J. Rodríguez
Publicada
Actualizada

Si hay algo que no perdonamos los españoles es nuestra taza de café por la mañana y, realmente, esta bebida ha probado ser muy saludable. No sólo nos permite estar más espabilados cuando salimos de la cama, sino que además contiene un buen arsenal de sustancias antioxidantes y antiinflamatorias. Estas sustancias son conocidas por ser útiles para combatir enfermedades y el proceso de envejecimiento.

Pero debemos andar con ojo con qué café elegimos para llevarnos a casa porque sus beneficios podrían ser eclipsados por sustancias perjudiciales para la salud. Así lo ha explicado el nutricionista Luis Zamora en el programa de radio Atrévete de Cadena Dial. Los cafés que más nos suelen gustar a los españoles no siempre son los mejores para la salud y, concretamente, hay dos que deberíamos reducir en nuestra dieta.

"El café más sano es el natural", explica Zamora y añade que así debe anunciarse en su empaquetado. "Porque tanto el torrefacto como el mezcla se hacen con granos de café a los que se les echa azúcar. Luego, al tostarlos, en ese proceso se quema el azúcar y genera compuestos potencialmente tóxicos. Por eso, siempre recomendamos el café natural". A muchos les suele gustar estos cafés porque tienen un sabor más intenso.