La diócesis de Zamora ha inaugurado con extraordinaria solemnidad el Año Jubilar diocesano bajo el lema: Raíces con Esperanza. El nuncio de su Santidad, Bernardito C. Auza, ha sido el encargado de proceder a la apertura de la puerta principal de la S. I Catedral, designada por el obispo diocesano como Puerta Jubilar y por tanto, símbolo de Jesucristo: “la puerta de las ovejas”.

Decenas de fieles han presenciado la celebración de la eucaristía inaugural del jubileo de Zamora, en un templo en el que se completó el aforo permitido por las autoridades competentes. Entre los asistentes, cabe destacar la presencia de las diferentes realidades diocesanas: sacerdotes, catequistas, celebrantes de la Palabra, seminaristas, delegados diocesanos, representantes de cofradías, directivos de la Junta Pro Semana de Zamora, religiosas, profesores y un importante grupo de agentes de Cáritas Diocesana de Zamora.

En este sentido, cabe destacar que la dimensión caritativa y social del Jubileo ha tenido un lugar preferente, puesto que por expreso deseo del obispo, Fernando Valera, han asistido a la eucaristía usuarios de diferentes centros y programas de Cáritas. No hay que olvidar que la colecta de la celebración se destinará, íntegramente, al proyecto de atención a la mujer vulnerable que se gestará a lo largo del Año Jubilar y que verá la luz una vez finalizado este año de gracia.

En la celebración inaugural han participado cuatro obispos de diferentes diócesis españolas: el administrador apostólico de Ciudad Rodrigo, Jesús García Burillo; el obispo de León, Luis Ángel de las Heras Berzal; el obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes; el obispo emérito de León y natural de Toro, Julián López Martín; además del nuncio de su Santidad, el prelado de Zamora, y en torno a 40 sacerdotes.

GALERÍA DE IMÁGENES (Fotografías: JL Leal / ICAL)