Zamora empieza a hacer realidad una de sus grandes apuestas: aprovechar todo el potencial del Duero como eje para un turismo más sostenible, activo y conectado con el entorno.
Esta semana, la Diputación ha visitado dos actuaciones que marcan un punto de inflexión en este camino: la rehabilitación del edificio de Los Pelambres, que ya está terminada, y el arranque de las obras del futuro Centro de Interpretación del Paisaje Cultural del Duero.
Ambos espacios se integran dentro del Plan de Sostenibilidad Turística “Corredor Ecoturístico de Zamora y el Duero”, un proyecto impulsado por la Diputación y financiado con fondos europeos Next Generation y la Junta de Castilla y León. La inversión total del plan ronda los 4,3 millones de euros.
Un edificio histórico
El primero de los hitos es la completa recuperación del edificio de Los Pelambres, ubicado junto al carril bici de Zamora, que ha pasado por una profunda reforma para mejorar su eficiencia energética.
Las obras han consistido en una reforma integral de la envolvente del edificio, que incluyó el desmontaje de la cubierta de teja para colocar un aislamiento térmico eficaz y luego la reposición de la cubierta.
Además, se sustituyó la antigua carpintería de aluminio por otra con rotura de puente térmico, lo que contribuye significativamente a conservar mejor la temperatura interior.
Para reducir aún más el consumo de energía, se instalaron placas solares en la cubierta, que generan electricidad limpia para el edificio, y un sistema de calefacción por aerotermia, una tecnología sostenible y eficiente.
Esta primera fase de la reforma ha contado con una inversión de 143.000 euros y deja el edificio preparado para ser un referente en eficiencia energética.
Ahora, en los próximos días, está previsto comenzar la segunda fase, centrada en la reforma interior. Se realizarán mejoras en albañilería, fontanería y electricidad para adaptar el merendero a la normativa vigente. Esta etapa contará con un presupuesto de unos 50.000 euros y se estima que las obras durarán alrededor de un mes.
Paralelamente, se abrirá el expediente para licitar la concesión del merendero, que estará en vigor durante 15 años, garantizando así el mantenimiento y la gestión adecuada de este espacio tan valorado por los zamoranos.
Un centro para entender el Duero
El segundo de los proyectos ya está en marcha al otro lado del río, sobre una finca de titularidad provincial.
Allí se levantará el nuevo Centro de Interpretación del Paisaje Cultural del Duero, un espacio pensado para divulgar el valor medioambiental, histórico y cultural de esta zona.
Diseñado por el arquitecto zamorano Luis González Prada, el edificio tendrá una sola planta de unos 200 metros cuadrados, con una estética integrada en el paisaje y criterios de eficiencia energética.
Contará con zona expositiva, recursos audiovisuales, un aula para actividades, espacios interactivos, un punto de información turística y servicios accesibles. En el exterior, se habilitará también una zona verde ajardinada para actividades al aire libre.
Estas dos actuaciones forman parte de un proyecto más amplio: un corredor ecoturístico que recorrerá buena parte de la provincia, enlazando rutas, senderos y recursos turísticos desde el entorno del Duero.
En total, se beneficiarán de este plan 19 municipios, entre ellos Fermoselle, Fariza, Torregamones, Moralina o Muelas del Pan.
Durante la visita a las obras, el presidente de la Diputación, Javier Faúndez, estuvo acompañado por el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y el vicepresidente segundo, Víctor López de la Parte.
Todos coincidieron en señalar que este tipo de iniciativas pueden convertirse en motores de desarrollo rural, atracción turística y creación de empleo vinculado al entorno natural.