El yeísmo es un modo de pronunciación característico de varias regiones de nuestro país. Consiste en pronunciar la "LL" del mismo modo que la "Y". Una alteración fonética que implica que dos fonemas distintos se confundan y se empleen del mismo modo. Esta alteración es la que da lugar a la confusión entre las palabras halla, haya, aya y allá.  La mayor parte de los hablantes de español no distinguimos los sonidos correspondientes a los fonemas "Y" y "LL", por lo que se producen numerosos errores ortográficos.

A excepción de "allá" por su acento, la mayoría de los hispanohablantes pronuncian las palabras "halla", "haya" y "aya" de la misma forma. Desde el punto de vista auditivo, se ha generalizado la pérdida de la distinción de los sonidos que representan las grafías "LL" e "Y". Esto es lo que provoca que se puedan cometer fallos en la escritura.

Cuándo usar "halla"

Se utilizará "halla" cuando sea equivalente al verbo "hallar". Precisamente, "halla" se conjuga en segunda y tercera persona de singular del presente indicativo y en segunda persona de singular del modo imperativo.

El verbo "hallar" significa por lo general encontrar a alguien o algo. También puede referirse a observar o notar algo, descubrir la verdad de algo, entender una cosa después de reflexionar sobre ella o encontrarse a una persona o una cosa en un lugar determinado.

Ejemplos de uso de "halla" serían los siguientes:

  • El coche se halla en el parking más cercano
  • Él siempre halla todo lo que le pedimos
  • Halla el camino y podrás llegar pronto
  • El director halla la película muy interesante

En los ejemplos anteriores se puede observar que la palabra "halla" se podría sustituir perfectamente por "encuentra" y el sentido de la frase no cambiaría. 

Cuándo usar "haya"

Con la palabra "haya" nos encontramos también con otro verbo. En este caso, se trata del verbo "haber" conjugado en primera, segunda y tercera persona del singular del presente de subjuntivo. Se utiliza cuando se desea indicar que ha ocurrido algo, existir, deber o necesitar de. 

"Haya" seguido de participio se usa para la formación de los tiempos compuestos, como por ejemplo "haya visto", "haya querido", etc, o como verbo de una oración impersonal.

Ejemplos de "haya" como conjugación verbal serían los siguientes:

  • Espera que yo haya visto la película para hablar de ella
  • Mientras haya vida, hay esperanza
  • Es muy probable que no haya llegado el pedido
  • Lo ideal sería que Marcos haya visto a María en el concierto
  • Aunque haya tormenta, debemos salir

La palabra "haya" tiene un segundo uso. En este caso se trata de un sustantivo masculino y se utiliza para distinguir a un tipo de árbol. Un ejemplo podría ser el siguiente:

  • El haya de aquel bosque era realmente inmenso
  • Mi amigo tiene muchos hayas en su jardín

Hay una ocasión en la que tanto "halla" como "haya" pueden aparecer en una misma frase y llevarnos a confusión. En ese caso, debemos fijarnos en el contexto para distinguir entre uno y otro:

  • Solo come lo que halla en el campo ("solo come lo que encuentra en el campo")
  • Solo come lo que haya en el campo ("solo come lo que exista en el campo")

Cuándo usar "aya"

El uso de "aya" es mucho más sencillo que las dos palabras anteriores. Aquí nos encontramos con un sustantivo femenino que se emplea para hacer referencia a aquella mujer que se encarga del cuidado y la crianza de los niños en una casa. Es, por tanto, muy fácil de distinguir.

Ejemplos del uso de "aya" serían los siguientes:

  • El aya siempre les encarga que hagan todos los deberes
  • Mi aya me contaba cuentos todas las noches

Un dato muy a tener en cuenta es que a pesar de que "haya" y "aya" son sustantivos femeninos, deben ir precedidos de un artículo masculino para evitar la cacofonía. Es lo que sucede con la mayoría de los nombres comunes femeninos que comienzan por "a" o "ha" tónica:

  • El haya de este jardín
  • El aya de mi infancia

Cuándo usar "allá"

Por su particular grafía con el uso del acento agudo, "allá" no resulta tampoco difícil de distinguir en el contexto de una frase. En este caso, "allá" es un adverbio de lugar y se utiliza para hacer referencia a un sitio que se encuentra un tanto alejado o retirado de donde nos encontramos.

Algunos ejemplos del uso de "allá" serían los siguientes:

  • Mi casa está allá detrás de la colina
  • Allá veo el haya que plantó mi padre y que se halla en tan buen estado

"Allá" también puede servir para señalar un momento muy alejado del pasado ("Se conocieron allá por los años veinte") o formar parte de la locución "el más allá" para referirse al mundo de ultratumba ("Nos veremos en el más allá").