Aunque en España seguimos siendo más de café, lo cierto es que el té es la segunda bebida que más se consume en el mundo por detrás del agua. A pesar de las malas lenguas que habían puesto a la cafeína el sambenito de poco saludable con respecto a una teína casi milagrosa, gracias a la ciencia sabemos que ambas son saludables y cuentan con múltiples beneficios para la salud. Mercadona tampoco es ajena a ello y por eso cada día incorpora más infusiones a sus estanterías, como el Té Chai llegado de India, que cuenta con numerosos seguidores.
El Chai es una mezcla de té negro con diversas especias que, al estilo británico, se bebe con leche, y al que han atribuido cualidades que lo hacen parecer el auténtico elixir de la vida, un sobrenombre que podría estar avalado por la evidencia científica. No en vano, un estudio publicado en el Annals of Internal Medicine ha conseguido relacionar el consumo de la variedad negra del té con un menor riesgo de muerte. Fueron los investigadores de los Institutos Nacionales de Salud quienes realizaron el estudio usando datos del Biobanco de Reino Unido.
El Masala Chai, que así se llama originalmente, es una bebida típica del sur de India que consiste en una mezcla de té con especias y hierbas aromáticas. La consumen las clases populares y se conoce igualmente como Chai, ya que incorpora a las hebras del té esas especias llamadas "calientes" que el Ayurveda, el arte de curar milenario del país, atribuye propiedades curativas: cardamomo, clavo, pimienta, anís estrella, jengibre y canela. En el oeste del país, no obstante, la base es el té verde y se le añaden almendras, cardamomo, canela, clavo y azafrán.
Té Chai de Mercadona.
El Té Chai Hacendado que podemos comprar en Mercadona se vende en una caja que trae 20 bolsitas de 2 gramos cada una y tiene un precio de 1,40 euros. En su listado de ingredientes figura un 30% de té negro, 17% de canela, 17% de jengibre, 15,5% de aromas, 7% de pimienta negra, 6,5% de cardamomo, 4% de anís estrellado y 3% de clavo. En su valor nutricional vemos que únicamente aporta una caloría por 100 mililitros de bebida infusionada y 0,3 gramos de carbohidratos, mientras el resto de valores se quedan a cero.
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Para hacer el Té Chai nos aconsejan verter 200 mililitros de agua hirviendo sobre la bolsita individual y dejar infusionar entre 3 y 5 minutos, dependiendo de cómo nos guste de intenso el sabor. Una vez lista la infusión, podremos añadir leche al gusto. En todo caso, recuerdan que no se debe meter la bolsita en el microondas en el caso de que calentemos el agua allí en vez de hacerlo en un recipiente al fuego. Está elaborado por la empresa Martínez y Cantó S. L. con sede en el municipio de Novelda, en Alicante.
Propiedades del Té Chai
Además de alargar la vida, como decíamos antes, el té negro contiene del 2 al 4% más de cafeína, por lo que estimula más la atención y nos mantiene alerta. Cuenta también con antioxidantes, flavonoides y polifenoles, que ayudan a protegernos de la oxidación celular y a reducir la inflamación. Junto con el verde, ha demostrado ser capaz de reducir la hipertensión al contener componentes vasodilatadores. Esta variedad también favorece la descomposición de las grasas y ayuda a que nuestro organismo absorba menos calorías.
Así, puede ser un buen aliado de las dietas de adelgazamiento, siempre que el Chai se combine con leche desnatada que sea baja en calorías. Destaca también por ser útil para calmar las náuseas y mejorar el sistema digestivo gracias a las especias que lo acompañan. La canela, además, cobra relevancia por ayudar a mantener a raya la glucosa en sangre. En todo caso, incluyendo una taza diaria, podríamos estar beneficiándonos ya de sus propiedades.
Un poco de historia del Chai
Se atribuye una antigüedad al Chai pareja a la creación de la medicinal ancestral Ayurveda, hace 5.000 años, pero la incorporación de la leche se la debemos a los británicos. La región india de Assam consideraba que esta bebida era medicinal y no se podría usar con valor culinario, pero la British East India Company insistió en su cultivo en el país para contrarrestar el monopolio que hasta principios del siglo XX ostentaba China y se empeñó en que los habitantes de India bebiesen este té.
Sin embargo, este consumo de té en el país, colonia británica por aquel entonces, continuaba siendo bajo. ¿Solución? Una agresiva campaña de publicidad de la Asociación del Té de la India que animó a las minas y fábricas textiles a dar té negro en los descansos a sus trabajadores, puesto que tenía más cafeína. Aquellas bebidas se servían a la plantilla al estilo inglés: con leche fresca fría y azúcar al gusto, por eso ha trascendido esta forma de tomar el Chai hasta nuestros días.
¿Cómo se elabora este té?
Aunque Mercadona nos lo facilita al máximo, para aquellos curiosos que quieran saber cómo hacerlo de forma tradicional, es importante aclarar que no existe una receta fija y cada región o familia lo hace de un modo diferente. El más sencillo es hervir una mezcla de leche y agua con las hojas del té, azúcar y especias hasta que hierva, aconsejándose que no se deje mucho tiempo para evitar el sabor amargo. Retiramos después las hojas y especias colándolo para que nos quede solo el líquido.
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