Los agentes de la Policía Municipal de Valladolid salvaban la vida a un bebé de 18 meses de morir ahogado por atragantamiento en la calle Merecedes, de la capital vallisoletana. Su rápida reacción fue vital para salvar a este pequeño, que se encontraba inconsciente al momento de su llegada, ayer al mediodía.

El Servicio de Emergencias 112 recibía ayer una llamada a las 13.39 horas, alertando de que un bebé de 18 meses se encontraba inconsciente en la calle Mercedes de Valladolid, con lo que parecía un atragantamiento, mientras su abuela le daba de comer. Hasta el lugar acudían los agentes de la Policía Municipal, que le realizaban le practicaron la maniobra de Heimlich y un primer masaje cardíaco y que conseguían que el pequeño volviera a respirar. Al momento, una UVI Móvil con un equipo médico llegaba al lugar, para atender al bebé, que posteriormente era trasladado al Hospital Río Hortega.