Salvador Sobral (27 años) no ha podido recibir mejor regalo en vísperas de Navidad. El cantante recibió finalmente el ansiado corazón de un donante después de año y medio en lista de espera y tras más de tres meses ingresado en estado urgente. El pasado sábado su espera finalizó y le fue trasplantado el órgano vital. Este mismo lunes abandonaba la Unidad de Cuidados Intensivos y fue trasladado a planta, y hoy ya avanza positivamente en su recuperación.

[Más información: Sobral estrena corazón: evoluciona bien y Portugal respira]

Estos días, el portugués ha iniciado su rehabilitación con "un programa de fisioterapia y en las condiciones habituales de aislamiento que se llevan a cabo tras los pacientes que se han sometido a un trasplante de tales características". Así lo refleja el medio luso Vidas que recoge las palabras del entorno del eurovisivo que aseguran que "se encuentra bien" y que el joven está poniendo todo de su parte para ver mejoras en su situación a la mayor brevedad.

Savador Sobral y su hermana, fundidos en un tierno abrazo.

José Manuel Correia, director clínico de la unidad hospitalaria que se encarga del caso de Sobral, ha redactado un comunicado público, bajo autorización del cantante, en el que expresa el buen hacer del ganador de Eurovisión. Le definió como "un chico muy bien preparado" y que, tras visionar sus avances en rehabilitación, "su evolución entra dentro de lo esperado".

Pero se trata de una recuperación paulatina, por lo que "deberá permanecer entre 10 o 12 días en observación hasta que esté completamente estabilizado" para adecuar más fielmente su programa de fisioterapia. Y es que Sobral no quiere que se cometan errores y por eso se implicará al máximo en lo que los médicos le indiquen para que se cumpla lo que le han asegurado: que si todo avanza según lo previsto podrá hacer vida normal en un futuro muy próximo.

Aún es pronto para hablar del alta del cantante, pero en caso de que las cosas siguieran por el cauce actual, podría abandonar el hospital en menos de un mes. La noticia ha sido recibido con gran ilusión por sus paisanos portugueses que mostraban su preocupación en las semanas previas por el estado crítico en el que se encontraba Sobral sin un donante compatible. A una semana de Navidad, la magia de estas fechas ha actuado y quizá en breve, Salvador podrá amenizar las cenas de estos días cantando villancicos.

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