordinario talento brillarán para siempre", expresó entonces el coreógrafo a través de un comunicado, uniéndose al dolor de los familiares de la diva italiana. Poco después se desveló que aquella dolencia a la que hacía alusión el coreógrafo había sido un cáncer de pulmón.

Dos días después de su triste pérdida, comenzaron los actos de su impresionante despedida con un cortejo fúnebre y una capilla ardiente en Roma. Tal y como estaba previsto, el cortejo fúnebre con los restos de Raffaella Carrà partió desde la casa de la artista, en via Nemea, Roma, y recorrió varios lugares de la ciudad que fueron significativos en su vida. A lo largo de la tarde de su despedida, cientos de personas se congregaron en las inmediaciones del Campidoglio para entrar en la capilla ardiente de Raffaella. Ya dentro, muchos de ellos se mostraron muy emotivos e incluso se arrollidaron frente al ataúd. A la capilla ardiente de la artista también acudieron cantantes y personajes de la industria televisiva y musical italiana. 

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