Ahora, casi tres años después, parece que la cantante, ganadora de cinco premios Grammy, todavía tiene problemas para deshacerse de ella. Ahora, lejos de rebajar el precio -como hacen otras celebridades- y con las propiedades inmobiliarias de Florida en pleno auge en este momento, Shakira ha decidido vender la casa por un precio más alto. Una impresionante propiedad frente al mar de más de 750 metros cuadrados distribuidos en dos plantas, que la estrella de la canción adquirió en 2001 por más de 2,5 millones de euros. 

Desde que comprara la vivienda, la intérprete de Hips Don’t Lie se ha encargado de renovar el inmueble, incluyendo nuevos pisos de madera española, tres dormitorios más y la actualización de los sistemas de iluminación. Además de seis dormitorios, siete cuartos de baño y amplios salones, la propiedad cuenta con todo tipo de lujos. Desde un gran gimnasio, y una espaciosa oficina, hasta una zona de piscina con unas impresionantes vistas y una sala específica para fumar shisha, como guiño a su herencia libanesa. 

Su disgusto empresarial

En septiembre de 2020, Shakira y Gerard Piqué (34) vieron truncados su nuevo plan de negocio por culpa del coronavirus. La pareja se encontraba a la espera de continuar con un proyecto que iniciaron hace dos años y que entonces mantuvieron en la más estricta intimidad. Se trata, nada menos, que de un negocio de hostelería, el sector más golpeado por la pandemia. 

Fue a comienzos del verano de 2018 cuando se inauguró Blue Spot, el restaurante en el que la artista colombiana y el futbolista figuran como socios y que el 13 de marzo de 2020 cerró sus puertas como consecuencia de la crisis sanitaria. Así lo hicieron saber en su perfil de Instagram, con un mensaje firmado por Tomás Tarruella, fundador de En compañía de Lobos, el grupo del que forma parte el local. "Queridos clientes, amigos y equipo, hemos decidido cerrar Blue Spot Barcelona".

Y añadía: "Desde hoy día 13 de marzo y hasta que la situación mejore y las autoridades sanitarias lo aconsejen. Estamos en una situación extraña y muy seria. Hemos de colaborar en todo lo que podamos y es nuestra responsabilidad ayudar a frenar la propagación del virus cuanto antes". Desde entonces y, aunque muchos establecimientos de Barcelona ya han reabierto sus puertas, la situación del Blue Spot parada. Al menos para sus clientes, que a día de hoy están a la espera de noticias.

Blue Spot no es el primer negocio hostelero de Piqué. Antes de abrir las puertas de este local, el futbolista ya había incursionado en el sector con un restaurante de hamburguesas gourmet, que cerró sus puertas después del verano de 2017. Sin embargo, la noticia se dio a conocer a comienzos de 2018, cuando el catalán y Shakira trabajaban en la apertura de un local más ambicioso. La compañía encargada de gestionar el primer proyecto de Piqué en el sector hostelero fue Bas Alimentaria, la empresa que fundó el propio deportista en 2013, junto con Noel Alimentaria y la cárnica La Vall d’en Bas, debido a su pasión por la carne.

[Más información: Shakira y Piqué, a la espera de continuar con su discreto proyecto, afectado por el coronavirus]