Según un estudio realizado en España, tener plantas en casa incrementa nuestro bienestar emocional y promueven significativamente sentimientos de relajación, felicidad y estados de ánimo positivos. Así que, para cuidar adecuadamente una planta de interior no debemos limitarnos a regarla, hay otros muchos factores que debemos tener en cuenta. Como ocurre con una persona, las plantas son delicadas y pueden enfermar, por eso una buena limpieza de sus hojas es fundamental para que la planta respire mejor.

La acumulación de polvo, la exposición a la contaminación solar y la falta de luz son factores que pueden reducir la producción de clorofila en las plantas. Por esta razón, es recomendable realizar una limpieza regular de las plantas de interior, especialmente si no reciben agua de lluvia. A continuación, te mostramos cómo hacerlo.

Cómo cuidar tu planta de interior

Cómo limpiar las hojas de las plantas

Para lograr óptimos resultados al limpiar plantas de interior, se recomienda colocar la planta bajo el grifo y enjuagarla con agua tibia, aplicando una presión moderada para evitar posibles daños. Sin embargo, los métodos de limpieza de las hojas pueden diferir según el tipo de planta y el sustrato. A continuación se presentan algunas alternativas para mantener las hojas en buen estado estético:

1. Agua natural

Como mencionamos anteriormente, el agua es el recurso principal para limpiar las hojas de las plantas. Puedes seguir las indicaciones anteriores o también optar por usar una manguera o un pulverizador.

Si la suciedad en las plantas de interior es considerable, puedes preparar una solución mezclando un litro de agua con unas gotas de gel de ducha y rociarlas con esta solución antes de enjuagarlas con agua limpia. Si decides utilizar este método, es recomendable cubrir el sustrato o inclinar la planta para que la solución solo se aplique en las hojas y no en la tierra.

2. Abrillantador natural

Esta técnica es efectiva para mejorar el aspecto de las hojas de tu planta, excepto para aquellas con hojas rizadas, aterciopeladas o con vellosidades. No se recomienda utilizar estos productos en ellas, aunque en el caso de otras plantas se puedan obtener resultados muy buenos.

Cuando decidas utilizarlo, simplemente pasa una esponja humedecida con agua jabonosa sobre las hojas para darles un mayor brillo. También puedes emplear aceite de oliva como abrillantador natural, ambos métodos dejarán tus plantas de interior relucientes.

3. Cepillo de dientes

Este método de limpieza es ideal para plantas de interior con hojas aterciopeladas o cubiertas de pequeños pelos. Dado que estas hojas son más delicadas y propensas a dañarse, se recomienda utilizar un cepillo de dientes viejo para limpiarlas.

Para empezar, sostén la hoja con una mano y pasa el cepillo suavemente sobre su superficie. Comienza desde la base y avanza con cuidado hacia la punta. Es importante enjuagar el cepillo ocasionalmente y dejarlo secar antes de volver a usarlo. Siguiendo este proceso, lograrás que tus hojas luzcan hermosas y bien cuidadas.

Consejos para la limpieza de las plantas

Además de regar y limpiar, el cuidado de una planta implica eliminar cualquier parte que esté en mal estado, como flores marchitas, hojas secas, amarillentas o débiles. Esto permite que la planta concentre sus recursos en las partes saludables y fomente su crecimiento.

Es crucial conocer las necesidades específicas de cada planta para brindarle el cuidado adecuado. Por ejemplo, algunas, como las cactáceas y suculentas, no toleran la humedad en sus hojas, por lo que se debe optar por la limpieza en seco.

Aunque la limpieza de las plantas de interior requiere solo unos minutos, sus efectos son muy beneficiosos. Un follaje limpio y saludable mejora significativamente la apariencia y vitalidad del entorno.

El exceso de polvo en las plantas puede dificultar su respiración, lo que afecta su capacidad para obtener energía del oxígeno durante la noche.

Es importante destacar que las plantas de exterior también deben limpiarse para mantenerse sanas y brillantes, aunque es más fácil debido a la ayuda de la lluvia.

Para dar un brillo extra a tus plantas de interior, puedes probar trucos como usar cerveza, vinagre pulverizado o un trapo con un poco de leche. Además, puedes mejorar su vigor agregando al agua o al sustrato suplementos naturales como posos de café, cáscaras de huevo o infusión de té frío, pero es importante investigar qué plantas se benefician más de estos remedios antes de aplicarlos.

Cómo limpiar una planta según su tipo de hojas

Para limpiar plantas de hojas grandes, se recomienda usar bayetas de microfibra o un material similar ligeramente humedecido. En cambio, para plantas de hojas pequeñas, un pulverizador es suficiente. Las hojas aterciopeladas y los cactus necesitan un cepillo de cerdas suaves para frotar con delicadeza y evitar movimientos bruscos.

Es esencial proporcionar un mantenimiento adecuado a las plantas de interior para mantenerlas en óptimas condiciones. Solo así lucirán hojas hermosas y un aspecto saludable.

La falta de limpieza en las plantas de interior puede obstruir su capacidad para respirar, ya que el polvo y otros agentes externos se acumulan en ellas. Esto puede reducir la cantidad de luz solar que reciben, lo que eventualmente podría llevar a enfermedades e incluso a la muerte de las plantas.

Recuerda que limpiar las plantas que no reciben agua de lluvia es crucial para su salud, y se recomienda realizar este procedimiento al menos dos veces al mes.