El cáncer de colon es, según datos del Observatorio del Cáncer de la Asociación Española Contra el Cáncer, uno de los tipos de cáncer más comunes en España. Se estima que solo en nuestro país en 2024 se llegaron a diagnosticar 41.169 nuevos casos de cáncer colorrectal, convirtiéndose con estas cifras en el tumor más frecuente diagnosticado en España y tanto en hombres como mujeres. Cifras preocupantes que lo sitúan por encima incluso de otros tipos de cáncer frecuentes como los de mama, pulmón o próstata.
Este tipo de cáncer tiene un importante vínculo con la alimentación, tanto a nivel de prevención, como por los beneficios que una correcta alimentación puede llegar a tener en pacientes oncológicos durante su tratamiento o fase de recuperación. Esto es algo que ha tratado recientemente en una entrevista al periódico Il Messagero el profesor asociado a cargo de la Unidad de Cirugía Oncológica Mínimamente Invasiva del Policlínico Gemelli de Roma y presidente de la EuropaColon en Italia, Roberto Persiani.
Según señala este experto, existen ciertos hábitos que pueden contribuir especialmente a la aparición de este tipo de tumores. Factores como la obesidad, el abuso de alcohol y la falta de cuidado de la alimentación juegan para este experto "un papel fundamental en la aparición de esta neoplasia". Factores lamentablemente cada vez más comunes entre la población joven. Y es que, aunque este tipo de cáncer era más común en pacientes de entre 60 y 70 años, el número de pacientes con este tipo de tumor por debajo de 50 años no ha dejado de crecer.
Claves en la alimentación para prevenirlo
Datos sobre los que el oncólogo Roberto Persiani se muestra muy preocupado y que pueden llegar a derivar en un mayor "miedo a realizar los exámenes y la falta de conocimientos". Sobre esto el experto señala también la importancia de vigilar el correcto estado de estas zonas: "Realizarse un exámen básico, la recolección de una pequeña muestra de heces para su análisis cada dos años", son para este experto pasos importantes para prevenirlo. Al igual que la vigilancia más exhaustiva de aquellos individuos que han tenido casos de este tipo de cáncer en familiares cercanos. Entre los signos más frecuentes suelen incluirse "irregularidades intestinales, sangre, anemia o dolor de estómago recurrente", advierte.
Sin embargo, para Roberto Persiani la parte más importante en el terreno de la prevención para este tipo de cáncer comienza en la alimentación y muchos años antes. En concreto, para el experto hay cuatro alimentos que es necesario limitar pero no eliminar para prevenir la aparición del cáncer de colon y uno de ellos es uno de los más consumidos en España: la carne roja. Este tipo de carne junto con la carne procesada, los azúcares y el alcohol, son cuatro alimentos muy relacionados con esta patología. Razón por la que sería necesario no eliminar su consumo pero sí limitarlo.
En el caso del alcohol, su consumo excesivo puede tener graves consecuencias para la salud. Entre las más destacadas se encuentran las enfermedades hepáticas, los daños neurológicos y los trastornos cardiovasculares. Además, diversos estudios han señalado que el alcohol actúa como un factor de riesgo importante en el desarrollo de algunos tipos de cáncer como este, especialmente el de hígado y el colorrectal.
En cuanto a la relación entre el consumo de carne roja y el cáncer colorrectal, un estudio del Instituto Nacional del Cáncer de EE. UU. ha aportado nueva evidencia sobre cómo este tipo de carne puede estar implicada directamente en el desarrollo de este tipo de tumor. La investigación identificó una firma genética específica en los tumores de pacientes que habían consumido habitualmente carne roja no procesada, lo que sugiere que ciertos compuestos presentes en la carne podrían dañar el ADN y contribuir al desarrollo del cáncer. Este hallazgo refuerza la recomendación de moderar el consumo de carne roja como parte de una dieta equilibrada y preventiva frente al cáncer colorrectal.