Un golpe seco en mitad de la madrugada, una ventanilla rota y un vecino atento.
Así comenzó la historia que terminó con un hombre detenido por la Policía Nacional tras intentar robar en el interior de un vehículo estacionado en Salamanca.
El aviso ciudadano permitió actuar con rapidez y detener al autor cuando aún llevaba encima parte del botín.
Los hechos ocurrieron la pasada madrugada, cuando un vecino, alertado por los ruidos, se asomó y vio a un individuo rompiendo el cristal de una de las puertas delanteras de un coche.
Sin dudarlo, avisó a la Policía Nacional. Varias patrullas se desplazaron al lugar y, gracias a la descripción facilitada por el testigo, localizaron a un hombre en las inmediaciones cuya apariencia coincidía plenamente.
Al identificarlo, los agentes hallaron entre sus pertenencias varios billetes de distintas cuantías, un guante de silicona de color negro con puntos blancos y otros efectos que hicieron saltar todas las alarmas.
A pocos metros, el vehículo en cuestión seguía estacionado con la ventanilla destrozada y el interior visiblemente revuelto.
El propietario, que fue localizado y se personó momentos después, confirmó que le faltaban varios billetes de diez euros, monedas sueltas y una tarjeta de crédito.
Además, dentro del coche se encontró otro guante con las mismas características que el que llevaba el sospechoso.
Con todas las pruebas sobre la mesa, los agentes procedieron a su detención como presunto autor de un delito de robo con fuerza.
El detenido fue trasladado junto con los objetos intervenidos a dependencias policiales. Tras finalizar los trámites correspondientes, pasó a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Salamanca.
